¿Quién es Tintín? ¡Yo soy Tintín!
Sama Multimidia.- Hergé, nacido Georges Prosper Remi en 03 de junio de 1907 en la ciudad de Bruselas, comenzó a dibujar y escribir historias desde la infancia, principalmente al entrar a la Federación de los Boy-scout Católicos da Bélgica, cuando entonces tuvo la oportunidad de emprender varios viajes, recopilando informaciones que más tarde utilizaría en sus aventuras en los cómics.
A los veinte años, encuentra el abad católico Norbert Wallez, que era, según él, “fuera de serie, pues no dirigía ninguna parroquia ni ninguna congregación de muchachas piadosas que entonaban canciones, sino un periódico, Le Vingtième Siècle (El siglo veinte), el segundo periódico más importante creado en Bélgica”.
El joven Georges Remi fue a la casa del abad para pedirle empleo. ¡Pero lo único que sabía hacer era dibujar! Admitido, pues, para esa función, inicio carrera como ilustrador de textos, la cual, meses después, cubría diversas otras tareas, inclusive la de fotógrafo, convirtiéndose en el hombre de confianza de su director, que administraba el periódico con manos de fierro. Este, cuando pensó en aumentar el número de lectores mediante la adición de un suplemento juvenil, fue a Remi que le otorgo la responsabilidad de dirigirlo. Y así, fruto del esfuerzo casi individual de aquel joven de 21 años, aparece en 1928 Le Petit Vingtième (El Pequeño Vigésimo), un hebdomadario que era publicado todos los jueves. Semanas después del lanzamiento, el diseñador inició una actividad nueva: la de escribir las historias, y desde entonces, mostró claramente que naciera para realizar una expresión artística peculiar, admirablemente creativa y de cuño educativo.
En seguida, conoció a Lèon Degrelle, un reportero que comenzó a trabajar en el mismo periódico. Ambos tenían casi la misma edad. El primero había nacido en Bruselas el 3 de junio de 1907; y el segundo, en Bouillon el 15 de junio de 1906. Eran, por lo tanto, ambos del signo de Géminis y tenían aproximadamente veinte años cada uno.
Siempre viajando bastante y habiendo observado el suceso, en Méjico, de los comics o bandes dessines (historietas) por autores americanos, Degrelle sugiere al artista que nacía innovar o Petit Vingtième con una nueva forma de presentación. Remi acepta la idea y adopta el seudónimo de Hergé, que viene de la inversión de las iniciales de su (erre-gê), y crea a Tintín viajando a bordo del Rio Panuco camino a Méjico, acompañado de un perro, el ilustre Milou (Milú en español).
Tintín, para alegría del padre Wallez, ya comenzó su carrera haciendo milagros, como el de conseguir, en pocas semanas, sextuplicar las circulación del suplemento y bancar, él solo, todas las expensas del Vingtième Siècle, inicio de un éxito que aumentaría cada vez mas.
Las historietas (H) en el mundo, por lo tanto, tuvieron en Hergé un precursor indiscutible. Con su notable y creativa obra, que representa un marco en el desarrollo de ese género literario, él influenció a la creación de muchos personajes de H que posteriormente surgieran, como Asterix, Lucky Luke, Blake, Mortimer entre otros.
Publicados en casi cincuenta idiomas circulan por el mundo actualmente ciento y ochenta millones de álbumes de historias protagonizadas por el valiente reportero Tintín. De Nueva York a Tokio, Miles de lectores y espectadores disfrutan del rico contenido, tanto a través de la lectura como de las producciones animadas inspiradas en los mismos.
El efecto de penetración de las producciones de Hergé en el inconsciente colectivo de las personas ha sido blanco de estudios hasta hoy, veinte años después del fallecimiento del autor. Más de una decena de libros fue escrita enfocando el contenido moral y cultural de su trabajo, el proceso de elaboración artística, la relación de la vida del autor con sus personajes, los temas de las historias entre otros aspectos.
