El Levante no tiene techo en la Europa League (0-1)
Ni su condición de novato, ni el infierno griego, ni constatar lo que significa jugar dos partidos por semana. Este Levante no tiene techo. Nada le tumba. Iba a Grecia con la responsabilidad de no destrozar su impecable actuación en la ida y salió victorioso de uno de los campos más complicados del fútbol europeo. Cayó rendido Olympiacos, como antes claudicaron Twente o Hannover. El Levante es el único superviviente español en la Europa League, pero qué superviviente.
Al margen del premio económico que supone meterse entre los 16 mejores de la competición (el dinero servirá para pagar casi íntegra la ficha de Oba Martins), el Levante de los récords se mostró como un veterano de guerra en Atenas, una plaza difícil que profanaron los de Juan Ignacio a su antojo. No halló respuesta Míchel, que obtuvo de sus hombres mucha dureza y pocas ideas. Doblegado el conjunto heleno a la fiabilidad defensiva del Levante, a su disciplina, a una forma de entender el juego que le ha llevado a situaciones inimaginables para la hinchada de Orriols hace apenas año y medio.
El contundente resultado del Ciutat de València obligaba al Olympiacos a tener la iniciativa, a proponer más fútbol que el rival, pero no se lo permitieron. El gol de Martins no acalló a la infatigable hinchada griega, pero dejó helado al once de Míchel. Barkero (de nuevo decisivo) puso un balón de oro al corazón del área y allí encontró Martins su camino hacia el gol. Completamente solo, el nigeriano cabeceaba a la red y derrotaba definitivamente al Olympiacos.
Lo sencillo hubiera sido aflojar el ritmo, mostrar esa picardía tan italiana de perder tiempo en cada acción, pero el Levante siguió a lo suyo. Y aunque la lógica apuntaba a una avalancha del Olympiacos, Ballesteros, Rodas e Iborra se multiplicaron en defensa para desesperar una y otra vez a los creadores del conjunto griego. Ni una grieta, ni un resquicio hubo para que el rival confiara al menos en darle vida al partido.
Le faltó a Juan Ignacio el ‘detalle’ de dar entrada a Nikos Karampelas. El griego había invitado a familia y amigos para seguir el partido en directo y se quedó sin jugar pese a que en ningún momento hubo duda de que sería el Levante el vencedor.
Ahora espera el Rubin Kazan en octavos. Un equipo con buenos futbolistas (Orbaiz, César Navas, Rondón, etcétera) que ha despachado al Atlético de Madrid, actual campeón. Será un nuevo reto para un Levante que contra Olympiacos conquistó el Olimpo con Ballesteros, el capitán, que regresaba al once después de dos semanas fuera de circulación. No asusta el frío ruso a este grupo de valientes que con uno de los presupuestos más bajos de Primera coquetea con la zona europea en Liga y se deshace de rivales de renombre en el viejo continente. Ése parece el sentir de la grada de Orriols: que pase el siguiente.
¿Por que quieres que caiga este equipo si es el único español que sobrevive?
Ojalá caigan eliminados estos leñeros amiguitos del barsa
Este club Llamado Levante U.D. es la alegría y el orgullo del futbol español¿ por que? por que siendo un equipo más bien pequeño lo está disimulando bien por que parece un grande grandísimo club arrasa en liga en Eueropa