Mudando la piel y la identidad
La noticia de que de las cuatro provincias catalanas en tan solo una el primer niño del año ha sido de padres autóctonos no es nueva. Sucedió por igual el primero de Enero del 2011, basta con cambiar la provincia de Girona por la de Tarragona y la noticia será prácticamente idéntica. De hecho el 75% de los primeros nacidos en todas las comunidades españolas son hijos de inmigrantes.
Sea como fuere, lo que puede resultar para algunos resultadistas una anécdota no hace más que presentarnos en bandeja un problema del que adolece nuestra sociedad desde hace ya varios años. No en vano el número de nacimientos inscritos en el Registro Civil con al menos uno de sus dos progenitores de otra nacionalidad ha crecido de forma paralela a la llegada de inmigrantes, aunque a un ritmo menor. En una década, la cifra de extranjeros residentes en España ha pasado de significar el 2% de la población a superar el 12%. En ese mismo período, los bebés con madre o padre extranjeros han aumentado del 6% al 24%. El último año fueron casi 120.000, sobre algo más de 490.000 nacimientos. Hace una década no llegaban a los 25.000, según los datos oficiales del Instituto Nacional de Estadística. La inmensa mayoría de ellos hijos de padres musulmanes, por cierto.
El motivo es evidente e irrefutable: mientras a los españoles nos embarga una sensación extraordinaria de la responsabilidad a la hora de traer nuevas vidas al mundo debido al futuro incierto, a los trabajos precarios, a la falta de liquidez monetaria o a la inestabilidad personal, a la mayoría de los inmigrantes todo esto se la trae al pairo. De hecho yo mismo he tenido en mis manos por casualidad un documento, que aun conservo, del Hospital Comarcal de Igualada donde un facultativo del centro dice textualmente en su informe que la paciente con nombre africano y embarazada por cuarta vez que: según la asistenta social del Ayuntamiento vive desde hace muchos años de la renda mínima de inserción (viven de la administración), se ha hablado de un método definitivo después del parto. Derivo para valoración con la mujer la posibilidad de un método definitivo postparto. Es decir que el propio médico pide desesperadamente a la asistenta social en su informe, en pocas palabras, que ponga freno a la fecundidad de la paciente, ya que reconoce que solo vive de las ayudas que le proporciona el estado del bienestar, el mismo que nos sube impuestos, que congela pensiones a nuestros abuelos y que sostiene a casi cinco millones de personas sin ocupación conocida.
A esto hay que añadirle que cada año a nuestro país, pese a las crisis tan divinas de la muerte que resistimos, siguen desembarcando un buen número de inmigrantes: este año hemos llegado a los 5,2 millones de personas, prácticamente el mismo número que inscritos tienen las oficinas de desempleo, no hace falta haber trabajado ni en Lehman Brothers ni en Goldman Sachs para con estos datos encontrar una solución rápida, práctica y certera al problema del paro en España.
Con este panorama hasta el más tonto de los tontos se percata de que tanto nuestra identidad como nuestra sociedad tal como la conocemos, y tal y como nos entusiasma, va a padecer una mutación irreversible en los próximos 20 años, a más tardar.
Se antoja pues básico y primordial que un proyecto como el que presentamos los hombres y las mujeres de Plataforma per Catalunya triunfe no solo en nuestra tierra sino también en el resto de España y por supuesto en Europa, donde ya hace años que pese a no padecer el problema del cambio de piel en tanta medida como nosotros ya han puesto remedio dando alas el pueblo en las urnas a partidos identitarios del corte de Plataforma per Catalunya.
*Secretario general de la PxC y concejal en Mataró.
Las mujeres españolas tienen un gran problema desde su tierna infancia: que se las conduce a ninguna parte… carrera profesional, prolongar los estudios hasta los 35, multitud de parejas, sexo temprano y fuera del matrimonio, abortos, imitar al hombre (incluso lo negativo), etc.
eso no es lo triste… estas mujeres que usted comenta son la generacion siguiente a las mujeres que tuvieron 2 hijos de media. estas mujeres ya son totalmente inútiles reproductivamente hablando… porque la mitad de ellas no quieren tener hijos pero sí mucho sexo, y la otra mitad no sabe criar hijos porque sus padres se han divorciado. Así pues esta generación venidera ya se ha perdido… ya hemos perdido una generación de madres nativas… de nosotros depende que las recien nacidas de ahora sean madres en el futuro, pero me temo que eso es imposible… porque tampoco habría muchos… Leer más »