José Ramón Riera.- Desde que llegó Pedro Sánchez el gasto público se ha disparado, a cierre de 2023, en 200.000 millones, pasando de 480.000 millones en 2017 hasta los 680.000 millones en 2023, lo que ha supuesto un crecimiento del 41 %. Para pagar este Gasto Público, los impuestos han pasado de los 444.000 millones en 2017 a los 628.000 millones, lo que supone un crecimiento de 184.000 millones que en porcentaje supone crecer también un 41 %.

Así que ahora la pregunta que cada uno de nosotros debemos hacernos es, ¿y nuestros ingresos han crecido, con este gobierno, un 41 % a nivel personal? Hasta ahora, los más privilegiados han sido los pensionistas, porque como suman 9,3 millones de votos, el Gobierno no se ha cortado en absoluto en subir todo lo que ha podido y más y así ha pasado de una pensión media en 2017 de 913 euros a una pensión media de 1.199 euros que supone una subida del 31 %, lo cual supone, a pesar de todo, una subida inferior a la subida de los impuestos.

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Según el INE de Elena Manzanera, nada sospechosa de ir en contra de los intereses del Gobierno, nos dice que entre 2017 y 2022 el salario medio de los españoles pasó de 23.647 euros a 26.949, lo que representa un 14 % y que, como mucho, se habrá actualizado en otro 4 % en 2023, lo cual quiere decir que la media de subida de los asalariados españoles estará en un 18 %, que como vemos es mucho menor que la subida de la pensión media y que la subida de los impuestos de un 41%
La pregunta que debemos hacernos es por qué el Gobierno ha subido los impuestos un 41 %. Podemos darnos una respuesta rápida y sencilla: porque le da la gana y porque puede. La realidad es que no se comprende un gobierno socialista, con comunistas en el Consejo de Ministro, que puede pensar en bajar los impuestos, sería como pensar que podemos convertir el desierto de Sahara en la huerta murciana, pero es que además hay una enorme razón de peso, porque los gastos del Estado no paran de crecer desde que está Pedro Sánchez en el gobierno.

Hoy lo que voy a mostrar es que como va el gasto público en el año 2024. Con los datos consolidados para todo el Estado español, es decir. los datos que ha proporcionado la Intervención General de la Administración del Estado a Eurostat, de la suma de la Administración General del Estado, de las Comunidades Autónomas y de las Corporaciones Locales (Ayuntamientos, Diputaciones y Cabildos) y el gasto acumulado a septiembre ya ha superado el gasto de todo el año 2017, prácticamente ha igualado el gasto del 2018, ha sumado 27.000 millones más de gasto que en 2023, ha crecido un 5,5 % a cierre de los 9 primeros meses y nos hemos ido a una cifra de 508.000 millones, que además de preocupante nos lleva a poder decir que, sin ninguna duda, en 2024 habremos pasado con creces los 700.000 millones y que al ritmo que vamos en 2025 superaremos los tres cuartos de billón de euros de gasto.

En este cuadro podemos ver cómo ha ido evolucionando trimestre a trimestre, nuestro gasto público, que en el primer trimestre pega un salto, como es habitual, porque se contabilizan muchos de los «olvidos» del cierre del año, en el segundo trimestre, cuando tenemos que volver a enviar datos a Bruselas, se nos acumula el trabajo y lo mandamos con «olvidos», que en el tercer trimestre tenemos que corregir porque si no ya podría convertirse en un delito.

El cuarto trimestre del año es siempre una locura y en el 2023 los gastos contabilizados crecen un 29 % sobre los del tercer trimestre, por la doble paga de pensionistas y empleaos públicos.

Si para el cuarto trimestre aplicamos que la subida va a ser igual que la media del año, un 5,5 %, que supone crecer un 27,7 % sobre el tercer trimestre, nos vamos a un gasto de 210.154 millones que nos llevaría a un gasto total de 718.635 millones, superando con creces los 700.000 millones, que supone gastarnos 38.000 millones más, en gasto no financiero, que en 2023 y que si a esta cifra se añadiesen los activos y pasivos financieros, superaría con mucho el billón de euros.

Por eso me pregunto: ¿Estamos financiando el progreso o el caos?. Escuchar a Sánchez es creer que financiamos el progreso, pero yo no veo ningún progreso, por ningún lado. Casi siete años de gobierno y ni una obra pública importante iniciada, dos desastres ferroviarios que son de traca en Extremadura y en Cantabria, muchas promesas de viviendas, pero ninguna iniciada y en marcha, crisis permanente en las Cercanías de todas las grandes ciudades, los materiales de la policía y guardia civil, viejos y obsoletos, la defensa nacional olvidada…

¿Qué estamos financiando? Lo pueden responder ustedes sin mi ayuda.

EL Debate