Artur Mas como Hugo Chávez
La imagen del presidente de la Generalitat entrando en helicóptero al parque de la Ciudadela para poder acceder al Parlament es deplorable, tanto que me recordó a cuando Hugo Chávez volvió en helicóptero al Palacio de Miraflores después del golpe fallido en Caracas en 2002, lo cual reduce a Catalunya al angustioso estado de república bananera y esto es muy triste.
Un esperpento tan sólo comparable en la historia reciente de España con el golpe fallido de Tejero y los suyos un 23F en el congreso de los diputados de Madrid. Lo más grave del asunto es que los insurrectos en cuestión no eran militares armados, eran dos mil antisistema perroflaúticos a los que todo el pelaje político les había bailado el agua durante semanas. ¿Qué hubiese pasado si en lugar de 3.000 desalmados hubiesen sido 10.000? ¿Hacia dónde se habría dirigido el helicóptero de Mas? ¿A las islas Caimán o a Francia?
Lo escribí en mi último artículo: “La clase política le está riendo las gracias a la extrema izquierda violenta y esto trae consecuencias”. Auténticos alborotadores sociales a los que se les sigue sin parar los pies, las imágenes eran bien explicitas, cientos de pedigüeños agrediendo policías, diputados, periodistas, funcionarios, tirando objetos de todo tipo, intentando robar el perro lazarillo a un ciego, marcando a la gente con pintura y al final en una ciudad donde te pueden multar con más de 1.000 euros por mearle a una palmera se salda la operación con siete detenidos, y atención que Puig amenaza que podrían ser hasta 20, es simplemente lamentable.
No me equivoqué en mi última opinión, y créanme que lo siento. Y lo siento a pesar de que pocos días antes los mismos fanáticos habían estado insultando, escupiendo e increpando a los regidores de PxC en un buen número de Ayuntamientos mientras ejercíamos la labor que nos había otorgado parte de la ciudadanía libre y democráticamente. Justo igual que los diputados del Parlament. Pero entonces no hubo comunicado de condena de todos los partidos, nadie se rasgó las vestiduras, la prensa no lo denunció. ¿Es que no son los Ayuntamientos un órgano público como lo es el Parlament? ¿Es que no somos los regidores de Plataforma per Catalunya representantes del pueblo? ¿Por qué nadie se indignó entonces con los indignados?
Lejos de eso se han dedicado a demonizarnos, a denunciarnos y a presentarnos a la opinión pública marcados, como marcaron la chaqueta de Montserrat Tura pero sin pintura, sin ropa de pordiosero, con estilográfica, traje y corbata. En definitiva a ponernos a los pies de los caballos salvajes que no han querido ver hasta que les han pasado por encima a ellos mismos. A quién Dios se la dé, san pedro se la bendiga.
*Secretario general de Plataforma per Catalunya (PxC).
Éste hombre es un verdadero crack, ojalá se presentara en mi ciudad.
¡Suerte tienen los de Igualada de tener a mi parecer uno de los mejores candidatos de PxC y sin duda el que mejor habla y con menos pelos en la lengua!
Muy buena columna de opinión, hace tiempo que sigo a Hernando y tiene un futuro muy grande en la politica española. Además a elegido el mejor partido