Mientras hoy pide la intervención militar en Libia, Zapatero felicitó a Suiza en 2007 por excluir de la lista negra de Schengen a la familia y los principales colaboradores de Gadafi
El ex ministro español de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, fue delegado por Zapatero en 2007 para cerrar la crisis que desde hacía casi tres años enfrentó a Suiza con el régimen de Gaddafi. Como presidente de turno de la UE, José Luis Rodríguez Zapatero leyó entonces, al término de una cumbre de Bruselas, una declaración en la que, tras felicitarse por la decisión de las autoridades suizas de excluir de la lista negra de Schengen a 180 ciudadanos libios -incluida la familia y los principales colaboradores de Gaddafi- agregó: “Lamentamos los problemas que haya podido ocasionar a los ciudadanos libios afectados por esta medida”. La frase supuso una petición de disculpas en términos diplomáticos y la leyó Zapatero a petición de Moratinos.
Zapatero expresó su confianza en que la crisis se resuelviera “en las próximas horas o días”, para lo que es necesario que Trípoli elimine “de manera inmediata” las restricciones a la entrada en el país de ciudadanos europeos, a los que niega el visado, y que el empresario suizo Max Goeldi, encarcelado en Libia, “pueda regresar a su país a la mayor brevedad”.
La crisis de Libia con las autoridades suizas que tuvo a Zapatero como mediador se inició cuando un hijo del dictador libio, Hanibal Gaddafi, fue detenido en el país helvético tras una denuncia por malos tratos de dos empleadas domésticas. Aunque quedó en libertad sin cargos, su padre consideró la detención una afrenta, lo que dio pie a una escala de represalias. Primero retiró más de 3.700 millones de euros de los bancos suizos y luego detuvo a dos empresarios de dicha nacionalidad, que estuvieron refugiados en la Embajada de la Confederación Helvética en Trípoli hasta que uno pudo salir del país y otro ingresó en prisión para cumplir una pena de cuatro meses. Suiza incluyó a la élite del régimen libio en la lista negra de Schengen, lo que no sólo les impedía entrar en dicho país, sino en cualquiera del espacio europeo sin fronteras.
Algún camello que otro seguro le regaló a Zapatero, o un Rolex, o su 2ª residencia en Vera en Almeria, o joyitas de Cartier a la Sonsoles, o…. MUCHA PASTA a modo de prebendas. Menudo Suciolista, Suciolista el pueblo, él como Chauchesco, con los grifos de oro.
COMO TE DUELE TODO ESTO INCULTO