El nuevo Gobierno de España desde Cataluña y Podemos
¡Qué pena de dimisión no realizada por Rajoy! Todo por intentar salvar los intereses de partido, en vez de los intereses de España, para haber impedido este golpe legal y haber garantizado unas elecciones en las que, en el peor de los casos, habría resultado un Gobierno de coalición entre el P.P. y Ciudadanos.
De momento, a 1 de junio, el relevo pasa, sin pasar por las urnas, en el Parlamento, de un Rajoy pétreo a un Sánchez embebido en conseguir el poder a cualquier coste, como el de haber comprado el apoyo de los independentistas, Dios sabe a qué precio y negociado con prisas y a oscuras en oscuras y turbias conversaciones.
De momento, Podemos, todo menos filantrópico, ya exige, por su apoyo, formar un Gobierno de coalición, no reclamando carteras ministeriales, pero sí participación; y, de momento igualmente, Sánchez se tendrá que enfrentar con el mismo problema que lo hiciera el PP y fruto de su propia incongruencia: defender unos Presupuestos Generales del Estado , por el mismo P.S.O.E. antes rechazados, este próximo martes 5 de junio.
Mientras tanto, los separatismos de Puigdemont y los batasunos cotizan al alza.
Resultado: misma corrupción (quien se halle libre de culpa que arroje la primera piedra), menos soberanía y mayor secesionismo. Quizá presenciemos cómo, tras esa vaga “promesa de diálogo” sin especificar con Torra, la Moncloa se traslade a la sede de la Generalidad como sucursal y los Presupuestos Generales del Estado se vean intervenidos, como de facto ya lo están, por los sectores de la xenofobia antiespañola rubricada por el Rey y Rajoy, a pesar de no haber cumplido en su nombramiento o investidura con el artículo 108 de la Constitución, el juramento de lealtad a la misma y a las instituciones españolas.
Lo barato resulta caro y lo rápido, lento y doloroso: no son tus amigos los “Siete Hermanos”, sino socios contra una cabeza de turco, que se tornarán enemigos. En un Parlamento que es un lupanar en que cada cual lleva a cabo política de partido y no de Estado, has pecado, Sánchez, de lo mismo que el reo de muerte: de soberbia. Ahora , que tu cabeza no tope con el techo de gastos, ni con las paredes de los separatismos. 84 diputados no van a obrar más milagros que 137, a no ser que te llames Merlín.
No te fíes, Sánchez; que, en este circo, el día del estreno, te crecerán los enanos y tan sólo te restará retirarte sulfúreamente como el “hombre-bala” ante unas nuevas elecciones que te empeñarás en dilatar con la excusa de la estabilización, pero, en realidad, para satisfacer tu ego de poder. Se denomina onanismo político a costa del pueblo. Ni hombre de Estado, ni obrero, ni campesino. De momento, la facultad más probada atribuida es la de Lázaro: resucitar de entre los muertos. Ni con la corbata color teja. Sin más.
Mariano egoísta por no convocar elecciones, Pedro ambicioso por querer ser presidente a cualquier precio, Pablo oportunista por querer retrasar su hundimiento y medrar a costa de sus votos a Pedro, Albert barrendero para su casa, pide elecciones porque las encuestas le son favorables, Santiago de VOX pescador en Río revuelto, hoy convoca concentraciónes para reclamar elecciones. Esta es la cartelera, de políticos del sistema que tenemos, no se salva ninguno de su baja catadura.
Es un circo donde los payasos cobran un buen sueldo y exponen a España a alto riesgo sin la menor responsabilidad.
Contra el vicio de pedir hay la virtud de no dar…Pues lo les demos el voto a ninguno y listo…
Efectivamente, pero parece que, aun así, les siguen saliendo las cuentas con sus trucos
El sistema ya tiene prevista esta contingencia. Le llaman abstención y no la cuentan.
Su acertada descripción me ha traído a la cabeza la imagen de un pobre hombre moribundo en el lecho rodeado de todos sus descendientes peleándose por la herencia. Esto es España y los politicastros de que nos hemos dotado.