La selección de Alemania ha conseguido clasificarse para las semifinales de la Eurocopa 2012 tras vencer a Grecia (4-2), en un partido en el que destacó el buen papel de Sami Khedira, autor del segundo gol germano, y por el cambio de apuesta de su técnico, que dejó en el banquillo a su pichichi Mario Gómez. Alemania, que se enfrentará en semifinales a Italia o Inglaterra, no ejecutó su favoritismo hasta la segunda mitad, cuando Samaras activó todas las alarmas con el empate (1-1). Corría el minuto 50 y el conjunto heleno tenía el partido donde quería.

Grecia no se lo creyó, pero generó dudas en el bando de Low. Samaras, en una carrera bestial, se posicionó en el corazón del área para remachar un excelente centro de Salpingidis. Alemania, mejor durante todo el encuentro, se vio obligada a volver a remar. Uno de los más destacados, Sami Khedira, evitó que la ‘Mannschaft’ se quemase. El centrocampista del Real Madrid cambió por completo el partido. El primero del encuentro había sido obra de Philipp Lahm, el eterno lateral alemán batió a Sifakis con un disparo puñetero.

El defensa del Bayern la pegó con el alma y el efecto descolocó al meta heleno. Eso no traspapeló los planes griegos, que tuvieron su momento de gloria. Sin embargo, desde el gol de Samaras hasta el de Khedira únicamente pasaron cinco minutos. En ese momento, el fútbol de la vigente subcampeona de Europa fue más que suficiente para desarbolar la muralla de Grecia y dejar sentenciado el pase a semifinales.

Klose, especialista en marcar con Alemania, puso el tercero, y Reus, a cuarto de hora de final colocó el 4-1 en el marcador. Sólo unas manos dentro del área permitieron a los pupilos de Fernando Santos establecer el definitivo 4-2, que pone fin a la aventura griega. De esta forma, Alemania jugará su cuarta semifinal consecutiva desde el Mundial de 2006, donde cayó con Italia, pasando por el subcampeonato en la Euro 2008, y la derrota, también con España, en el penúltimo escollo antes de la final en Sudáfrica 2010.