Thilo Sarrazin
Thilo Sarrazin es algo así como la Oriana Fallaci alemán. De su polémico libro “Alemania está despareciendo” se han vendido 2.000.000 de ejemplares. Ahora está disponible en la librerías franceses traducido al idioma de Molière.
El 23 de enero pasado, Thilo Sarrazin fue invitado a Hanóver para exponer sus controvertidas tesis sobre la inmigración ante un ex ministro de la Integración de origen turco. El escritor y ex miembro de la Junta Directiva del Deutsche Bundesbank fue recibido en esa ocasión por los abucheos de un grupo de manifestantes a los gritos de “¡El racismo es un crimen!” y “¡Cierra el pico, viejo imbécil!”
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De paso le lanzaron varias bolsas llenas de excrementos.
Dos años después de la estrepitosa publicación de su libro, Sarrazin ha abandonado la escena pública alemana. Pero este analista de la realidad alemana, también autor de una obra sobre la salida de la zona euro, sigue defendiendo valientemente sus ideas. En “Alemania está desapareciendo”, este ex miembro del directorio del Bundesbank, todavía afiliado al Partido Socialdemócrata, critica sobre todo el “paternalismo anestesiante” del Estado de bienestar.
Pero la carga explosiva de su libro se encuentra en el capítulo sobre la inmigración. Según él los inmigrantes musulmanes son maleducados, incívicos y tienen una inteligencia mediocre, y además se reproducen mucho y rápido. Su cantidad, su cultura y su estupidez amenazan con submergir y cretinizar Alemania.
Thilo Sarrazin es el blanco de los reproches de la sociedad bienpensante y de los medios de comunicación que les sirven de portavoz. Se le acusa de haber favorecido el desarrollo de un racismo cultural presentable en los platós de televisión. Con el respaldo de datos reales y argumentos sólidos, Thilo ha desmontado esa visión injustificadamente positiva de la inmigración propagada por los enemigos de todo control y restricción en esta materia.
Algunos críticos de Thilo Sarrazin no se privan de comparar sus tesis con la del noruego Anders Breivik, autor de la masacre de Utoya, y con el discurso de la “extrema derecha” contra la islamización de Europa, un fenómeno calificado de delirio racista por aquellos que se empañan en negar la realidad que los sentidos perciben.
Pero lo diga Thilo Sarrazin, Agamenón o su porquero, lo cierto es que el islam no es compatible con Europa. Y esto no lo cambian ni las acusaciones, ni los insultos, ni los lanzamientos de excrementos.
*Presidente del Partit Espanyol de Catalunya (PEC)
Las afirmaciones de Thilo Sarrazin(que viene de sarraceno curiosamente) son extensibles a la mayoría de la inmigración porque¿qué educación , inteligencia y positivismo traen consigo rumanos, muchos sudamericanos o negros subsaharianos?Incluso muchos chinos que pululean por España son bastante gritones, cutres y mal educados.
Bellalta demuestra una claro sentido de hombre de estado,
Mira hoy la noticia de imán de salt
Thilo Sarrazin Valiente hombre!!! algún día le darán la razón como a Gerard Bellalta