Sobre el cáncer nacionalista
El nacionalismo es una enfermedad, un cáncer, de muy difícil curación, porque se propaga con suma rapidez si no se le trata o no se le da el tratamiento adecuado. Buenos ejemplos de ello tenemos en la historia de los dos últimos siglos de España. Desde mediados del XIX hasta hoy, tanto la historia global de nuestra Patria como la particular de los pueblos que la integran o la de las parciales actividades culturales, artísticas, lúdicas o científicas que se han realizado en ellos y en ella, demuestran que tan fecunda y productiva es la unidad de convivencia histórica como improductiva e infecunda es la separación pueblerina de quienes la rompen por no ver más allá del paisaje en que se mueven. Recordaré ahora, para no extenderme, dos o tres ejemplos: los que ofrecen en música, pintura y cine los compositores, artistas y directores catalanes a finales del siglo XIX y comienzos del XX cuando sin renegar de su catalanidad se proponen y consiguen ser españoles, europeos y universales.
Desde su aparición entre nosotros tras las guerras carlistas, el cáncer nacionalista se ha extendido por Cataluña y Vasconia gracias, más que por sus propios méritos y fuerzas, a consecuencia del inadecuado trato que le han dado tales o cuales gobiernos y la Iglesia católica de esas partes de España; y se ha extinguido -o cuando menos contenido- en determinados periodos de nuestra historia contemporánea merced a la acertada política llevada a cabo para ello.
No podemos dejar de tener en cuenta que tanto el nacionalismo catalán como el vasco son desde su principio hasta hoy fundamentalmente “de derechas”. Las personas y las organizaciones “de izquierdas” tardaron muchos años en hacerse nacionalistas, tanto en razón de sus respectivas ideologías como por la conveniencia práctica de disputar y ganar las contiendas electorales y en definitiva el máximo poder posible en los respectivos territorios.
Digámoslo una vez más: los nacionalismos catalán y vasco nunca han tratado de sanear y mejorar sus pueblos y en consecuencia España, sino que su esencial propósito ha sido siempre el separarse de ella, sin importarles nada -o importándoles muy poco- los daños que tal distanciamiento produjera a las dos partes separadas. Desde su nacimiento han mantenido que España ha sido y es una utopía irracional y una imposición por la fuerza, cuando la historia enseña que España ha sido siempre una realidad: a veces en largas, productivas y eficaces etapas de efectivas convivencias; y en otros momentos en largas, penosas y hasta sangrantes etapas de nostalgias y búsquedas. Una realidad beneficiosa -en mayor o menor grado- para todos y cada uno de los pueblos que la integran y constituyen.
El nacionalismo ganó presencia y poder a principios del siglo XX, y concretamente a partir de la I Guerra Mundial, tanto a consecuencia del conflicto ideológico que supuso ésta como por obra y gracia de los intereses creados por las naciones beligerantes en ella, deseosas todas de incrementar el número y la potencia de sus partidarios o simpatizantes. Inglaterra, en concreto, y sobre todo en el País Vasco, aumentó sus ayudas y presiones para contrarrestar las simpatías que Alemanía y Austria-Hungría tradicionalmente despertaban en buena parte de los españoles. La derrota de esos dos Imperios y su inmediata descomposición en diversas nacionalidades supuso para el PNV y sus parientes catalanes una inyección de optimismo y fe en sus posibilidades. De hecho, los gobiernos liberales o conservadores que rigieron España durante el primer cuarto de siglo del 1900, no supieron o pudieron limitar y acotar tales crecimientos. La dictadura del general Primo de Rivera, aceptada y alentada por Alfonso XIII desde 1923 a 1930, significó todo lo contrario. Era lógico que en cuanto el rey prescindió de ella volvieran con nuevos ímpetus los nacionalismos sofocados. Era también lógico que la II República naciera con el apoyo de tales sectores catalanes y vascos, como igualmente lógico que en dos ocasiones -1931 y 1934- proclamara en ella el Etat Catalá, sofocado en ambas por el gobierno español mediante adecuada presión política y uso de la fuerza.
