La imposición de listas desde Ferraz, en la que se aventuran afines y fieles a su líder y secretario general, Pedro Sánchez, provocó en la tarde de ayer una rebelión entre los barones socialistas, que hoy han decidido dar el plante por respuesta. El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García Page; el líder de los socialistas en Aragón, Javier Lambán, y el asturiano, Adrián Barbón, han optado por no acudir a la reunión del Comité Federal del PSOE previsto para hoy.

No se ausentará, en cambio, Ximo Puig, líder del PSOE valenciano, pese a mantener un choque público con Sánchez, que le hizo cambiar sus listas.

Desde el PSOE buscaban dar una imagen de estabilidad y unidad en un cónclave en el que ratificarán las listas para la elecciones generales del próximo 23 de julio. Unas listas en las que se sitúan muchos de los ministros del Gobierno y antiguos pesos pesados del partido. Sin embargo, lejos de irradiar esa idílica imagen de estabilidad, la tarde del viernes se convirtió en un hervidero que ha desembocado en las sonadas ausencias de hoy.

El secretario general del PSOE Aragón, Javier Lambán, junto a los secretarios generales de Zaragoza y Teruel, Juan Antonio Sánchez Quero y Mayte Pérez, respectivamente han decidido no acudir al Comité Federal en protesta por los cambios realizados en las candidaturas al Congreso y Senado de ambas provincias. Una decisión que provocó la renuncia de 15 miembros en bloque de la candidatura por Zaragoza para ambas cámaras.

También hay que señalar que la mayor parte de los miembros del Comité Federal de Zaragoza y Teruel también se van a ausentar por dicho motivo junto a sus secretarios generales. Y es que consideran que la composición final de las listas apenas tiene nada que ver con las propuestas de los comités provinciales y, por tanto, con la opinión de los militantes. “Los socialistas de Zaragoza y Teruel elaboramos democráticamente unas magníficas candidaturas al Congreso y al Senado. Lamento mucho que los ciudadanos no vayamos a tener la oportunidad de votarlas”, matizaba en redes el secretario general de los socialistas en Aragón.

En Castilla-La Mancha, la polémica se centró en Toledo, donde Ferraz colocó como cabeza de lista a la alcaldesa en funciones de la capital regional, Milagros Tolón, desplazando a la segunda posición al secretario de Organización y «número dos» de Page, Sergio Gutiérrez. «Hay mucho malestar», aseguraron al conocerlo tanto en dicha federación como en otras, pues consideraban que esos cambios eran «caprichos personales». Finalmente, la voz de García Page se impuso y mantuvo a su candidato. Una situación que ha provocado la significativa ausencia de hoy.