El científico que convenció al Gobierno británico de cerrar el país renuncia al revelarse que violó el confinamiento para verse con su amante
El profesor Neil Ferguson, cuyo consejo llevó al primer ministro Boris Johnson a cerrar el Reino Unido, renunció a su cargo de asesor gubernamental en la noche de este martes después que el diario The Telegraph revelara que violó las reglas de distanciamiento social para encontrarse con su amante, una mujer casada.
Mientras daba conferencias al público sobre la necesidad de respetar de forma estricta el distanciamiento social para reducir la propagación del coronavirus, el científico se las arregló para que Antonia Staats, de 38 años, lo visitara en su casa al menos en dos ocasiones: el 30 de marzo y el 8 de abril.
La señora Staats vive con su esposo y sus hijos en otra casa, por lo que tuvo que cruzar toda la ciudad para verse con el profesor, indica el periódico. Aunque se entiende que ella mantiene con su marido un matrimonio abierto, el hecho de que se reuniera con el profesor Ferguson en su domicilio representa una violación del confinamiento, ya que las autoridades británicas habían determinado que las parejas que no viven juntas debían permanecer separadas durante el confinamiento.
“Creía que era inmune”
“Acepto que cometí un error de juicio y tomé un curso de acción equivocado. Por lo tanto, renuncié a participar en el Grupo Científico Asesor para Emergencias (SAGE, por sus siglas en inglés)”, declaró el profesor Ferguson a The Telegraph.
“Actué en la creencia de que era ya inmune, había dado positivo por coronavirus y me aislé por completo durante casi dos semanas después de desarrollar síntomas”, reveló.
“Lamento profundamente cualquier menoscabo a los claros mensajes en torno a la necesidad continua de distanciamiento social para controlar esta devastadora epidemia. La orientación del Gobierno es inequívoca y está ahí para protegernos a todos”, aseveró.
La señora Staats no quiso hacer comentarios.
“Ha violado sus propias directrices”
Jefe del programa de modelos matemáticos del Imperial College de Londres, las pesimistas predicciones del profesor Ferguson sobre el desarrollo de la pandemia de coronavirus provocaron un giro radical en la política del Gobierno británico y el cierre del país hace siete semanas.
El Imperial College de Londres presentó un estudio, diseñado a través de un modelo matemático, que mostró que si el Gobierno no adoptaba una política que apuntara a la supresión del covid-19, y no a su simple mitigación, el máximo de contagios se produciría en tres meses, afectaría a cerca del 80 % de la población y dejaría unas 510.000 personas muertas solo en el Reino Unido.
Desde el inicio del confinamiento, el profesor Ferguson apareció con frecuencia en los medios de comunicación para apoyarlo y elogiar las medidas de “distanciamiento social muy intensivo”.
Ahora un político británico del Partido Conservador, Iain Duncan Smith, replica: “Científicos como él nos han dicho lo que no deberíamos estar haciendo, así que seguramente en su caso es porque hemos estado haciendo lo que él dice y él ha estado haciendo lo que quiere”.
“En particular, ha violado sus propias directrices […] corre el riesgo de socavar el mensaje de cierre del Gobierno”, advirtió.
Este 5 de mayo, las autoridades sanitarias del Reino Unido informaron que el total de muertes por covid-19 en el país llegó a 32.313, el número de decesos más alto en Europa.
El mismo payaso alarmista que bajó sus previsiones delirantes de más de 500.000 a unas 20.000 víctimas mortales al día siguiente de verse encerrado en su casa y declarado positivo, según la reconocida publicación New Scientist. Lo cual es muy probable si tenemos en cuenta que las cifras de muertos están siendo groseramente exageradas al declarar como positivos a esa inmensa mayoría de personas que ya padecían dos o más enfermedades graves al margen de tener una edad avanzada. Y, por cierto, ¿qué pasa con las cifras de fallecidos por gripe este año? ¿No los estarán contando como Covid-19 también… Leer más »
Y gracias a este merluzo, que ha influído sobre los gobiernos europeos (casi todos), estamos presos en nuestras casas y, lo que te rondaré morena. Fue este pavo el que dijo, en un informe publicado por el Imperial College que, en España había, como mínimo 7.000.000 de infectados y que podría haber una hecatombe si no se encerraba a la gente en sus casas. Ahora vemos que ni él mismo se lo cree. ¡Qué listos han sido los suecos que no le han hecho ningún caso!