La Comunidad de Madrid vivió ayer una jornada negra con tres homicidios en puntos dispares con los que el número de asesinados asciende al menos a 31 y supera los 30 contabilizados en todo 2015. Eso sí, la mayoría resueltos.

En poco más de doce horas se han sucedido un asesinado a tiros en Móstoles durante un posible ajuste de cuentas, una muerta a puñaladas en plena calle de Tetuán presuntamente por su expareja y un hombre apaleado cuyo cadáver fue encontrado cerca del río Guadarrama en Villaviciosa de Odón.

Los datos oficiales del Ministerio del Interior indican que durante el primer semestre de 2016 se contabilizaron 22 homicidios en la Comunidad de Madrid, frente a los 7 del mismo período de 2015, lo que supone una variación del 217 por ciento. Al conocerse esas cifras, el pasado mes de agosto, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes destacó que Madrid es la capital más segura de Europa tras Viena y que la región es muy segura.

Durante los meses de julio y agosto se habían perpetrado al menos seis homicidios más, según el recuento de Efe, con lo que únicamente faltaban dos casos para llegar a la cifra de todo 2015, que finalmente se superó ayer tras la citada jornada luctuosa. El crimen más destacado del año ha sido el ocurrido el 22 de junio en un despacho del barrio de Usera de Madrid, en el que un hombre que aún se busca irrumpió supuestamente buscando al dueño y, al no encontrarle, mató a dos empleadas y a un cliente.

Hacía un década que en Madrid no se cometía un triple crimen y para la Policía su resolución es una prioridad. El año comenzó con cifras similares a las de años anteriores hasta que en marzo se contabilizaron cuatro homicidios en dos fines de semana consecutivos, en diferentes sucesos en los que también hubo heridos graves.

La delegada del Gobierno en Madrid, Concepción Dancausa, explicó en ese momento que la concatenación de esos sucesos fue «una coincidencia» y no suponía un repunte de la criminalidad, aunque reconoció que la situación ponía en tensión a las fuerzas y cuerpos de seguridad para buscar a los culpables.

Tanto Dancausa como el director general de la Policía, Ignacio Cosidó, subrayaron en meses pasados la alta tasa de resolución de casos que logran los investigadores. La mayoría de los crímenes son resueltos poco después de ser perpetrados, y otros varios meses o incluso años después.

Por ejemplo, la Comandancia de la Guardia Civil de Madrid llevaba resueltos hasta ayer tres de los cuatro homicidios que se habían perpetrado en su demarcación este año, según fuentes del instituto armado. Con el homicidio de ayer les faltan por esclarecer dos casos de cinco.