En twitter me entero de que el anunciante de crecepelos, Antonio Jiménez ha brindado con cava en el programa que ya no ve casi nadie “El gato al agua”, para oponerse a los boicots a productos catalanes. Estos son tiempos para la dignidad y la claridad: Intereconomía es enemiga de España. Es, por de pronto, una sucursal de La Caixa, bastión financiero del separatismo, y financiadora durante tiempo de Intereconomía.

Nada hay peor que las coartadas del sistema e Intereconomía es una de ellas. Ese gesto, que por motivos obvios es una orden de Julio Ariza y una posición editorial de ese Grupo quebrado, entregado a Mario Conde, el insolvente, que lo es tanto como Al Capone inocente. Intereconomía se posiciona de ese forma contra la posición patriótica de Alerta Digital y contra la que yo estoy manteniendo a través de mi twitter (Enrique_deDiego) contra Nutrexpa cuyo empresario, Javier Ferrero, se posicionó por el separatismo en la manifestación del 11-S. El boicot contra Cola Cao, Nocilla, La Piara, La Granja San Francisco, Bocadelia, Phoskistos, Cuétara… está funcionando y poniendo nerviosos a los separatistas.

Lo que ha hecho Intereconomía es posicionarse por el separatismo. Porque Julio Ariza no tiene ni entiende otra Patria que la pasta. Deben saber los lectores que apoyar de cualquier manera a Intereconomía es ir contra España, contra la unidad de España y posicionarse con estos traidores, cuya televisión ocupa el puesto 25 en el share y hundiéndose y cuyo periódico La Gaceta ya vende menos que cuando era diario económico.

Nadie boicotea, por lo demás, productos catalanes, sino separatistas, de separatistas. Lo que le ha dolido a Intereconomía es que ha dado un tiempo para que La Caixa muestre su rechazo al separatismo y su adhesión a la unidad de España o se pasará la boicot. Intereconomía es una sucursal de La Caixa. Su presidente Isidro Fainé ha sido agasajado por Intereconomía varias veces en marisquerías de postín en Madrid, que es en el protocolo de Ariza el máximo de respetabilidad. En esos almuerzos Isidro Fainé exige respeto absoluto a la “identidad catalana”, al separatismo. Asistí a uno, me harté y le dije que los patriotas españoles estábamos hartos de las continuas agresiones a nuestros sentimientos por los separatistas.

En “Dando caña” he contado como Julio Ariza exigió a un jubilado que retirara su bandera de España en una manifestación en defensa de Intereconomía frente a una concentración gay que protestaba por la supuesta homofobia del Grupo. Ariza no quería que le tildaran de extremaderecha. Ese es su patriotismo vergonzante y acomplejado. Otras veces ha puesto la bandera de España en la mosca. Todo por la pasta.

Lo de posicionarse con los productos catalanes es la gota de cava que desborda el vaso. Puede suponerse que buscan que les pongan publicidad porque nadie les pone dado su nivel de audiencia que está más bajo que el vuelo del grajo cuando un frío del carajo. No pagan las nóminas. No han pagado las de este mes, pero tampoco el 50% del anterior, ni las extraordinarias. Los mensajes que dejan trabajadores de Intereconomía en regeneracionya.com son tremendos. Personas a las que les quedan 200 euros en el banco, que no podrán pagar la hipoteca y que trabajan “gratis” 10-11 horas. Ya le llaman ladrón a Julio Ariza con todas las letras y mentan a su madre.

He dicho y reafirmo que no he conocido a personas con menos escrúpulos y menos talla moral que Julio Ariza y Mario Conde. Con menos patriotismo, en ambos casos, pero sobre todo en el del primero. Con menos coherencia, antimasón uno y masón el otro, supuesto católico fariseo uno y seguidor del Tao de Lao tsé el otro, menuda cencerrada.

Vamos a seguir con los boicots mientras la antipatriótica Intereconomía se encamina a su triste final, a su inminente extinción. Es el arma que tiene, que tenemos la sociedad civil frente al separatismo y la cobardía del Gobierno lelo y débil de España (¡vamos que pedir perdón porque dos aviones surquen territorio español, comarcas catalanas, serán gilipollas!).

Es un arma eficaz, en la que seremos constantes y permanentes. Estas navidades brindaremos con cava, por supuesto, pero no será catalán, porque hay cava de Requena, de Valladolid, de Extremadura, de toda España, y hay sidra. Lo que no va a haber es extraordinaria. Brindaremos con cava del empresario que se manifieste español y que repudie el separatismo. En otro caso, que se lo beban el calvo lacayo Antonio Jiménez y el patriota a ratos y de faltriquera Julio Ariza.