Fernando Grande-Marlaska carga 15.000 euros al Ministerio del Interior en clases de idiomas en inglés y, cómo no, francés
El Ministerio del Interior gastará 15.000 euros este año en clases de idiomas en inglés y francés para el titular de la cartera, Fernando Grande-Marlaska, y la cúpula del departamento ministerial. El objetivo es “mejorar la utilización de ambos idiomas en las reuniones y negociaciones internacionales de alto nivel que tienen lugar habitualmente en relación con las materias propias del Departamento”.
Así consta en una repuesta parlamentaria por escrito a una pregunta del PP, que pedía conocer el gasto previsto en el Departamento para estos cursos de idiomas para personal de alta dirección.
En concreto, en el escrito se especifica que Grande-Marlaska recibe clases de inglés y francés y el secretario de Estado de Seguridad, Rafael Pérez, sólo de inglés. A su vez, la directora general de Política Interior recibe clases de inglés, mientras que la directora del Gabinete del ministro lo hace con el inglés y el francés.
“Se trata de un contrato cuyo periodo de ejecución comprende del 15 de enero al 10 de diciembre de 2021, por un máximo de 394 horas en total, a repartir entre todos los alumnos”, continúa la respuesta parlamentaria. El importe del contrato es de 14.972 euros.
El Gobierno señala que por parte de la directora general de la Guardia Civil, la socialista María Gámez, se está realizando también un curso de idioma de inglés de 100 horas, por un importe de 1.130 euros y en modalidad presencial, solicitado para realizarse desde abril de 2021.
En el caso de la Policía Nacional se precisa que, “si bien no existe un curso específico para altos cargos en la Dirección General de la Policía”, en el mes de octubre del año 2020, y a iniciativa de la División de Formación y Perfeccionamiento, se organizó un curso de idioma inglés dirigido a altos mandos del cuerpo.
Dicho curso se hizo extensivo a todos los miembros de la Junta de Gobierno de la Policía Nacional, en la que también participa el director general, Francisco Pardo Piqueras. En cuanto al secretario general de Instituciones Penitenciarias, se especifica que Ángel Luis Ortiz asistió a clases presenciales de inglés durante el curso escolar 2018/19.
“El objeto de estos cursos es aumentar las habilidades de comunicación de los alumnos en el mencionado idioma para, fundamentalmente, su asistencia a reuniones de alto nivel con sus homólogos de otros países”, apuntan desde el Ejecutivo.
Antes del inicio del curso, puntualizan, se cumplimentaron los mismos trámites establecidos para el resto de las actividades formativas, “aprobación del presupuesto del curso, grabación en la Plataforma de Gestión de Actividades Formativas o asignación de baremo (0,25)”.
Con fecha 3 de noviembre de 2020 se dio inicio a la primera edición al curso, con una duración de 30 horas. Con fecha 10 de febrero de 2021 se extendió el curso al idioma francés. “Hasta el día de hoy se han celebrado cuatro ediciones de idioma inglés y dos de idioma francés”, concluye la explicación del Gobierno.
Y con la edad que tiene él y sospecho que los otros alumnos, no han tenido décadas durante las que han podido mejorar sus habilidades políglotas que han tenido que esperar a tener un cargo público para que se lo paguemos de nuestro bolsillo.
Hablando de pagar, he hecho la división del monto a pagar entre las horas lectivas y me ha salido a 38 euros por hora. Por este precio, espero que las clases las imparta Sir Lawrence Olivier.
A ver Marlaska no diga el idioma inglés o el idioma francés no vaya a ser que la inculta (con coeficiente intelectual por debajo de menos infinito) de la cosa esa llamada Irene montero le sace los ojos amparándose en la aberración esa de la Ley de Género pues parece estar dando al francés y al inglés una terminología masculina ( el francés, el inglés) asi que ojo sarasa mucho ojito no la liemos ¿eh?…. (menuda basura por Dios hay en los resortes del poder de la todavía ESPAÑA)
y el griego? o ese ya lo aprendio en chueca?
Están a choricear todo lo que pueden y más.
España tiene una misión y es escapar de la esfera anglo-franco-alemana, no es su sitio en el mundo, y espero que los dirigentes futuros de España tengan claro cuál es nuestro sitio y los lazos que debemos trazar, así como la influencia que debe ejercer España en el mundo, y no el ridículo actual.