Ictus en primera persona: el testimonio del jurista Ramiro Grau Morancho
José Antonio Bielsa Arbiol.- Acaba de salir al mercado un libro muy diferenciado del resto, al tiempo que necesario, muy necesario, y que se singulariza de otros de la cuerda en el hecho primordial de que su autor es también el protagonista del problema clínico que aborda: Diario de un paciente de ictus, del ex fiscal y jurista aragonés Ramiro Grau Morancho, pone negro sobre blanco los sucesos relativos al ictus del que su autor fue víctima el pasado mes de agosto. Felizmente, y tras estar a las puertas de la muerte, nuestro hombre –puro nervio y esfuerzo de autosuperación– logró salir adelante.
¿Qué singulariza este libro de otros ejemplares, repito, destinados a tratar parejo asunto? Ante todo, y esto quizá sea lo más significativo, que no estamos ante un “libro de especialista” (es decir, ante el texto de un técnico que no ha vivido en primera persona la enfermedad, puesto que habla desde la distancia y el empirismo que dimana de la costumbre, instrumentalizada por una profesión basada en la repetición y el cotejo de la enfermedad en otros).
Grau, narrador de la enfermedad “en sí/en mí”, harto consciente de la importancia de su testimonio (un testimonio que puede salvar vidas), ha decidido ponerlo (casi) todo por escrito, elaborando así el que quizá sea el primer libro netamente biográfico de nuestro autor, “un Grau en alpargatas de hospital”, donde el jurista e intérprete del Derecho se difumina en beneficio del hombre de carne y hueso, muy mermado en un hospital de la Seguridad Social de Zaragoza –aunque también sea uno de los mejores de España–: el Clínico Universitario Miguel Servet.
Hay en este Diario de un paciente de ictus algo más que una memoranda descarnada del ictus, desde su irrupción hasta la salida del túnel (tras casi frisar los pórticos de la muerte): el autor, consciente de que las cosas grises y sórdidas no resultan atractivas al gran público (si bien no las omite), ha optado con buen criterio por sazonar su historia de fino humor aragonés, y así lo testimonian las páginas de su obra, añadiendo a tal condimento una dimensión metapolítica en la que, ahora sí, aflora la perspicacia del jurista, cual hábil detector de un sistema que se hunde: el “hospital universal de España”.
No queremos saturar al lector con más reflexiones de un tercero: el objeto de esta reseña es dar a conocer el libro, ayudando a visibilizar una amenaza exponencial en España: el ictus. Si está interesado en el tema, es posible que este texto le sirva de mucha más ayuda que ingentes y sesudas obras “de especialista”.
Diario de un paciente de ictus está disponible en la web de Grau Editores, así como en la plataforma Amazon: https://www.amazon.es/Diario-paciente-ictus-Ramiro-Morancho/dp/B09NH3B1BB
Un libro que tiene todos los ingredientes para ser leido Ternura, sinceridad desgarradora, sentimientos, vivencias, experiencia y un libro descarnamente real que nadie puede olvidar Un libro que te hara reir, sorprender, te encogera el corazón y hasta se te saltara alguna lagrima Es un librio muy realista y vivencial Lo recomiendo, tiene buena letra y se lee muy amenamente Gracias Sr Grau por aportar su testimonio tan viovencial Un libro que debemos leer todo Deseo que su recuperacion siga siendo expectacular Un saludo
Curiosamente, la mayoría de los casos de ictus, con hemorragia cerebral, infartos, etc., se dan entre persdonas “vacunadas”, con dos o tres dosis.
¡Qué casualidad!
Con trabajo, esfuerzo y capacidad de superación, se puede hacer frente al ictus, y don Ramiro es un claro ejemplo de ello.
Un ictus normalmente te deja tocado…, pero no hundido, pueds con fuerza de voluntad, y buenos médicos y fisioterapeutas, terapeutas ocupacionales, etc., se puede salir del pozo.
Y el señor Grau es un buen ejemplo de ello.
Cada año se producen en España más de 150.000 casos de ictus, cifra que va en aumento… (Dicen que, sobre todo, entre los vacunados).
Es bueno que podamos conocer el accidente cerebral, desde el punto de vista del paciente, no de los sesudos estudios médicos, que poco nos aportarán como desconocedores de la jerga sanitaria, etc.
En este sentido, es un libro muy necesario, y por el que felcitamos a su autor, y colaborador de ALERTA DIGITAL, al que deseamos una pronta recuperación, lo más exitosa posible.