“No somos terroristas ni delincuentes. Somos grupos de personas apolíticas que nos hemos unido bajo el nombre de Anonymous para protestar por una sociedad más libre y menos corrompida”. Quien así se expresa es un usuario de la comunidad on line que dice pertenecer a Anonymous. Sostiene que las acciones de Anonymous se han convertido en molestas para el poder porque, por vez primera, “los ciudadanos tienen acceso a informaciones que no les proporcionan los medios informativos habituales”. Atribuye a ese motivo las detenciones de la cúpula de Anonymous y lamenta las declaraciones en las que la policía relacionaba la organización con el grupo terrorista Al Qaeda. No es el único.

La secretaria federal de Comunicación Interna de Izquierda Unida, Amanda Meyer, ha calificado de acto “grotesco” la comparación de la organización Anonymous con el grupo terrorista Al Qaeda hecha por la Policía Nacional al desmantelar la cúpula de Anonymous. Meyer lamenta que estas declaraciones hayan sido asumidas por el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, al que califica por este motivo de “ridículo”. “Es absolutamente intolerable equiparar los ataques de Anonymous con los ataques de Al Qaeda, porque nada tienen que ver los presuntos ataques a webs de partidos, agencias o juntas electorales con acciones terroristas indiscriminadas contra civiles”, repone la dirigente izquierdista.

Se critica asimismo que las detenciones se hayan justificado como una acción encaminada a prevenir la difusión de “datos sensibles” en web cercanas a ETA. “Esto lo dicen los mismos que, con sus presiones a los tribunales, han permitido que ETA gobierne hoy en más de cien ayuntamientos del País Vasco y Navarra”, repone nuestra fuente en alusión a la concurrencia electoral de Bildu.

Sin embargo, lo que a decir de nuestra fuente subyace tras las detenciones es el temor a que Anonymous revelase “información comprometida” acerca de los atentados del 11-M, entre ella la grabación de una conversación mantenida en un restaurante de Madrid unas horas antes de las elecciones generales de 2004.

Según parece, Anonymous dispondría de una vasta información sobre la participación en los atentados de los servicios secretos de un país oficialmente amigo y que refutaría las expolicaciones oficiales sobre el magnicidio. Datos hasta ahora desconocidos sobre la supuesta muerte del GEO en Madrid, así como de las reuniones preparatorias de los atentados en la cancillería de un país europeo y los testimonios de un agente de la CIA desgranando los antecedentes del 11-M y dando a conocer las identidades de sus inductores, serían algunas de las informaciones que Anonymous pretende dar a conocer antes de las elecciones de 2012.