GP de Corea.- Vettel, nuevo líder del Mundial de Fórmula 1
Después de lo que había pasado en Japón y Singapur, era cuestión de tiempo que lo consiguiera. Sebastian Vettel ya es líder del campeonato de Fórmula 1, después de llevarse con una autoridad aplastante el Gran Premio de Corea, una prueba que ha liderado desde la primera curva hasta el final.
El bicampeón alemán tiene entre ceja y ceja convertirse en tricampeón, y si su rendimiento sigue a este nivel, Fernando Alonso tendrá más que complicado volver a lo más alto. El español ha acabado en un óptimo -que no perfecto- tercer puesto, noveno podio de la temporada para el asturiano, pero que se ha mostrado insuficiente para aguantar el ritmo del de Red Bull. Después del abandono en Suzuka no cabía la posibilidad de volver a fallar, y menos cuando Vettel está en estado de gracia. Por eso, aunque el español ha cedido el liderato, aún quedan cuatro carreras. Visto de otra forma: seis puntos de desventaja con cien aún en juego es una diferencia más que accesible para él.
La mejora de Ferrari para esta carrera se ha notado, sobre todo viendo el ritmo no sólo de Alonso sino de un ‘resucitado’ Felipe Massa en las últimas pruebas. El piloto brasileño ha tenido momentos brillantes en Corea, e incluso desde el muro se han visto obligados a recordarle su rol en el equipo. Mediada la carrera, el ritmo del subcampeón de 2008 recordó a sus mejores épocas, y estuvo a punto de alcanzar a su compañero en pista. La situación en el campeonato no deja lugar a luchas internas, y por eso desde el muro le avisaron de que debía mantener la distancia. Las polémicas órdenes de equipo volvieron a salir a relucir, pero dado que este año están permitidas, no a lugar para protestas por parte de nadie. De hecho, el propio Massa se lo ha tomado como parte de su trabajo y ha salido más que satisfecho de Yeongam.
Al buen resultado de los pilotos que Ferrari hay que unir el desastre de McLaren para explicar por qué los italianos han superado a los británicos en la clasificación del Mundial de constructores. No ha sido, ni mucho menos, el domingo para Button y Hamilton, y no se les puede achacar la culpa a ellos. Primero, Kamui Kobayashi ejerció de ‘kamikaze’ y en la primera vuelta embistió a Jenson y a Nico Rosberg, provocando el abandono de ambos y llevándose un ‘drive through’ de sanción por parte de la FIA. El enfado de Button, normalmente calmado, se tradujo en un sonoro insulto al japonés, al que llamó “idiota” por radio. Para Hamilton no ha sido tampoco una carrera cómoda.
Justo después de la primera parada en boxes, cuando estaba peleando con Kimi Raikkönen, la barra trasera de su suspensión falló y comenzó a tener serios problemas para mantener el coche en pista. Esto provocó que sus neumáticos se degradaran más rápido de lo previsto, y tuvo que hacer un tercer e imprevisto cambio de neumáticos. Su actuación en esta carrera, calificada como “heroica” por parte de su jefe de equipo Martin, acabó rozando el surrealismo cuando, en las vueltas finales, se le quedó enganchado un trozo de la alfombra del ‘astroturf’ (el césped artificial que cubre algunas zonas de las escapatorias de las curvas) al lateral del monoplaza.
Vettel y Webber, inalcanzables
El tercer puesto fue lo máximo que pudo conseguir Fernando Alonso en esta carrera. Pese a que una gran salida pudo colocarse en tercera posición, los Red Bull se mostraron inalcanzables en toda la prueba. De hecho, Vettel no soltó el liderato ni en sus paradas en boxes, ya que Webber suficiente tuvo con aguantar, con relativa facilidad, los envites de Alonso por detrás.
Ferrari dedicó la carrera a cubrir y asegurar el podio del español. En la primera, aguantaron sobre un Hamilton que poco a poco fue decayendo. En la segunda, nada más ver que perdían tiempo con un Webber con gomas frescas, no especularon y reafirmaron el puesto de Alonso. Y, por si fuera poco, nada más comprobar que Massa tenía ritmo para superar a su compañero, antes de que le dieran tentaciones, le recordaron de manera tácita cuál es su situación en el equipo. El brasileño, a sabiendas de que su renovación está casi firmada, acató la orden sin rechistar.
Al final, nueva victoria de Sebastian Vettel, que ya lleva cuatro esta temporada, y un liderato que deja bien a las claras que, si no fallan en las cuatro pruebas que quedan, tiene el título a tiro. A Alonso le ha costado muy caro no haber puntuado en Spa y Suzuka, ambos por incidentes ajenos a él, pero tampoco ha tenido un monoplaza con el que defender en condiciones el primer puesto. De hecho, hay un dato demoledor que deja bien a las claras en qué situación se encuentra Ferrari: desde el GP de Alemania, Alonso no ha liderado ni una vuelta.
Quedan cuatro carreras, o lo que es lo mismo, 100 puntos en juego. Sólo seis pilotos pueden proclamarse, matemáticamente, campeones del mundo: Vettel, Alonso, Raikkönen, Hamilton, Webber y Button. Las opciones reales quedan reducidas a los dos primeros, a tenor de lo visto en la pista. ¿Qué son unas seis gotas de puntos en un mar de cien?