Suecia: Manifestantes de extrema izquierda y musulmanes hieren a 9 policías tras la quema de un Corán por un político derechista
Manifestantes de extrema izquierda y musulmanes salieron a las calles de la ciudad de Örebro, en el centro de Suecia, a destruir todo y atacar a la policía este fin de semana, hiriendo al menos a nueve miembros de las fuerzas de seguridad según las autoridades.
Las violentas protestas son una respuesta a las acciones de Rasmus Paludan, líder danés del partido de derecha Stram Kurs, quien en su visita al país hizo un acto político en una plaza junto a sus seguidores, y quemó una copia del Corán, libro sagrado del islam, en una zona musulmana densamente poblada en Suecia.
Paludan fue acompañado por la policía a la plaza Sveaparken, un espacio público abierto en el sur de Linkoping el jueves, donde colocó el libro sagrado musulmán en el piso y lo quemó mientras llegaban los manifestantes a intentar frenarlo.
No es la primera vez que Paludan hace algo así. En 2019, visitó Suecia, y en un acto político donde trataba de movilizar a la derecha sueca, envolvió el Corán en tocino y lo arrojó al aire.
En 2020, mientras Paludan organizaba una nueva visita al vecino país nórdico, el gobierno sueco ordenó que se le prohíba el ingreso a Suecia por dos años, restricción que terminó este mes, y por eso inmediatamente emprendió la vuelta.
Paludan destacó la ironía de que a las olas de inmigrantes africanos y árabes no les prohíban el ingreso al país, pero a él, por hacer un acto político sin violencia, se le niegue el paso fronterizo durante dos años.
Esta no es la primera vez que Paludan quema una copia del Corán.
La policía dijo que un miembro del público resultó herido después de ser golpeado en la cabeza por una piedra, y que algunos de los policías tenían los brazos rotos y habían sido golpeados por piedras arrojadas por los manifestantes izquierdistas.
La protesta, a la que los medios locales dijeron que asistieron unas 200 personas, fue organizada por Antifa Suecia, y contó con el apoyo de algunos partidos de extrema izquierda suecos además de varios musulmanes de la zona.
La primer ministra sueca, Magdalena Andersson, que a pesar de provenir del Partido Socialdemócrata, ha adoptado un fuerte discurso anti-islam, defendió las acciones de Paludan.
“En Suecia se permite a las personas expresar sus opiniones, ya sea de buen o mal gusto, es parte de nuestra democracia. No importa lo que pienses, nunca debes recurrir a la violencia. No la aceptamos ni la aceptaremos“, dijo a la agencia de noticias TT.
Esto marcó un fuerte contraste con Stefan Löfven, el predecesor de Andersson que gobernó el país hasta 2021, quien en 2019 habría reprochado el acto de Paludan y le habría prohibido el ingreso al país por dos años.
Que se espabilen, que los suecos tan blanditos, durante décadas han sido unos tontainas. Con su buen rollito nos querían aconsejar a todo el mundo. Recuerden que se les dijo que no recibieran tantos refugiados, pero nada ellos tan progres y tan solidarios. Ahí lo tienen que se los coman con patatas.
Dentro de poco repúblicas islámicas en Europa.