10 de Febrero de 1943: La última gran victoria del Ejército español
Francisco Torres.- Intencionadamente he declinado la invitación a rememorar, en este setenta aniversario, la última gran victoria del Ejército español tal y como me pidió la redacción de Alerta Digital. No quería hacerlo antes del diez de febrero, como es usual en estos casos, para así poder dejar constancia en el encabezamiento del homenaje que cada año rinden las últimas Hermandades de divisionarios a quienes dejaron la vida, al servicio de España, en aquel heroico día.
Desde las flores que cada año depositan los últimos voluntarios en el cementerio de la Almudena -cuyo monumento ha sufrido el ataque de los alevines de la memoria histórica-, al manto que luce la Virgen del Pilar regalado por los divisionarios, pasando por los actos celebrados en Alicante y en los que yo mismo he participado. Escribo con la emoción contenida de quien ha podido estar al lado de un viejo voluntario, Enrique Cernuda, el día que le entregaban la medalla de oro del LXX Aniversario y cuyo único discurso fue un sonoro y emocionado “¡Arriba España!”; con el inmenso agradecimiento de haber recibido, junto con otros amigos, la misma medalla en otra de sus categorías por mi trabajo como historiador y por artículos como éste.
Hace setenta años, sobre las ocho de la tarde -hora en la que escribo- en un lugar que la terrorífica potencia de fuego del Ejército Rojo había transformado en un mar de lodo y barro, donde el manto blanco de nieve que cubría el impresionante horizonte levemente ondulado hasta poco antes de las siete de la mañana había desaparecido, increíblemente, los españoles de la División Azul aún resistían en Krasny Bor y un poco antes habían intentado atacar el flanco de la penetración soviética apoyándose en sus líneas tras el Ishora avanzando desde Federovskoye. A esas horas, más de un millar de soldados españoles habían perdido ya la vida; sus cadáveres quedarían insepultos. Serían los rusos los que suponemos los depositarían en fosas comunes; y allí, bajo aquella tierra, aún reposan. Siete horas después los españoles abandonarían aquel sector dejándolo en manos alemanas pero con el intento de penetración soviético detenido mientras que algo más al noroeste, cercados, los últimos combatientes de la 4ª del 263, formando en cuadro con sus ametralladoras apuntando a los cuatro puntos cardinales, caían prisioneros.
La División Azul acababa de librar una importante batalla defensiva obteniendo una gran victoria al dislocar la ofensiva rusa y evitar que se abriera una fisura en la débil línea, por la falta de reservas, que cercaba la ciudad de Leningrado. Si la División Azul hubiera cedido el Ejército Rojo habría conseguido el espacio suficiente para alimentar una ruptura quizás decisiva.
Frente a la División Azul los soviéticos habían desplegado cinco divisiones (109, 72 y 43 divisiones de Fusileros, 63 y 45 divisiones de la Guardia), dos brigadas, varias unidades acorazadas (carros KV-1, T-34 y T-70) y una acumulación artillera que les permitiría lanzar 95.000 proyectiles sobre los españoles. En lo que iba a ser el punto de ruptura, entre la carretera y el ferrocarril que limitan el pueblo de Krasny Bor, unos seis mil españoles se habían desplegado en profundidad: dos líneas de posiciones discontinuas con algunas reservas tácticas. Tras la tormenta de fuego de ablandamiento que destrozó la primera línea española, pero que no doblegó a los combatientes que sobrevivieron al bombardeo artillero, mientras la 72 División de Fusileros fijaba a los españoles en el Ishora, la 63 y la 43 se lanzaron sobre el ferrocarril y la aldea de Krasny Bor apoyadas por unos carros que sólo el valor personal podía detener ante la insuficiencia de los pequeños cañones alemanes.
Las condiciones del terreno, la distribución de las fuerzas y el heroísmo de los infantes españoles que, tras perder prácticamente su primera línea en las cinco primeras horas de combate, fueron capaces de reorganizarse y lanzar contraataques tácticos fueron claves en el éxito de aquel día. El ataque soviético no se detiene pero se ralentiza a lo largo de la jornada hasta quedar ahogado, sin capacidad de progresión. Los rusos en su avance no quieren dejar focos de resistencia a sus espaladas y se empeñan en un combate de aniquilamiento en una zona relativamente poco extensa en la que los españoles han conseguido tejer un sistema de fuegos asombroso que causa enormes pérdidas a los soviéticos y consigue, contra todo pronóstico, hacer inútil la evidente superioridad numérica enemiga en lo que Esteban Infantes había convertido en una zona de resistencia.
