Hazte Oír ha presentado una querella contra Santos Cerdán en la que le acusan de haber comido un delito de falso testimonio ante la comisión de investigación del “caso Koldo” en el Senado en la que compareció el 30 de abril de 2024.

Desde la asociación trasladan a la Justicia que, pese a ello, Cerdán mintió a sabiendas y de forma reiterado” sobre su relación personal y empresarial y la comunicación que habría tenido tanto con Koldo García como con Víctor de Aldama.

Lo vinculan, además, con una intención del que fuera cargo socialista de “evitar atraer cualquier sospecha sobre su posible implicación y vinculación con la trama de cobro de “mordidas” a cambio de adjudicaciones públicas.

Yendo a lo concreto expuesto, Cerdán declaró que se enteró de que el exasesor de José Luis Ábalos estaba siendo investigado gracias a los medios de comunicación, cuando informaron de su detención en febrero de 2024.

Asimismo, durante su comparecencia en la comisión señaló que a partir de entonces no había vuelto a hablar con él. Mientras que de forma previa, entre 2021 y 2023, sus contactos habían sido mínimos, habiendo hablado “dos o tres veces” solamente.

Posteriormente, el exdiputado del PSN en el Congreso recalcó que en ese período se habría visto con Koldo como máximo dos veces en octubre de 2023. Lo que sí negó tajantemente es haber tenido con él relación empresarial de cualquier tipo.

Esta serie de extremos que refirió es en los que Hazte Oír ven un falso testimonio, dado que consideran que los hallazgos que incluyen en el último informe de la Unidad Central Operativa (UCO). En primero lugar, se han desvelado grabaciones de una reunión presencial entre Koldo y Cerdán que tenía por objeto el conseguir una adjudicación de dos obras.

Ya entonces Koldo está siendo investigado por las autoridades policiales en relación a los contratos de las mascarillas, con lo que el denunciante entiende que ha quedado demostrado que es “absolutamente falso” que no tuviesen ambos apenas relación entre 2021 y 2023.

Asimismo en esa grabación se acredita que Koldo le recriminó que hubiese tardado tanto en reunirse con él, a lo cual Cerdán respondió indicándole que le habían avisado de que le estaba investigando la Guardia Civil y de que le iban a imputar. La antigua mano derecha de Ábalos en Transportes confirmó, por su lado, que él sabía que la UCO le estaba investigando.

Respaldándose en un artículo periodístico, Hazte Oír defiende también es manifiestamente falsa la manifestación que hizo Cerdán de que no volvió a tener contacto con Koldo desde febrero de 2024, momento en el que públicamente se conoció que estaba siendo investigado.

El último secretario de Organización de Ferraz llamó a Koldo el 28 de agosto de 2024, de forma posterior a su declaración ante comisión, para llegar a un “pacto de no agresión” y solucionar la crisis que habría provocado la auditoría de Óscar Puente en el contexto del ministerio, auditoría perjudicial para los intereses de Ábalos. En aquel momento, el querellado se encontraba en México y Koldo en Madrid, quedando ambos en “tomar un café” cuando el primero volviese al país.

En último lugar, rebate que Cerdán y Koldo no mantuviese ninguna relación económica, cuando se relacionaban -dice citando las pesquisas de la causa- en el contexto de cobro ilícito de pagos por

adjudicaciones de obra pública a empresas, mediando un claro interés económico de ambos. Por último, aseguran que vio a Aldama, teniendo relación con él en el contexto de la trama corrupta.

El letrado de la entidad, Javier María Pérez-Roldán, reclama ya al juez al que le caiga por turno el asunto, si lo admite a trámite, que nombre como Policía Judicial a la UCO para que esta elabore un informe en el que, analizando el material incautado, analice las

reuniones que se dieron entre Koldo y Santos Cerdán entre 2021 y el 30 de abril de 2024, momento de la declaración de este último en la comisión de investigación del Senado.