La obra de Hergé representa un verdadero oasis en medio de un gran y desolador desierto, de producciones internacionales de calidad y buen contenido, destinadas a niños y jóvenes. Lo que más podemos constatar en el mundo entero de las revistas, libros, programas televisivos y cine destinados a ese público es un estimulo descarado a toda especie de desvíos, violencia, desobediencia y deseducación; y, por eso mismo, las aventuras de Tintín son comprobadamente distintas en todos los sentidos: su protagonista es caballeresco, educado, de carácter noble, humilde y solamente da buenos ejemplos.
Iniciadas hace ya más de 75 años, las Aventuras de Tintín consiguieron mantenerse a lo largo de varias décadas, y hasta hoy, absolutamente actuales, interesantes y encantadoras, comprobando en todos los aspectos la calidad y la atemporalidad de la obra, así como la genialidad del artista.
NACE UN VERDADERO HÉROE
El éxito de las aventuras del valiente periodista es innegable y se debe a varios motivos. En primer lugar, a la peculiaridad de su protagonista: Tintín es un héroe que no depende de aparatos externos o súper poderes para vencer sus desafíos. No es ningún superman, no se transforma en araña o en murciélago, no vuela con capas mágicas, no es dotado de dones extraterrestres, no posee armas de potencia laser ni megabytes en el cerebro.
En fin, no es un ser dotado de ningún recurso súper-normal o de brujería. Es un hombre normal, desarmado (excepto en casos excepcionales y para intimidar, nunca para matar) y siempre acompañado por un perrito que, a su vez, se asemeja al dueño en todo a lo que dice sobre su índole, y que, además, se revela en diversas situaciones bien mas valioso que determinadas personas, siendo absolutamente fiel y, por eso mismo, estando a la altura de la reputación de su clase. El perro y su dueño, en todas las historias están siempre sintonizados, y la misma solidaridad que Tintín manifiesta a los hombres le es demostrada por Milú.
De esta manera, el heroísmo de Tintín proviene exclusivamente de su propio carácter, cuyos trazos son destacables y bien definidos, como, por ejemplo, el coraje que nunca se expresa por vanidad o exhibicionismo, sino siempre por necesidad y en pro de un objetivo justo y noble — y el altruismo, constatado en inúmeras situaciones en que él voluntariamente ofrece su auxilio a las personas arriesgando su propia vida. Es un héroe absolutamente humano, accesible a las aspiraciones infantiles y juveniles, y, por eso mismo, más próximo a la realidad de lo cotidiano de los jóvenes lectores, que los súper-hombres fantasiosos dotados de súper – poderes, cuyas ilusorias hazañas no van más allá que el papel de las páginas de revistas o las pantallas de televisión o de cine. Se puede afirmar que el éxito de Tintín resulta por el hecho de ser un joven inteligente, prudente y paciente, cuyo comportamiento se aproxima al estilo de persona que actúa de acuerdo con la voz de la consciencia. Y en este sentido se puede constatar la influencia de abad Wellez en la formación de Hergé.
Otro aspecto importante sobre el carácter del personaje es la independencia. Tintín, a pesar de asumir compromisos que envuelven situaciones políticas y económicas importantes, no depende de secretarios, asistentes ni guardaespaldas para defenderlo en sus peligrosas misiones. Es él mismo que toma todas las medidas y decisiones, investiga situaciones sospechosas, interroga a las personas, examina documentos, descubre villanos y crímenes. En fin, se muestra capaz de realizar, solo, verdaderas limpiezas como la que está registrada, por ejemplo, en el álbum Las Aventuras de Tintín en América, cogiendo a todos los bandidos de Chicago y declarando que encontró en los gangsters enemigos, feroces e implacables. Y, a pesar de tener un temperamento tranquilo, actúa siempre de forma ágil, siendo sus iniciativas siempre providenciales, audaces y valientes, dando, por fin, un digno ejemplo de autonomía, eficiencia y solidaridad.
