El éxito de los socialistas en Cataluña no tendría réplicas en el Parlamento Europeo. PSOE y PP se preparan para un escenario muy distinto al dibujado el pasado 12M y pondrán toda la energía en la fecha del 9 de junio, conscientes de que estas elecciones se proyectan como un plebiscito entre Pedro Sánchez y Alberto Núñez

Y, a día de hoy, a cuatro días de que arranque la campaña electoral, los populares se impondrían y ganarían las elecciones con holgura al obtener entre 24 y 25 escaños según la encuesta de NC Report para La Razón. Obtendría el PP, con la candidata Dolors Montserrat a la cabeza entre 11 y 12 escaños más que en las elecciones de 2019 y estarían a seis escaños de distancia de los socialistas que se quedarían como segunda fuerza política más votada pero cediendo entre dos y tres escaños respecto a las últimas elecciones europeas. El PSOE liderado por la vicepresidenta tercera y ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera obtendría entre 18 y 19 escaños de máxima. Los socialistas ceden no solo el podium a los populares sino que también regalarían a los de Feijóo hasta 723.000 votos. Un dato preocupante para el PSOE, por la elevada cifra de trasvase de votantes y por ser el partido que más cede apoyos a otra formación política y, encima, rival ideológicamente.

La subida de los populares, unida también a la de Vox, les hace alzarse con la mayoría absoluta de los diputados que elige España de cara a las elecciones europeas. La formación de Santiago Abascal subiría dos escaños, hasta los seis. El bloque de la derecha se beneficia del hundimiento de Ciudadanos y el botín de sus ocho escaños cae, sobre todo, en la casa de Feijóo. Hasta el 79,7 por ciento de su votante hoy cogería la papeleta de los populares, esto es, más de dos millones de rédito en votantes, mientras que en Vox confiarían 24.000 electores naranjas. Cs no ha renunciado a esta plaza, a pesar de su desaparición en los parlamentos autonómicos y el 9j también se quedaría fuera de Europa.

Entre los protagonistas de los grandes bloques, el PSOE es el partido que más castigo recibiría electoralmente, pues hasta 719.000 afines se quedarían en la abstención. Además, es el partido donde más formaciones rascan electoralmente. Además del traspaso de electorado al PP, regalan 255.000 votos a Sumar y hasta 97.000 a Vox. Se le une hasta 118.000 votos a otros partidos El PP es la formación que mejor fideliza a sus afines al retener el 88,8% de su electorado. Se deja robar, eso sí, 258.000 papeletas que irían a la saca de Vox y 117.000 a otros partidos. A su vez, los de Abascal perderían en favor del PP 275.000 electores.

En la izquierda, el panorama es variopinto al tenor de la división del espacio. Sumar, con la candidata Estrella Galán a la cabeza, sería el cuarto partido más votado y se quedaría con cinco escaños, perdería uno respecto a lo que logró Unidas Podemos en las últimas europeas. Es, no obstante un buen resultado y sería el mejor de la formación de Yolanda Díaz, que ya encadena tres fracasos electorales entre semestre sin tregua. De cumplirse este pronóstico, IU y Más Madrid (cuarto y quinto puesto en la lista) rebajarían la tensión con Díaz en plena conformación del espacio de unidad. Sumar prestaría hasta 244.000 votos al PSOE, cifra casi pareja de los votos que ceden los de Sánchez a la formación magenta.

Compitiendo por el mismo espacio se presenta Podemos con Irene Montero como única esperanza para sobrevivir también a nivel nacional. Los morados lograrían el escaño de la exministra y podrían conseguir el segundo eurodiputado de mejorar sus perspectivas de voto.

Entre el resto de aliados de Pedro Sánchez en el Congreso, y tras las elecciones catalanas, Junts sería el gran perdedor al ceder dos escaños en cinco años. Un castigo significante tras las elecciones catalanas, donde las opciones independentistas fueron derrotadas finalmente0. ERC, Bildu, BNG y Més –juntos en Ahora Repúblicas–mantendrían sus tres escaños, al igual que PNV, dentro de la coalición CEUS, que aguantaría con un escaño.