Un estruendo causa una estampida en la procesión de La Soledad de Badajoz
Un fuerte ruido al paso de La Soledad asustó a parte de los pacenses que esta noche llenaban la Plaza Alta para seguir la procesión poco antes de la medianoche. Según ha informado la Policía Local, una persona ebria golpeó una puerta de chapa en la calle San Pedro de Alcántara, lo que provocó el estruendo y asustó a parte de los que llenaban la plaza. El desconocimiento del origen del ruido hizo que algunos comenzaran a correr y se contagió a decenas de personas que llenaban la plaza y sus alrededores en ese momento. Dos de los asistentes tuvieron que ser atendidos por ansiedad.
Los gritos y carreras alertaron al resto de asistentes, que seguían la cofradía mientras el sacerdote guiaba el rosario. Acababa de terminar una saeta cuando el silencio se rompió y comenzó el tumulto.
Uno de los agentes de Policía calmó a los asistentes en la plaza a través de un megáfono. Pidió tranquilidad y anunció que la cofradía seguía. De hecho, los nazarenos se reorganizaron en unos quince minutos y han concluido su estación de penitencia junto a la Patrona. No obstante, según han indicado desde la junta de gobierno de la hermandad, muchos nazarenos decidieron marcharse a casa. Algunos se refugiaron en La Concepción durante los primeros minutos de desconcierto. Según distintos testimonios, los costaleros y una serie de hermanos, rodearon a la Virgen mientras duró la incertidumbre.
Uno de los subinpsectores de Policía Local, Toni Mesa, explicó anoche en declaraciones a Badajoz Directo que “el pánico que existe por el terrorismo hizo que la gente saliera corriendo por donde ha podido, hacia La Soledad y la Plaza Alta. (…) Nos hemos quedado en un susto”. Esa misma palabra, “susto” es la que ha usado la propia Hermandad de la Soledad en su perfil de las redes sociales al terminar la procesión. “Terminada la estación de penitencia. Con susto, sí. Pero agradecidos a la Virgen porque no pasó nada de nada”.
Madre mía, que sociedad de mariconas…y la gentuza borracha, meona y delincuente campando a sus anchas.
Triste lo que están consiguiendo.
En lugar de plantar cara al problema de raíz, dejamos que los políticos hagan el payaso. Y el resto a sentir miedo e impotencia.
Para mí este hecho es mucho más profundo de lo que parece. Un signo claro de cómo van ganando la batalla.
Con seguridad un payaso progre cristianófobo, borracho claro, de esos que ya están de vuelta de todo pero que en realidad no saben ni volver a sus casas.
Son borrachuzos catolicos escasamente evangelizados. No problem!
Dios NO lo permita y salve a España y Europa de más masacres.Amén