Feijóo lidera la respuesta a Escrivá y plantea en Galicia una bajada de impuestos emulando a Madrid
El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, ha ratificado que los presupuestos gallegos para el próximo 2022 irán acompañados de una rebaja fiscal de impuestos autonómicos con la que espera llegar, ha concretado, “a más del 90 por ciento” de los gallegos. Con todo, el foco estará “con carácter específico y más intenso” en familias numerosas, menores de 35 años y personas con discapacidad.
El titular de la Xunta ha dado por cerrado que habrá nuevos beneficios fiscales en los impuestos autonómicos (entre ellos el de Patrimonio y el de Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados) y ha reivindicado la apuesta, en un marco condicionado por la pandemia, por hacer “una política expansiva de gasto”.
En este sentido, el Impuesto de Patrimonio también es uno de los que genera más debate en la Comunidad de Madrid, donde los ciudadanos madrileños no tienen que afrontar coste alguno por este tipo de impuesto.
En la crónica de la política regional, el anuncio de Feijóo se ha entendido como una nueva muestra de rechazo a la intención de Ximo Puig, avalada por el ministro Escrivá, para crear un impuesto único a la Comunidad de Madrid, intención que en las últimas horas ha sido rechazada por varios presidentes autonómicos y también por la ministra de Hacienda, María Jesús Montero.
Escrivá se entrevistó con el presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, quien propuso recientemente un impuesto, u otra “herramienta” de aportación, específico para las rentas altas de la Comunidad de Madrid que compensen los beneficios de la capitalidad frente a otros territorios.
“Es algo que se ha estudiado y que tiene mucho sentido”, ha respondido el ministro al ser preguntado sobre este asunto tras su encuentro con Puig. A su juicio, “la idea tiene mucho recorrido y hay que seguir explorándola”.
Tras estas palabras, que desde el Gobierno de la Puerta de Sol se han tachado como un nuevo ejemplo de “madrileñofobia” por parte del Ejecutivo de coalición, varios líderes autonómicos se sumaban a la línea de María Jesús Montero para rechazar las intenciones del presidente de la Comunidad de Valenciana y avaladas por José Luis Escrivá.
Por ejemplo, el presidente extremeño, Guillermo Fernández Vara, ha calificado como “ocurrencia” la tasa que propone Puig y señala que este tipo de debates solo provocan confrontación.
Por último, el presidente de Aragón, también socialista, Javier Lambán, no apoya la imposición de este impuesto, aunque sí considera oportuno caminar hacia una nueva armonización fiscal entre todas las autonomías: “No somos partidarios de imponerle tasas específicas a ninguna comunidad, sea la que sea”.