Tasa de la OMS sobre las bebidas azucaradas: ¿será eficaz contra la obesidad?
José Vicente Ferrer y Paula Avellaneda *.- Los profesionales de la Clínica Obésitas, nos hacemos eco de la reciente noticia de la OMS (Organización Mundial de la Salud), que propone gravar con impuesto de al menos un 20% todas las bebidas azucaradas.
La implantación del impuesto, es una estrategia de salud pública para lograr que la población reduzca la ingesta de bebidas azucaradas. Un alto consumo de refrescos está asociado a una elevada prevalencia de caries dental, obesidad, diabetes mellitus tipo 2 y síndrome metabólico, entre otras enfermedades metabólicas.
Esta medida es necesaria, considerando que existe una prevalencia mundial de 422 millones de personas con diabetes, y teniendo en cuenta que el 74% de la población europea tiene sobrepeso, y el 26% padece obesidad.
Según un estudio publicado en la revista ‘British Medical Journal’, se estima que un impuesto del 20% sobre las bebidas azucaradas, podría contribuir a reducir en un 1,3% las cifras de obesidad y en un 0,9% las de sobrepeso.
Con esta medida, además se crea conciencia social del impacto negativo que tienen los refrescos azucarados en nuestra salud. Una lata de estas bebidas contiene el equivalente a 4 “sobrecillos de azúcar”. Esto supone un aporte de 128 Kcal en una única lata de refresco, lo que supone una cantidad importante. Además, estas Kcal no aportan ningún valor positivo para la salud.
En el informe de la OMS, se hace hincapié en que esta medida ya se ha mostrado eficaz en otros países en las que se ha implementado previamente, como por ejemplo en México. En este país, el resultado de la tasación fue que las compras de las bebidas sobre las que recayó el impuesto bajaron un 12% en solo un año. Este descenso de consumo tuvo lugar en los tres grupos socioeconómicos que se tuvieron en cuenta, pero fue más relevante en los hogares con menor capacidad adquisitiva, llegando a un descenso del 17%.
Otros países en los que también han implantado este impuesto, son: Francia, los países escandinavos, Bélgica y Hungría. El Reino Unido, por su parte, ya ha aprobado la tasación de los refrescos, que se empezará a cumplir a partir de Abril del 2018.
Pero hay que ir más allá. Son varios los profesionales que piensan que la tasación de las bebidas azucaradas no será suficiente para acabar con la epidemia de la obesidad y la creciente prevalencia de diabetes mellitus tipo 2. Además de esta estrategia, podría ser efectiva una combinación de otras medidas, como por ejemplo: la implantación de una educación sanitaria y alimentaria en las escuelas, el control de la publicidad de alimentos ultraprocesados (sobre todo la dirigida al público infantil), proponer un menor coste de los alimentos saludables (como frutas y verduras)…
Esperemos que esta medida se lleve a cabo pronto en España, para conseguir la reducción de las crecientes tasas de obesidad y Diabetes Mellitus tipo 2.
*José Vicente Ferrer es cirujano bariátrico y director de Clínica Obésitas. Paula Avellaneda es dietiosta nutricionista de la Clínica Obésitas.
Perdón, donde dice “no sólo ha reducido” debería decir “no sólo NO ha reducido”.
¿Y la evidencia que la semiprohibición del azucar en los EEUU no sólo ha reducido la obesidad de la población sino que la ha disparado en los últimos años, se tomará como precedente o la ignorarán?
o sea una cola a 1 euro costará 125 y una de marca blanca pues las hay a 0,54 euros no llegara ni al euro…en fin, es educación lo que hace falta y menos ipad, tablet, twiter y chorradas de esas y más deporte.
no,solamente mas dinero para las companias y para el gobierno en forma de impuestos