Sin reservas que poder utilizar de forma inmediata, ante el ataque, el mando alemán tuvo que asumir que las fuerzas de la División Azul situadas en el punto de ruptura serían arrolladas pero dada su forma de combatir a buen seguro que el sacrificio les permitiría reunir fuerzas para intentar contener a los rusos; pero los españoles hicieron algo más que ganar tiempo, aunque tuvieron en un solo día entre 2.500 y 2.700 bajas, causaron algo más de diez mil al enemigo, casi un 25% de sus fuerzas provocando una caída en su moral de combate que en el caso de los españoles, pese al durísimo castigo sufrido no se produjo entre otras razones por la propia idiosincrasia de la unidad española: voluntaria, anticomunista y con un eje político vertebrador constituido por los falangistas. Del heroísmo individual que mostraron aquellos hombres queda el testimonio de las tres Laureadas y once Medallas militares individuales concedidas, pero también las denegadas y decenas de acciones individuales cuya historia se ha perdido para siempre.
Al filo del once de la noche de febrero de 1943 los españoles habían ganado la batalla defensiva que habían librado. No lo sabían pero Krasny Bor se convertiría en la última gran victoria en combate del Ejército español.
*Catedrático de Historia y colaborador de AD
He visto la foto de la tumba de un divisionario llamado Marcelino Gil Martín y es que mi padre fue divisionario y se llamaba Santiago Gil Martín (falleció hace dos años a los 91 de edad) he vuelto a sentir la misma emoción como cuando me contaba las vicisitudes que vivió en los 14 meses que estuvo en Rusia hasta que fue herido y evacuado a Alemania y más tarde a San Sebastián.
Un recuerdo sentido a todos los que dieron parte de su juventud y su vida .
Me gustaría saber si estos “señores” que tanto critican a la División Azul tendrían lo que deben tener los hombres y se atreverían a combatir con el valor y en las circunstancias adversas en que ellos lo hicieron….
La Division Azul solo tenia afin con los nazis el antimarxismo socialcomunista, por eso pertenecio al ejercito aleman el Heer y no al Grupo de Unidades basicamente nazis las Waffen SS. y estaba ligada a mandos del ejercito aleman y no a altos mandos de las Waffen SS del partido nacionalsocialista.-
No,señor Pachi.La División Azul fue incluida en el Heer o Wehrmacht porque en 1941 las Waffen-SS aun no se habían desarrollado y extendido.Precisamente tras la retirada de la Legión Azul (pequeña sucesora de la División Azul) en 1944 unos 1000 españoles irreductibles fueron reclutados por las Waffen-SS y formarían la 101 y la 102 spanische freiwilligen kompanie der SS.Con los restos de la 101 se formó la Einheit Ezquerra,que luchó en la batalla de Berlín,defendiendo el búnker de Hitler.
en aquellos tiempos si habia soldados de verdad ,los rusos todavia se acuerdan de ello,cuando españa despierte el mundo temblara
¿Uste debe ser de los que se creyeron lo del 12-1 a Malta, no? ¿a eso se refiere?, ja,ja,ja pues no tenemos faena en España, de momento somos los que tenemos más paro de Europa, los jovenes el 50%, los primeros en consumo de cocaina, en billetes de 500€ y en fracaso escolar, los más tontos de Europa…los españoles son los que tendriamos que temblar
Andreu
No sigas haciendo demagogia que el Señor te haga ver la lus y si no las estrellas del hostion que te pegues.
Mucho se ha escrito sobre la batalla de las Termópilas, y muy poco sobre KRASNY BOR, en la que Rusia sufrió una victoria pírrica puesto que 45.000 rusos no consiguieron doblegar a 5.000 valientes falangistas españoles.
CATALANES Y VASCOS quieren romper ESPAÑA!!!!Lo vas permitir?? ÚNETE al mayor simulador geopolítico-militar, PERFECTO para pasar los ratos muertos delante del ordenador, y podrás hacer cientos de amistades!!! totalmente GRATUITA!!!AYÚDANOS!! [ bit.ly/UZDbNU ]
DIVISION AZUL PRESENTE!!!
Descanse, ya queda menos para que llegue la visita semanal, y si no tiene ninguna crisis le dejaremos pasear por el jardin con los demás enfermos….
La Historia la escriben los vencedores, y los vencedores escriben lo que quieren.
Es lebe Deutschland! Heil, mein Führer!
Viva la Italia e viva il Duce!
Nihon banzai! Hirohito banzai!
Dicho eso: HONOR Y GLORIA A LA DIVISIÓN AZUL, SIEMPRE.
Y a quienes no regresaron, q. d. e. p..
Honor y gloria a la División Azul….¡¡¡ ARRIBA ESPAÑA !!!
O sigui que d’una batalla a la defensiva se li diu victoria? Cony comenceu a semblar catalans. D’acord, no se’ls hi pot restar merit a aquelles persones, però quin va ser el resultat final de la II guerra mundial? Si no arriba a ser per les tropes alides els soviètics haguessin envait la vostra España.
Yo siempre que entro la cosa es parecida, y siempre luchanban en inferiridad de número y condiciones, peor equipados y dandto muestra de su valentía, y eso que hemos perdido todas las colonias y somos el único país de Europa con un caso como el de Gribraltar, donde se nos rien casi todos los días…
Andreu
CANSINO