La ministra Pilar Llop no tiene vergüenza: asegura que cuando va en metro y autobus oye a la gente hablar del bloqueo en el Consejo General del Poder Judicial
¿A quién pretende engañar esta bolera? Debe ser la única ministra que renuncia al coche oficial para viajar en metro y en autobús. La forma en la que miente Pilar Llop bien merece figurar entre las mayores impudicias de este gobierno. Con lo que gana un ministro de Sánchez en un mes, una pensionista con cuatro hijos vive durante un año. Eso y que tenemos un gobierno de trileros y una castuza infame. Pero esta elementa dice sin ruborizarse que cuando ella viaja en metro, lo que escucha es a la gente quejarse del bloqueo en el CGPJ.
Lo que se puede escuchar en los transportes públicos es cosa bien distinta a lo que esta falsa dice haber escuchado. Por ejemplo, cómo sortear una crisis que está empobreciendo a millones de familias. O cómo hemos permitido que nos gobierne la peor chusma de la casta española. O cómo la democracia española ha traído consigo el chantaje de los separatistas, el latrocinio de los políticos, la inmoralidad de los funcionarios, el desbarajuste económico, la penuria de los trabajadores, la multiplicación de los atentados contra la propiedad y la vida ajena, la procacidad periodística, el empobrecimiento cultural, la anemia espiritual y el general desasosiego, que nos hace clamar para que esto estalle de una vez, aún cuando hayan de sacrificar temporalmente algunos intereses ciudadanos.
Cuando estamos abocados a una tragedia económica sin precedentes, la estrafalaria ministra de Justicia quiere hacernos creer que lo que le quita el sueño a la gente es el intercambio de cromos en el CGPJ para que los jueces de uno u otro bando sigan interpretando las leyes en beneficio de uno u otro partido. Definitivamente, esta ministra no es que mienta como una bellaca, es que tiene menos vergüenza que Fraudonetti.
“Escucho a la gente hablar de la falta de renovación del CGPJ”
La ministra de Justicia, Pilar Llop, ha asegurado este martes, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, que cuando va en metro o autobús escucha a la gente hablar de la falta de renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), que lleva casi cuatro años en funciones, algo que ha considerado que es síntoma de que “ya ha entendido la trascendencia” de la situación de bloqueo porque “les afecta directamente”.
“Antes decíamos que a nadie le importaba la renovación del CGPJ, que era algo que estaba como muy fuera de la órbita del día a día de cada ciudadano, pero es que ahora ya… Mire, yo a veces voy en metro, a veces voy en autobús, y escucho a la gente que habla de este tema”, ha dicho, incidiendo nuevamente en la necesidad de que el PP se avenga a pactar los nuevos vocales del Consejo.
A su juicio, estos comentarios entre la ciudadanía se deben a que “la gente ya ha entendido la trascendencia de esto” porque “les afecta directamente”. En este sentido, ha subrayado que las decisiones del Consejo “no solo afectan a la trascendencia de las leyes, sino a todos y cada uno de los ciudadanos” porque impactan también sobre sus derechos fundamentales.
Además, ha llamado la atención sobre el hecho de que la situación de interinidad del CGPJ “está costando una millonada” porque el Ministerio de Justicia tiene que estar poniendo “constantemente” refuerzos de jueces y magistrados en el Tribunal Supremo (TS) y en otro órganos jurisdiccionales “para que la Justicia pueda funcionar con normalidad”.
Entre las funciones del CGPJ se encuentra la de cubrir dichas vacantes, sin embargo, no puede realizar nombramientos discrecionales en la cúpula judicial debido a la reforma legal impulsada por el Gobierno en marzo de 2021 para prohibirlo mientras esté en funciones.
A través de una segunda reforma, igualmente impulsada por el Ejecutivo, se devolvieron los poderes al Consejo pero solo para que pudiera designar a sus dos magistrados del Tribunal Constitucional (TC) de modo que Moncloa pueda nombrar también a los suyos.
la vieja’l visillo en metro…
lo que es una vergüenza es que se permita a los partidos politicos(corporaciones privadas)designar a jueces que les salvarán el culo en sus corruptelas
Dice la verdad.
Porque nunca va en metro ni en autobus
Es tonta cuando se levanta…, y después, todo el día.
Una histérica feminista, que tiene un marido pintor bohemio, que vive de ella (es la única forma de poder aguantarla), y que está enchufando a todos sus amigos en el “monasterio” de justicia, que ella dirigee…
Ostiaputa, ¿tenemos una ministra que se llama Pilar Llop ???
Mal ,pero que muy mal de la cabeza , está, cualquier “individua”, capaz de votar a ésta “elementa”.
Esta pedorra usa transporte público, o sea coches de alta gama con conductores y guardaespaldas pagados con dinero “público”; el que nos saquean del IRPF, IVA y de la infinidad de impuestos que a la mafia extractiva le permite vivir con su alto nivel de vida.
Recuerdo que tambien hubo un niño, que en ocasiones veia muertos.