Pollo Carvajal, Mesa de diálogo
Que el actual gobierno se compone de estafadores y delincuentes debiera ser el punto de partida de cualquier análisis político y de prensa. Pero en España, desde aquello de los “cien años de honradez” del PSOE, la política se basa en la ficción, la “imagen” y el ilusionismo. La relación “económica” de la narcotiranía de Chávez y de Maduro con el PSOE y Podemos es el secreto de Polichinela, pero no puede decirse porque “no hay pruebas”. Y ahora parece que habrá esas pruebas con la detención del “pollo Carvajal” y su extradición a Usa (pues ya pueden suponer que en manos de los cómplices y colegas españoles de Maduro nunca habría prueba alguna). La detención del “Pollo” se demoró después de que la policía useña descubriese a la española su paradero, y ahora la “justicia” española aplaza la extradición so pretexto de que el personaje había pedido asilo a España… hace dos años, en los cuales vivió prófugo.¡Cuánto formalismo de una “justicia” a lo Dolores Delgado! La propia fuga de Carvajal tendría que anular la petición de asilo, pero ya ven…
El problema con el “pollo” es que sabe demasiado, y la pandilla de la Moncloa se encuentra en situación muy delicada, entre las exigencias de Maduro y las de la justicia useña, esta algo mejor todavía que la de los asesinos de Montesquieu españoles. Un problema muy complicado. No sería extraño que Carvajal se “suicidase” para evitar problemas. Hay en Madrid el precedente de otro personaje relacionado con Venezuela, que había anunciado su disposición a colaborar en el descubrimiento de la verdad. Delincuencia y política han solido ir estrechamente unidas en Latinoamérica, y desde hace años España se viene latinoamericanizando. Muchos creen que el gobierno debe de estar temblando ahora, pero quizá no tiemble demasiado. En España llevan sucediendo desde hace mucho cosas gravísimas, ¡y “no pasa nada!”. Cierto que los enterados también creían que “en España nunca pasa nada”…, en vísperas de la república.
**Otro rasgo de los delincuentes es su afición a lo que llaman “diálogo” y que por lo común han sido chanchullos oscuros, como los sostenidos con la ETA, cuyas víctimas han sido siempre el estado de derecho, la democracia y la unidad de España. El doctorado portero de discoteca quiere redondear el golpismo de 2017, reforzado con el indulto golpista posterior, con otra “mesa de diálogo” en la que España y Cataluña aparecen ya como dos naciones distintas y en las que se legitimará el golpismo separatista. ¡Y no pasa nada! ¿Hasta cuándo?
Desde que prohibieron los golpes militares se ha puesto complicadisimo lo de proponer soluciones viables a la situacion actual del pais.