Equo aspira a rehabilitar la política en Andalucía con un profesor de Arquitectura
Mientras precandidatos más mediáticos como Carme Chacón y Alfredo Pérez Rubalcaba se baten en duelo por la «pole» de la Federación socialista, en Andalucía, un profesor de la Escuela de Arquitectura, Esteban de Manuel Jerez, conseguía el puesto de salida en la parrilla de Equo para las elecciones autonómicas del 25 de marzo tras medir sus fuerzas con otros seis aspirantes. Lo hizo sin tantos flashes, muy pocos, de hecho; y sin concitar demasiada atención, pese a que las primarias abiertas en el partido ecologista fueron inusuales, puesto que los militantes de la formación encabezada por el exdirector de Greenpeace en España, Juan López de Uralde, votaron por su mejor opción a través de internet a mediados de enero.
De Manuel Jerez recibió el respaldo de casi la mitad del «electorado» del partido ecologista, que estaba compuesto solo por 392 personas. El candidato de Equo a la Presidencia de la Junta de Andalucía ocupa el lugar número uno en la lista por Sevilla, una circunscripción con la que ya concurrió a las elecciones generales del pasado 20 de noviembre de 2011. En aquella cita con las urnas, la formación de López de Uralde sí vio entrar a su escaño en Valencia en el Parlamento nacional (en coalición con Compromís). En Andalucía, no obstante, obtuvo 35.000 votos, lo que representó cerca del 1% del voto de esta región. El objetivo que se propone ahora Equo es el de «ensanchar el espacio propio que la formación consiguió» en esos comicios y revalidarlo el próximo 25 de marzo. Para ello, quiere trabajar para dar a conocer en las ocho provincias «el proyecto de un cambio de modelo hacia la sostenibilidad, que puede ayudar a salir de la crisis económica y social». En la confección de esas ocho listas hay otra novedad: son candidaturas «cremallera», es decir, con alternancia de género en cada lugar.
Dar una salida «sostenible» a la crisis
La salida «sostenible y equitativa, con justicia social» a la intrincada situación económica que atraviesa Andalucía es uno de los pilares del programa con el que se presenta Equo a las elecciones autonómicas andaluzas, con un claro escenario de trasfondo: arrebatar una pizca del protagonismo bipolar que atesoran PSOE y PP en la Comunidad. No en vano, Esteban de Manuel apela desde sus continuas publicaciones en su cuaderno de bitácoras -«Letras emergentes»- a que Equo haga las veces de «una bola de billar» en la partida autonómica, capaz de «romper el círculo vicioso en que se ha convertido el poder en Andalucía», esgrime.
Equo pretende que la carambola perfecta llegue de la mano de este profesor de Arquitectura, implicado desde hace años en todo tipo de iniciativas solidarias, universitarias y vecinales, y que encontró en el partido de López de Uralde la horma perfecta para su currículo.
Es lo contrario a un charnego en Andalucía. De origen granadino, nació en Barcelona en 1964, está casado y tiene dos hijos, vive desde 1982 en la ciudad hispalense, donde estudió y enseña Arquitectura, en la Escuela provincial. En su trayectoria recoge expresamente iniciativas medioambientales, como la mejora de los barrios sevillanos con criterios de sostenibilidad, que llevan por nombre asignaturas como Hábitat y Desarrollo, un Máster en Gestión Social del Hábitat y la puesta en marcha de la revista «Hábitat y Sociedad». También es el encargado de dirigir el aula digital de la ciudad, es miembro del Colectivo Universidad frente a la Crisis y fue miembro activo del movimiento del 15-M. En 1993 fundó Arquitectura y Compromiso Social, desde la que ha trabajado por el derecho a la vivienda y la ciudad», recoge en su biografía; además de colaborar en el lanzamiento de la Red Ciudadana la Sevilla que Queremos entre 1999 y 2004 y actualmente coordina también el proyecto europeo CAT-MED, de Ciudades Mediterráneas Ssotenibles.
«Rehabilitar» la política desde dentro
Llama la atención su especialidad en el campo de Rehabilitación a través de programas públicos, ya que forma parte de su batallón de obsesiones «rehabilitar» la política desde dentro, tras más de 25 años colaborando en diversos movimientos sociales que le han llevado a abanderar la acción en la calle. Por ello, dice haber encontrado en Equo su partido ideal «de base ciudadana, comprometido con la Justicia social y la Ecología». Compromisos que suscribió el día que fue declarado como «vencedor» de las primarias en Equo y en el que afirmó encarar con una gran «ilusión» la «responsabilidad de hacer frente a una situación tan difícil y ante la falta de perspectivas de salida que dan los partidos mayoritarios».
Sin casi recursos económicos, las propuestas que encarna De Manuel Jerez estriban en «crear empleo en sectores donde Andalucía es competetiva, como el de las energías renovables». Aquí el desafío es conseguir la autosuficiencia energética para la región «lo antes posible». Segundo reto que liga al primero es el de remontar una situación de escasez energética, que requiere, para Equo, «un nuevo impulso en el tejido empresarial y social».
Tercer reto: según el partido ecologista, es una prioridad «potenciar la agricultura ecológica» en una autonomía donde es tan crucial este sector primario.
El verdadero mensaje que intentará que cale entre la población antes del próximo 25 de marzo es el de que la salida a la crisis es posible con una economía ecológica y que, para ello, «Andalucía necesita una voz de Equo en el Parlamento», y por ende, un grupo potente de la formación en al Comunidad, según sus propias palabras, que fomente una relación más intensificada entre las Cámara regional y las iniciativas populares.
En la corrupción…
Además, en el espejo de corrupción en que se está mirando Andalucía desde que se destapase el escándalo de los ERE fraudulentos, el candidato de Equo a la Presidencia del Ejecutivo regional ofrece su particular diagnóstico, y receta a la par, al votante: «Tenemos una situación política corrompida, derivada del hecho de que haya estado gobernada por un único partido, el PSOE, que está agotado en cuanto a ideasy capacidad de liderazgo y que ha creado redes de corrupción y clientelismo político que son un lastre. Ante esta situación no se puede dar un paso atrás con un gobierno del PP. Tenemos que crear alternativas nuevas enraizadas en la sociedad y que le devuelvan su protagonismo».
El líder de Equo apoyó la legalización de Bildu, creo que con esto ya está todo dicho.