El sindicato UGT en Andalucía ha llamado este martes la atención, tras conocer que la creación de empresas en Andalucía cae un 4,3% en agosto hasta las 922 y las disoluciones suben un 2,4%, sobre “las dificultades” del tejido empresarial que son, a su vez, “reflejo y consecuencia lógica de lastrar el poder adquisitivo de las familias trabajadoras andaluzas”.

En un comunicado, el sindicato ha señalado que la cifra de sociedades mercantiles andaluzas que han sido incapaces de continuar ejerciendo su actividad económica desde que se iniciara la actual crisis, en marzo de 2020, asciende ya a 8.127, de manera que se asiste, a su juicio, durante este mes, a “una cierta desaceleración en el ritmo de destrucción de las mismas con respecto al mes pasado”.

UGT-A ha indicado que, en una economía tan dependiente del consumo interno como la andaluza, cualquier reducción de la capacidad de compra de las economías domésticas tiene “un pronunciado efecto sobre la generación de riqueza que, de no remediarse, puede terminar afectando al empleo”.

Para el sindicato, más preocupante es la situación, aún si cabe, si la se analiza en el contexto inflacionista actual y que vuelve a poner “en jaque” la evolución de indicadores de cohesión social como, por ejemplo, el desempleo de larga duración, el porcentaje de hogares con carencia material severa o la tasa andaluza de pobreza y exclusión social.

“Nos alertan de que se avecina un otoño complicado, un otoño difícil. Un otoño en el que nuestro sindicato, como garante de la defensa de los derechos laborales, sociales y económicos de los trabajadores, no va a mantener una posición pasiva, sino que va a emprender cuantas actuaciones y movilizaciones sindicales sean necesarias para retomar aquel principio usado en los peores momentos de la pandemia y que tan positivos resultados obtuvo: no dejar a nadie atrás”, ha concluido.