Ciertamente, lo que también proporciona éxito a la obra es el ritmo dinámico de la narrativa, plena de acción, movimiento y suspenso, y aún, es entrecortada por las peripecias de una galería de personajes hilarantes y caricaturescos que encantan al lector, como el Capitán Haddock, ex-marinero borracho que fue libertado por Tintín de las garras de un enemigo; los gemelos Dupont y Dupond, detectives torpes creados como sátira a la policía británica; Bianca Castafiore, la simpática y terrible cantante de ópera; y aún, el profesor Girasol, el científico inteligente, casi sordo y que lleva a Tintín a la luna; Tchang, el amable chinito; el inoportuno Serafín Linterna, el vendedor entusiasta de pólizas de seguros; el diabólico Rastapopoulos, principal enemigo de Tintín y su brazo derecho el igualmente amenazador Allan Thompson, entre otros.
Todo ese universo de personajes da a la creación de Hergé un carácter híbrido, que representa tal vez su principal triunfo: al mismo tiempo en que sus personajes son, en gran parte, caricaturescos, todo el enredo de las historias son extremamente realista, principalmente a partir de Le Lotus Bleu (El Lótus Azul), una vez que el autor presenta con exactitud paisajes, piezas de vestuario, interiores de ambientes, aviones, automóviles, y, principalmente, expresiones gestuales y faciales, inseridos en una trama donde los elementos humorísticos se mesclan con temáticas sociales, políticas y científicas, envolviendo asuntos como la guerra, la esclavitud, el tráfico, espionajes y otros.
Los álbumes de Tintín son antológicos y son un verdadero tesoro infantil y juvenil de elementos históricos y geográficos, una vez que traen informaciones importantes sobre las más diversas culturas del planeta de una manera placentera Y el personaje principal, a su vez, no es un mero protagonista de H, sino un ser que está inserido en la historia y en contextos humanos. No es un instrumento de merchandising o recurso consumista, sino fruto de una producción cuidadosa, trabajada y que prima por alto nivel de calidad, hecho que se puede constatar por el propio tiempo de elaboración de las historias: los álbumes de Hergé, para ser publicados, demoraban aproximadamente un año, o sea, ¡bien mas que las películas realizadas por los estudios de Hollywood! Tintín es, en verdad, un personaje de romance transpuesto para el lenguaje de las historietas, y es eso mismo lo que cautiva a niños, adolescentes y adultos.
Hace parte de los héroes del pasado inimitables en nuestro presente, en el cual, lamentablemente, el caballerismo fue substituido por la grosería; y la fuerza inteligente y sensata, por la violencia de todo tipo.
Tintín es también anti-anarquista y anti-materialista por naturaleza, lo que contrasta visiblemente con la doctrina globalita contemporánea que exalta todas las características súper-humanas y andróginas que diariamente se multiplican por los medios del sistema con el objetivo de llevar a la gente no solamente a sujetarse sino también a adherirse a la total inversión de valores de la pos-guerra como si se tratase de una verdadera religión.
NACE UNA POLEMICA
¿En quién Hergé se inspiro para crear a Tintín? ¿Cuáles son los mensajes subliminares existentes en las historias? ¿Hergé es fascista? ¿Su moralismo es de esencia cristiana o no pasa de mera sensiblería? ¿Cuáles son las intenciones del escritor por detrás de las historias de Petit Vingtième? ¿Estaba él al servicio del nazismo?
Tales cuestionamientos e innumerables interpretaciones han sido realizadas por los más diversos puntos de vista: político, sociológico, literario, psicológico, religioso e histórico. Debates fueron promovidos con el objetivo de definir si el héroe-humano es de izquierda o de derecha. Están los que afirman que no es nada de eso: ¡Tintín pertenece a todos! ¡Y aún no faltaran voces que inmediatamente se levantaran para concordar con tal opinión y decir que, de hecho, Tintín/Hergé no podría ser de ningún de los lados porque son fascistas! Ocurre que un buen fascista no comprende esa división nociva y artificial de “derecha” o “izquierda”, una vez que el termino fascismo proviene de feixe, indicando conjunto, unión.
Están los más escépticos, hijos de la programación de los medios de comunicación, que afirman: “¡Ese Tintín es un aburrido: no bebe, no fuma, no va a citas, no nada! Es un reaccionario: además de anticomunista primario, es frecuentemente racista y un moralista atroz. ¡Y además de eso es un fraude, pues se intitula periodista y nunca escribió una línea!”
