La patera educativa española
Margarita Cabrer.- Directores de varios centros de enseñanza en Extremadura están recibiendo instrucciones de la Consejería de Educación para que midan las clases. Según CSIF deben dar cuenta de los metros cuadrados de las aulas, en relación al futuro aumento del número de alumnos en ellas.
CSIF, PIDE, ANPE, UGT Y CC OO se concentraron al saberlo a las puertas de la Consejería de Educación y Cultura, en Mérida, para rechazar las medidas anunciadas.
Cuando yo estudiaba la ratio era de 36 alumnos por profesor más o menos y nos dieron una enseñanza de calidad. Lo que ocurre hoy día es que; aunque la media de alumnos por profesor sea mucho menor, no hay quién dé clase porque los profesores no tienen autoridad. Se esfumó con las sucesivas, nefasta y adoctrinadoras reformas educativas habidas durante la democracia.
Llegados a este punto voy a aclarar que llevo a mis tres hijos a un colegio público por pura convicción. No como algunos hipócritas que lo hacen porque se quedaron sin plaza en el concertado que ellos querían.
Les confieso que he sentido lástima cuando me he enterado de que estaban midiendo las clases; por los chicos y por los profesores.
¿pisos patera? Ahora también clases patera.
Por los chicos porque el mediano mío, por ejemplo, tiene dieciséis años y mide 190cm. Es obvio que los chicos de ahora necesitan más espacio que el que nosotros teníamos cuando estudiábamos y algunos colegios todavía son de aquella época.
Pero escuchando las reacciones negativas de los sindicatos de profesores no escucho otras razones que no sean económicas; ninguna pedagógica. Por eso deduzco que, de momento, se apuntan solo al follón.
El presidente del Sindicato del Profesorado Extremeño (PIDE), José Manuel Chapado, pronosticó que los ajustes van a afectar a cientos de profesores y maestros y que su pretensión es que no se apliquen ya que hay otras partidas presupuestarias de donde recortar.Tomás Chávez, de la federación de enseñanza de Comisiones Obreras, criticó este recorte histórico que no tiene precedentes, mientras que la secretaria de organización del Sindicato de Profesores ANPE, Ana Bravo, subrayó la injusticia de las medidas.
Pero de los chicos nada de nada.
Y a estas alturas de la película cuando las familias nos hemos tenido que conformar con 2000/4000 euros menos al año y cuando ya sabemos que más gasto en educación no es equivalente a mejores resultados; va a ser muy difícil que nos hagan desfilar a los padres delante de “su” pancarta; sobre todo cuando no mencionan a nuestros hijos para nada.
Los sindicatos y FREAPA en Extremadura no alertaron de las consecuencias nefastas que para la comunidad educativa tendría el sueño ciclópeo de un solo ojo: la educación 2.0. ¿Quizás no las vieron venir? ¡Ordenadores para todos! cuando los centros no tenían ni siquiera acometida eléctrica para enchufarlos simultáneamente.
Gazmoños miedosos de perder influencia que enrojecían sus manos de tanto aplaudir al líder.
Si los sindicatos y la FREAPA hubieran sido sensibles a las quejas de los padres entonces…
…Cuando estos les decíamos que preferíamos profesores de apoyo en vez de tecnología.
…Y que en algunos centros con niños discapacitados impartir clases era imposible sin cuidadores.
…O que hacía falta un enfermero, aunque fuese compartido entre varios centros, para poner insulina a algunos niños o administrar medicamentos menores…
…O que no queríamos que se interrumpiera el curso de las clases docentes para que el colectivo homosexual entrase en las aulas a hablar a los chavales…
Ahora nos tomaríamos en serio sus convocatorias de huelga. Nos creeríamos que están preocupados por la calidad de la enseñanza que dan a nuestros hijos.
Pero como han funcionado como correa de transmisión del pensamiento del gobierno de turno han quedado como patanes.
Los padres seguimos en la brecha preocupados por la calidad de enseñanza que pagamos con nuestros impuestos.
Llevo más de cinco años afirmando que las clases de Educación para la Ciudadanía son adoctrinadoras sea cual sea el contenido que tengan; porque lo son los decretos que desarrollan los objetivos curriculares.
Y sigo y seguiré objetando por mucho que ahora diga el ministro que con dos asignaturas suspensas no se dará el título.
Mi hijo mayor obtuvo el título de la ESO con la EpC de 3º y la EpC de 4º suspensas y este año acaba el Bachiller; va a hacer una ingenieria. Tiene 17 años. Fue con el gobierno socialista.
Señor Wert, ¿va a hacer usted bueno al ministro Gabilondo?
Quiero una educación de calidad y si para ello debemos renunciar a que sea el gobierno quien construya los colegios, y quien contrate al personal y quien gestione los centros me parece bien. ¿Cuál es el problema? ¡Cheque escolar ya!
Si está demostrado que la gestión particular de unos ciudadanos que se responsabilizan ante los padres es más eficaz que la de quienes solo tienen que rendir cuentas a un ente abstracto con la mentalidad de que “el dinero público no es de nadie” (Carmen Calvo Dixit); que se les de a estos ciudadanos la libertad de emprender un proyecto educativo.
El gobierno puede limitarse a vigilar, con evaluaciones externas, que el nivel académico de los centros sea el apropiado. Pero aunque no lo hiciera; el propio éxito profesional de los alumnos garantizaría la calidad.
*Secretaria general de Alternativa Española (AES) en Extremadura.