Trapero, hora cero
Curri Valenzuela.- Ha sido causalidad que la magistrada de la Audiencia Nacional Carmen Lamela citara a declarar mañana al mayor Trapero para que responda a la acusación de sedición que podría llevarle a la cárcel precisamente el día en que se acaba el plazo para que Puigdemont tenga que confesar al Gobierno si declaró la independencia antes de suspenderla. Una coincidencia que da alas a los independentistas para relacionar una cosa con la otra y sacar la conclusión de que la suerte del jefe operativo de su policía corre paralela a la respuesta del Gobierno al desafío del presidente de la Generalitat.
La verdad es que la opinion más común entre los separatistas catalanes es la de que Trapero tiene bastantes posibilidades de dormir este lunes en Alcalá Meco por tres razones: una, porque está acusado de un delito de sedición castigado con hasta 15 años de prisión; dos, porque los informes presentados a la juez por la Guardia Civil le inculpan de forma contundente; tres, porque la Justicia es lenta hasta la desesperación en este país, pero cuando se pone en marcha resulta arrolladora. Y la suma de estos tres factores arroja el resultado de que ha llegado la hora cero definitiva para el Mayor de los Mossos. Pero quizás se equivoquen.
Muchos españoles se sintieron defraudados al creer que Trapero se marchaba de rositas tras declarar por primera vez ante la Audiencia Nacional el pasado 4 de octubre, tres días después de que la policía autonómica a sus órdenes se rajara a la hora de impedir la celebración del referéndum y dejara la incómoda tarea en manos de Guardia Civil y Policía Nacional. Pocos sabían que su comparecencia se debía únicamente a lo ocurrido la noche del 20 de septiembre, cuando los Mossos no impidieron que esos agentes fueran cercados por una multitud tras efectuar varias detenciones y un registro en la consejería de Economía y menos aún eran los que desconocían que la magistrada no consideró oportuno ordenar el ingreso en prision por falta de informes contundentes que relacionaran a Trapero con aquel acontecimiento.
Mañana sabremos si se sienten de nuevo decepcionados. Lo único cierto un día antes es que el personaje más vilipendiado de la crisis de Cataluña vuelve a la Audiencia para responder por su actuación el día del referéndum y esta nueva documentación aportada por la Guardia Civil puede ser contundente gracias a los testimonios de testigos que parecen demostrar que el jefe de los Mossos ordenó la pasividad de sus agentes y blindó a los altos cargos del Govern para permitirles celebrar el referéndum ilegal.
Nada. La cobarde “justicia” española sólo actúa contra el indefenso contribuyente y los chorizos de poca monta.
Nuevamente esta mierdocracia y su constitución nos vuelven a defraudar y no se pide prisión para este sujeto que por increíble que parezca sigue en libertad y ejerciendo un cargo de tanta autoridad y poder como lo es el ser jefe de los mozos.
Hay que repetirse. ¡¡Qué falta nos hace un Caudillo!!
Este es el jefe del EJÉRCITO SEPARATISTA CATALÁN, LOS MOZOS.
Si hoy no va a prisión, tal vez tendríamos que ir pensando en marcharnos de España, Y PARA NO VOLVER.