Los beneficios de la gimnasia para mayores
Mantenerse activos, evitando el sedentarismo, beneficia al organismo. Sin embargo, exigirse demasiado después de mucho tiempo sin hacer ejercicio puede provocar lesiones. Con la edad, el cuerpo se encuentra más frágil y se puede temer sufrir algún daño.
Además, la inactividad puede haberse convertido en una rutina difícil de romper. No obstante, la solución para mantener la salud no consiste en evitar los esfuerzos, ya que eso nos hace progresivamente más vulnerables, sino habituarnos a realizar tareas que se adapten a nuestras capacidades. Con la gimnasia para mayores de Salus Mayores, puedes fortalecerte para proteger tu salud y enfrentar mejor las enfermedades.
Aumenta tus capacidades
Aunque la edad y las patologías pueden moldear la forma de hacer ejercicios, sus beneficios son universales para todos.
Para empezar, incluso los movimientos más suaves, como los del taichí, pueden mantener o aumentar la movilidad de las articulaciones. Como si fueran bisagras, el movimiento evita que se vuelvan rígidas.
Del mismo modo, dado que nuestro organismo optimiza sus recursos con base en lo que usamos y lo que no, moverse evita que se pierdan las capacidades de las estructuras que permiten este movimiento. Es decir, no solo conserva las articulaciones, sino también los músculos, tendones y ligamentos, incluyendo su fuerza y flexibilidad.
En caso contrario, una parte del cuerpo que no se mueve, se degenera y resulta más difícil recuperarla.
Con el ejercicio, también puedes fortalecer tus músculos, por lo que te costará menos esfuerzo hacer actividades cotidianas, como subir las escaleras. Igualmente, al mantener el hábito de ejercitarse, nos volvemos más resistentes, nos cansamos menos y podemos esforzarnos durante más tiempo. En muchos ejercicios, incluso podemos desarrollar un mejor equilibrio, lo que nos protegerá contra las caídas.
Hace frente a la enfermedad
Estas capacidades no solo nos ayudan a preservar la salud, sino que, si padecemos una enfermedad, será menos dura y podremos recuperarnos antes. En estos tiempos, es especialmente importante resaltar cómo el ejercicio aumenta la capacidad pulmonar y el uso eficiente del oxígeno por nuestros músculos.
Si necesitáramos hospitalización y permaneciéramos en cama, la inactividad tiene un coste. Afortunadamente, los fisioterapeutas se encargan de mantener nuestras capacidades. No obstante, siempre es importante ser activos para partir de una mejor condición. De esta manera, seremos menos dependientes y nuestra recuperación será más rápida.
Ayuda a socializar
Por último, hay un factor que a veces se olvida cuando tenemos en cuenta los beneficios del ejercicio: el factor social.
Los humanos somos animales sociales y, conforme pasan los años, es más común aislarse, sentirse solos o que se reduzca el círculo de amistades. Esto pasa factura anímicamente y, por increíble que parezca, también puede afectar a nuestro cuerpo.
Hacer ejercicio en grupo permite tener un lugar donde relacionarse, reírse, compartir nuestras vivencias y evitar pensamientos negativos. Además, permite encontrar la motivación para continuar con la actividad, ya que es frecuente encerrarse en un ciclo repetitivo donde nos convencemos de que no merece la pena intentar cosas nuevas.
Al dar el paso y socializar, conseguimos favorecer nuestra capacidad cognitiva, es decir, nuestra capacidad para razonar, aprender y recordar.
Por estas razones, es recomendable conseguir una vida activa. Con ella, no solo mejorarás físicamente y tendrás más facilidad para hacer las tareas diarias o reducirás la gravedad de muchas enfermedades, sino que disfrutarás relacionándote con otras personas como tú.