Una violación pone en el punto de mira el centro de inmigrantes de Alcalá y desata una guerra política

Dos inmigrantes caminan en las inmediaciones del centro de Emergencia, Acogida y Derivación en el Acuartelamiento ‘Primo de Rivera’
El pasado sábado por la tarde, a plena luz del día, una joven española de 21 años, vecina de Alcalá de Henares, fue violada por parte de un hombre que, según las primeras investigaciones tras la denuncia de la víctima, sería de raza negra. Aunque ni el Ayuntamiento de la localidad ni la Policía han confirmado que el presunto agresor sea uno de los inmigrantes ilegales alojados en el cuartel militar Primo de Rivera de la ciudad complutense, reconvertido en Centro de Atención a Extranjeros (CAED), todos los ojos están puestos en este lugar porque los hechos se produjeron a escasos metros de distancia.
La alcaldesa de Alcalá de Henares, Judith Piquet (PP), pidió ayer nada más conocerse el terrible suceso la máxima celeridad en la identificación y detención del agresor y aprovechó para reiterar, al igual que hizo Vox, la petición de cierre de este centro de inmigrantes. Aunque reiteró que, de momento, no está confirmado que el autor de la brutal agresión sea inquilino de este centro, donde en la actualidad residen 1.700 extranjeros, recordó que el Consistorio lleva exigiendo al Gobierno de Pedro Sánchez su cierre desde que abriera sus puertas hace ya 18 meses. Tiempo en el que, denuncia, ya han pasado por sus instalaciones más de 10.000 inmigrantes sin papeles.
«Llevo pidiendo su cierre desde que se abrió hace más de año y medio. Se nos dijo que sería temporal, con una capacidad de 100 personas, y ya han pasado más de 10.000. Ha habido peleas, un fallecido, un motín… Es mi obligación alertar de todo lo que pasa en mi ciudad, aunque insisto en que no estoy vinculando esta agresión con ese centro, porque aún no tenemos esa información», manifestó en declaraciones a los medios de comunicación este lunes.
Además, en esas declaraciones, Piquet acusó al delegado del Gobierno en la Comunidad de Madrid, Francisco Martín, de guardar un «silencio cómplice» respecto a esta agresión sexual. «Lo único que pedimos es tener toda la información. Le pido al Cuerpo Nacional de Policía y al delegado del Gobierno que identifiquen y detengan cuanto antes al agresor. No puede haber víctimas de primera y de segunda. Nos convocan continuamente a minutos de silencio por violencia de género, y lo hacemos cada último jueves de mes de forma rigurosa. Pero no puede haber silencios cómplices según quién cometa la agresión. Esta víctima también merece justicia y respeto institucional», lanzó.
Unas acusaciones que no gustaron nada al delegado quien, rápidamente, se apresuró a responder a través de un vídeo en sus redes sociales en el que no disimuló su enfado con la alcaldesa. «¿Un silencio cómplice? ¿cómplice de qué? ¿de quién? ¿qué está insinuando la alcaldesa? Le exijo una rectificación inmediata, son unas declaraciones absolutamente intolerables», sentenció Martín.
El socialista recordó a Piquet que «en 2024 hubo en Alcalá de Henares 13 agresiones sexuales con penetración y en el primer trimestre de 2025 hubo cinco agresiones sexuales con penetración, ¿y dónde estaba la alcaldesa? ¿convocó a los medios a las puertas del Ayuntamiento para hacer declaraciones?». «Todas las víctimas de violencia sexual nos deben preocupar por igual, sea quien sea el agresor», agregó.
Unas palabras a las que no ha contestado la alcaldesa de Alcalá de Henares pero sí el secretario general del Partido Popular de Madrid, Alfonso Serrano, quien acusó al delegado este lunes de sólo grabarse vídeos cuando «hace una visita de postureo, quiere atacar a un dirigente del PP o buscar desviar sus competencias». En esta ocasión, Serrano le recriminó hacer un «combo» del segundo y del tercer de los motivos y le pidió que, en lugar de «preocuparse por si le invitan o no a actos» que se «preocupe de la seguridad en los municipios».
Mientras tanto, para Vox, este nuevo caso de violencia sexual «representa una muestra más del fracaso del modelo multiculturalista impuesto por la izquierda, que ha convertido barrios y ciudades enteras en lugares inseguros para los españoles».
Además, el portavoz de Vox en Alcalá de Henares, Víctor Acosta, también reiteró la petición de cierre del centro que la formación de Santiago Abascal lleva pidiendo, al igual que el PP, desde su inauguración.
«No es la primera agresión sexual que ocurre en Alcalá, y desde Vox advertimos que mientras se mantenga esta política de puertas abiertas, los españoles seguirán sufriendo las consecuencias», advirtió, al tiempo que informó también de que en las últimas semanas han recibido numerosas quejas vecinales sobre fiestas nocturnas organizadas dentro de las instalaciones del centro, generando graves problemas de convivencia e inseguridad.