Aparca fácilmente en las grandes ciudades
La búsqueda de una plaza de aparcamiento, tanto en superficie como en un subterráneo, resulta un quebradero de cabeza para muchos conductores. Esta misión adquiere momentos dramáticos, a nivel de paciencia, cuando tratamos de dejar aparcado nuestro vehículo en determinadas ciudades, ya seamos vecinos de una determinada zona o simplemente acudamos a realizar una gestión o visitar a algún familiar o amigo. Afortunadamente hay una serie de consejos útiles que quizá puedan ayudarte en esos momentos de cierto coqueteo con la desesperación y te resulten útiles a la hora de acceder a un parking.
El aparcamiento de tu vehículo en las grandes ciudades requiere de grandes dosis de paciencia. Exceptuando los meses de verano, la cantidad de coche es importante y hace que haya una mayor competencia en la búsqueda del aparcamiento. La movilidad del coche privado, además, en estos tiempos sociales convulsos, ha aumentado con lo cual resulta aún más complicado encontrar un sitio a determinadas horas del día. E imposible en aquellos momentos del día que coinciden con la llegada a casa después de unas extensas jornadas de trabajo. Si no tenemos garaje privado, apunta a estos consejos que seguramente te serán de cierta utilidad y nos eviten pasar más tiempo del deseado al volante, dando vueltas en las proximidades de nuestra vivienda y gastando gasolina de manera innecesaria.
Una primera recomendación básica es obtener la tarjeta de residente, especialmente ya aplicable esta circunstancia a las grandes ciudades, lo que te permitirá poder aparcar en determinadas zonas reservadas para los residentes. No suele ser un gasto muy caro, y más si lo comparamos con el gasto de tiempo y gasolina que empleamos si no podemos dejar el coche en estas zonas. Esta ecuación puede extrapolarse a la búsqueda de una plaza de garaje en alquiler. Quizá económicamente sea compensable a otros gastos. Esto también puede aplicarse a aquellas personas que deben desplazarse en coche hasta sus centros de trabajo.
Planificar tu aparcamiento
La tecnología es otro recurso muy interesante, puesto que existen numerosas aplicaciones que te ayudan a encontrar un aparcamiento.
Puede que se trate, según las necesidades de cada conductor, de una plaza en la calle o de encontrar plaza en un parking privado (en determinadas fechas del año, éstos suelen rondar una alta ocupación) o comparar los precios de estos aparcamientos, y nos interese uno u otro en función del coste de la hora de establecimiento del vehículo. Normalmente siempre se acaba ahorrando dinero y tiempo mirando estas tarifas. Otro consejo, aunque no implica ponerlo en práctica, es llevarnos un coche de dimensiones reducidas, máxime si queremos aparcar en una zona donde resulta difícil a determinadas horas del día. Si tenemos la posibilidad de contar con un vehículo pequeño, tendremos más opciones de aparcar.
Finalmente, si podemos llegar a planificar nuestra hora de llegada y de salida a ese determinado barrio en el que deseamos aparcar, una opción muy práctica es controlar las horas de carga y descarga, puesto que fuera de las horas reservadas, podremos aparcar fácilmente si somos estrictamente puntuales. Y nos ahorraremos mucho tiempo y no tendremos tantos nervios.