La líder del Frente Nacional francés, Marine Le Pen, ha defendido que una alianza tripartita junto al presidente de Rusia, Vladimir Putin, y el futuro mandatario de Estados Unidos, Donald Trump, «sería buena para la paz mundial», aunque antes la dirigente ultraderechista debería imponerse en las elecciones de abril y mayo de 2017.

Le Pen ha inaugurado la sede de su campaña para estos comicios a menos de dos kilómetros del Elíseo, el «destino final» que espera conquistar el próximo año. Los sondeos sitúan a la dirigente ultraderechista, al menos en la segunda vuelta, enfrentada al candidato de Los Republicanos: Nicolas Sarkozy. La líder del Frente Nacional aspira a sacar partido de un «movimiento mundial» que rechaza la globalización indiscriminada y el «ultraliberalismo», así como «la eliminación de los estados-nación» y «la desaparición de las fronteras».

Le Pen incluye dentro de este movimiento a Trump, reciente vencedor de las elecciones presidenciales en Estados Unidos. De hecho, considera que junto a Trump y Putin podría formar una alianza que «sería buena para la paz mundial». «Si soy presidenta, Francia tendrá buenas relaciones con Rusia», ha prometido Le Pen, partidaria también de restaurar los controles fronterizos o de celebrar un referéndum para plantear la salida del país de la Unión Europea.

Cuestión de imagen

Le Pen ha desvelado este miércoles su lema de campaña —«En el nombre del pueblo»— y un cartel que muestra una rosa azul junto a las palabras «Marine Presidente». El Frente Nacional ha tratado de suavizar su imagen para apelar a nuevos votantes e incluso ha eliminado el nombre del partido del póster electoral.

La presentación del Frente Nacional ha coincidido con el anuncio de la candidatura del exministro Emmanuel Macron a las primarias del centro-izquierda y ha llegado a escasos días de que el centro-derecha celebre la primera de sus dos citas para elegir a quien será su candidato.