Napoleón, un asco de propaganda británica cargada de mentiras
Francisco Rubiales.- Acabo de ver Napoleón, película del director británico Ridley Scott, y he salido asqueado por la falta de verdad y de rigor histórico del film, otra obra de propaganda inglesa de tan baja ética como la Leyenda Negra antiespañola y el ocultamiento de los crímenes y exterminios cometidos por los británicos a lo largo y ancho de la Historia.
Es una película deleznable que tergiversa la verdad y cuyo único objetivo parece ser ridiculizar al general francés y resaltar el papel de los británicos en su derrota, olvidando hechos y detalles que son de gran valor histórico, no incluidos en una película que las personas decentes y dignas jamás deberían ver. por sucia, desvergonzada y parcial.
El Napoleón de Ridley Scott no es un error sino un crimen, un atentado contra la verdad y la justicia histórica, además de una producción aburrida y sin un gramo de grandeza.
La película ignora la genialidad del general francés, lo ridiculiza como hombre, lo devalúa como líder e ignora acontecimientos de tanta envergadura como que la primera gran derrota del francés ocurrió en España y fue obra del Ejército y del pueblo español.
El papel del general inglés Wellington y el de Inglaterra son sobrevalorados y se aprovecha el cine para hacer propaganda y contar una historia llena de mentiras.
Hasta ahora respetaba a Scott como autor de Gladiator, Blade Runner y Alien, entre otras películas, pero a partir de Napoleón me parece un miserable tergiversador británico mas.
La crítica de todo el mundo no está teniendo piedad con la película, todo un bodrio aburrido y sin rigor histórico, utilizado por un tipo sin ética para devaluar a un gran hombre y presentarlo ante el mundo como un gañán o un matón inmaduro.
Con este artículo, además de condenar la suciedad del director y la labor mentirosa de los ingleses en la Historia del mundo, quiero advertir a los españoles que no acudan a ese bodrío cinematográfico, que además es aburrido y con demasiado metraje.
Napoleón y Francia son, como España, víctimas de la propaganda británica, un imperio de mentiras que han utilizado para ganar lo que nunca supieron ganar en la confrontación directa.
El mejor ejemplo de ese universo británico de mentiras es España, un país al que nunca pudieron derrotar con las armas y al que sí destruyeron con la propaganda y la mentira.
Hoy, para colmo de vergüenza para los españoles, los ingleses, nuestros enemigos eternos, mantienen en Gibraltar una colonia, la única existente en toda Europa, mientras que el rey de los españoles, Felipe VI, es un reconocido admirador de todo lo británico y el gobierno e Sánchez considera a Gran Bretaña un país aliado.
Hombre, de los británicos se espera de todo, masones, borrachos y adoran a la monarquía de unos que hacen bueno a Felpudo. Pero decir que son los ingleses nuestros enemigos eternos -que lo son- y olvidarse de que al mismo nivel o un pelín más están los gabachos, que son igual de asquerosos… ¿Quién daba cobijo a ETA?¿Quién destrozaba nuestros camiones en la frontera?¿Quién anda detrás del 11-M?¿Quién vino a tocarnos los huevos unas cuantas veces con sus ejércitos?¿Quién nos dejó a los Burbones?¿Quién no ha podido superar que le dimos p’al pelo a su ejército invencible? Joer, que los… Leer más »
No te olvides de mezcladores raciales nunca vi en un país aparte de estados unidos ahora lo repiten todos los países de occidente como Francia y otros que usen propaganda kalergiana estos británicos como quieren desaparecer étnicamente.
Británicos y franceses saben que una España unida y bien gobernada sigue siendo mucha España. Lo comprobaron en los años cuarenta, cuando tras la II guerra mundial nos impusieron un bloqueo económico que no les sirvió de nada porque países de la América hispana, principalmente Argentina, acudieron en nuestra ayuda.
Y si vamos para atrás, nos encontraremos con el ínclito Francisco I con sus maniobras intentando incomodar nada menos que a Carlos I de España, y después este señor, Napoleón, y luego sus nefastas ibtervenciones, junto con los otros citados, eso sí, en Hispanoamérica, que hay que verla como está..
Así que con su pan se lo coman.
Wellington era tan buen estratega como Montgomery. [risas] Bueno, el primero menos carnicero que el segundo en cuanto a daños colaterales se refiere, porque estos dos ineptos sólo causaron estupefacción y cachondeo en sus enemigos. Dos personajes anacrónicos en dos épocas distintas, pero bajo la misma bandera, la de los piratas.
Saludos y Buenas tardes.
Muy buena critica…. ya sabemos como son los británicos….unos hijos de la Gran Bretaña….
Bien, pero con dos apuntes: Napoleón era brillante, sin duda, pero pecó de hibris y provocó la derrota histórica de Francia ante las élites anglosajonas. Los ingleses, no son “nuestros enemigos eternos” (ningún pueblo es nuestro “enemigo eterno”, concepto anti cristiano, y menos otro pueblo europeo occidental); en la Edad Media los ingleses eran aliados de Castilla, y casaron varias reinas españolas con inglesas hasta el hereje y psicópata Enrique VIII. De siempre ha habido ingleses católicos afectos a España hasta el día de hoy. Y sobre todo: una cosa es el pueblo inglés, que nada tiene contra nosotros, al… Leer más »
El enemigo sionista, reputado experto en falsificar la Historia es dueño de Hollywood y de los restantes medios de manipulación. A seguir de estúpidos y credulonoicos borregos no toca y cada vez con menos y peor futuro. Béeeee!
Cuentan que la batalla de Waterloo, la ganaron los prusiano, comandados por Blucher. Eran a los que de verdad temían los franceses, no a los británicos. En cuanto a Napoleón, tuvo mala suerte, pues, unas almorranas impidieron a Napoleón, descansar bien, y así planear una buena estrategia de ataque para su ejercito.
Las historias de Horatio Hornblower, de Cecil Scott Forester ( propaganda) , inspiró la serie Star Treck ( viaje a las estrellas o la conquista de espacio), que tanto gustan al público, en general.
En Waterloo hubo de todo. Creo recordar que también la incompetencia de algún generalillo francés fue relevante. Como en Arapiles.
Los ingleses jamás de los jamases presentaban batalla si no eran muy superiores en número, y aún así provocaban auténticas carnicerías enviando a sus tropas directamente a la muerte. Arapiles y Waterloo son dos buenos ejemplos.
Saludos.