¿Por qué apostar por las férulas dentales?
¿Cuáles son estas?
Acostumbrados a ver a algunos deportistas utilizando férulas cuando jugaban sus partidos, no ha sido raro ver cómo se ha ido generalizando, salvando las distancias, en los tratamientos más enfocados en la protección dental y la colocación de algunos dientes.
- Protección: el bruxismo es uno de los casos más populares para el uso de férulas. El rechinar de dientes ante situaciones de nervios o incluso durante el sueño acaba desgastando el esmalte y provocando daños en las piezas. Gracias al uso continuado de férulas según establezca el profesional, se mejora.
- Corrección de la posición de los dientes: son una de las soluciones actuales más demandadas para poder mejorar la mandíbula desalineada, la sobremordida o incluso la mordida cruzada. Al ejercer presión, ayuda con las correcciones necesarias, alineando correctamente las piezas dentales.
- Solución para el descanso: el hecho de usar una férula está ayudando a parte de la sociedad a tener un mejor descanso nocturno al colocar, de forma adecuada, la mandíbula, evitando ronquidos y la tensión muscular respiratoria.
- Es una aparatología de fácil mantenimiento ya que sólo necesita ser enjuagada y guardada tras su uso, sin más.
- Son personalizadas y se van actualizando a lo largo de los tratamientos, permitiendo así una adaptación a cada momento y a la comodidad de los pacientes.
- El precio es más económico que otra aparatología.
En definitiva, tal como explican desde Hit Dental, es una solución que no solo ayuda a proteger los dientes sino que alivia el dolor, mejora la alineación leve de los dientes y permite una mejor calidad de vida.
¿De qué material están hechas?
En realidad, actualmente hay varias opciones.
El acrílico es uno de los más habituales por la facilidad a la hora de moldear y porque se puede ajustar al color de los dientes del paciente. La opción de la silicona es también bastante popular por su flexibilidad y suavidad, aunque en realidad acaba no siendo tan duradera, por lo que es más habitual necesitar actualizarla y reemplazarla. En el caso de los deportistas, es el policarbonato el material más habitual por su resistencia y duración.
En la actualidad, la opción híbrida es la que está abriéndose camino entre los laboratorios.