En respuesta a Lluís,por tus palabras deduzco que eres nacionalista catalán y como siempre tú y otros que apareceis por blogs y por digitales siempre tirais de los mismos tópicos y arquetipos.Estas letras no son para tí pues no te molestes en contestarme porque no tengo gana de polemizar contigo,yo soy un ciudadano español que vive hace má de cincuenta años en Cataluña y ya me sé que la única ley que vosotros entendéis el la ¨ley del embudo¨.Para gente que se preocupe en entender a mi patria España sean catalanes o no quiero puntualizar lo siguiente: 1ºNo existe el… Leer más »
Mire, si el nacionalismo español no existe es porque en verdad no existe la nación española. Existe un estado que actualmente atiende por “reino de España”, que también se sustenta en una serie de mitos (los Reyes Católicos, el Cid, los reyes godos, la Hispania romana), pero que no es más que un intento de la nación castellana de absorber e imponerse a las demás. El desarrollo económico (que España ya era un país escasamente desarrollado en el sigli XV, antes de la Revolución Industrial) no se produjo no sólo por la falta de agua, sino por la falta de… Leer más »
Ya te he dicho que no pienso polemizar contigo porque estoy harto de tópicos es muy fácil tirar de los argumentos de la progresía y la leyenda negra,pero estás muy equivocado,pero no seré yo quién te saque del error,por que ya veo que tienes complejo de aceite,sólo espero que nuestras diferencias no las tengamos que dilucidar por otros medios.
Nacionalismo no es lo mismo que separatismo amiguete a ver si nos enteramos
Cierto. Nación sólo hay una.
Yo hay discrepo. España es una nación de naciones. Solo que ni la nacion vasca ni la nacion catalana han existido. España es la unión de los cuatros reinos-nación; Leon, Castilla, Navarra y Aragon. La gente en euskadi confunde cultura vasca con nacion vasca o estado vasco. El vasco es un cultura de vasconia que perteneció al Reino de Navarra, un reino bilingüe pero bajo control del reino de Navarra. Los vizcainos, alaveses y gipuzcoanos se unieron a castilla una vez respetados los fueros y no querian pertenecer a navarra por su caracter autoritario. El Catalan, sin embargo, fueron condados… Leer más »
Que alguien le explique a este señor la diferencia entre nacionalismo y antiespañol/separatista.
Y recordad, señores criticones del nacionalismo. En antónimo de nacionalismo es MUNDIALISMO. El nacionalismo es lo único que puede salvar a Europa de donde esta
Siempre habra estupidos que creeran en utopias, pero que le vamos hacer en la viña del señor hay de todo. Pero el NAZIONALISMO de hoy en dia es radical, se impone a traves de la violencia, nadien que sea partidario de ello se ha parado ha analizar el asunto friamente. Se rigen por impulsos igual que las modas, solo cuando se dan el batacazo se dan cuenta de la estupidez cometida. Y un ejemplo de ello son los portugueses, quisieron ser independientes, pues toma miseria y con una deuda de caballo. Deben alimentarse de su independencia, porque la pobreza que… Leer más »
O sea que el nacionalismo no es español, solo catalan o vasco?.
El nacionalismo enfermizo y tontaina, se entiende. Ya no sabemos como decirlo.
Hay que ser muy tonto para estar 24 horas al día deseando que a uno le se le diagnostique un cáncer y que éste se extienda sin control.
Ese es el nacionalismo for dummies vasco-catalán. Tan difícil es de entender?
Qué cruz señor… qué cruz…
Es que el nacionalismo español es todavía más cazurro y tontaina. Los nacionalismos catalanes y vascos miran hacia la democracia. En cambio, ustedes (que supongo se consideran lo mejor de España), sólo tienen ojos para dictadores, golpistas y gente cuyo lugar es una penitenciaría o un frenopático. El articulista podría explicar por qué, si Primo de Rivera era tan buen “cirujano”, el nacionalismo sobrevivió, tanto a su dictadura como a otras todavía más sanguinarias que vinieron. Quizá porque la represión, por bestia y cafre que sea, al final no puede contra la voluntad popular. El españolismo lleva siglos intentando resolver,… Leer más »
…Vamos a ver… …Una cosa es ser un Patriota, Español ..que une …y otra ser un nacionalista …que separa
…Yo utilizo el Español para entenderme con los demás …tu utilizas el vascuence o el catalán para diferenciarte de mi… …yo quiero lo mejor para todos los españoles …tu me odias y quieres lo peor para mi y de rebote también para los “tuyos”
…Perlita …tu mucho no has leido ¿no?
¿Y tu no nos odias? que bueno eres… Pues para no odiarnos, leo a mucho patriota español, por estos foros, pidiendo que se dejen de consumir productos catalanes, supongo que con el angelical propósito de que los catalanes se mueran de hambre… Bonita manera de unir. ¿A quien quieres convencer de los patriotas españoles son los buenos y los patriotas catalanes los malos? Todo es más sencillo: no nos queremos. Lo que ocurre es que España necesita esta parte del PIB que supone Catalunya y tiene que mantener a toda costa una relación de vasallaje que le permite no apearse… Leer más »