Ya el biógrafo de Hergé, Pierre Assouline, afirma: “Hergé tiene el derecho de ser exacto o inexacto al sabor de su fantasía y de su inspiración. Un creador tiene todos los derechos, y aún más si es artista. Él no conoce otros limites sino los establecidos por su imaginación y por su conciencia”.
Hergé siempre fue discreto y hasta un poco apático a entrevistas y eso acentuó el aura de misterios y secretos relacionados a su trabajo y a su vida. Sin duda, era un hombre que reflexionaba sobre cuestiones existenciales y, evidentemente, expresaba en su obra, al igual que muchos artistas, sus anhelos, aspiraciones, cuestionamientos, tendencias políticas e idealismos. Su trabajo es, prácticamente, una jornada autobiográfica a evidenciar que sus cuestiones personales, sumadas a la coyuntura política de Europa en el siglo XX con sus guerras y drásticos cambios, influenciaron las historias de Tintín.
En resumen, Hergé hizo de Tintín un instrumento capaz de darle alas y ser libre. Eso es notable y no solo del punto de vista existencial, espiritual, incluso hasta físicamente, una vez que Hergé raramente salía da Bélgica y Tintín recorrió por toda la Tierra incluso fue hasta la Luna, quince años antes del fraude de Armstrong y Aldrin! (Véase Fraudes de la Historia – http://WWW.EUA.MENT1RA.COM – A Viagem à Lua e a face oculta da democracia, pág. 74).
En este clima, en un continente en guerra y en gran parte ocupado militarmente por la Alemania nazi que se publica en el Periódico Le Soir, el contenido del álbum La Estrella Misteriosa, una obra que retrata magistralmente el clima apocalíptico en el que Europa estaba sumida. Y rápidamente se percibe que Hergé eligió a un judío – Blumenstein – para representar el elemento mal de la historia, interpretando el papel de patrocinador de la expedición polar compitiendo con la de Tintín. ¡Y además, nuestro héroe corre en contra de los estadounidenses y gana! Eso le valió acusaciones de antisemitismo y simpatías por los nazis. Posteriormente, el autor trata de justificarse diciendo que “era una moda”, pero la verdad es que tal explicación no impidió que sus detractores lo acusaran de antisemita.
¡Realmente es un hecho innegable que Hergé hizo elecciones profesionales que dan lugar a discusiones, había amigos considerados “enemigos”, admiró y criticó lo que muchos consideran imposible de criticar. Como resultado, al final de la Segunda Guerra Mundial, sufrió persecución, fue censurado, encarcelado y se le prohibió realizar su trabajo, lo que demuestra que sus actividades molestaron y mucho!
Entre las numerosas dificultades encontradas, cabe destacar la controversia que involucra el origen del perro Milú, la cual se presenta en el libro de Degrelle, Tintim Mon Copain:
Decidida la nueva presentación de las aventuras de Tintín por sugerencia de Degrelle, estaban los dos amigos un día mirando unas fotos de la Primera Guerra Mundial, cuando se encontraron con una que mostraba a un grupo de soldados con un perro al lado. Hergé, que buscaba para sus historias un perro pequeño y blanco, estaba encantado con esta imagen inesperada y decidió que este tipo de perro representaría a su personaje Milú, compañero de Tintín. Sucede que una de las personas en la imagen era nada menos que Adolf Hitler a los dieciocho años, irreconocible bajo un bigote largo y ancho. Sin embargo, aunque esta opción fue absolutamente accidental y sin querer, Degrelle relata que durante 60 años tuvo que guardar silencio al respecto, ya que, confinado en su exilio, él estaba interesado en ser discreto y no quería complicarle la vida a nadie. Según sus propias palabras, habían, después de 1944, envenenado tanto la vida de Hergé que él no podría agravar aún más la situación. Consultado sobre el tema, el autor de Tintín, en ese momento, respondió: “¿Milú? Ni recuerdo más de dónde es que él salió. “Para Degrelle fue más sabio por parte de su amigo actuar así.
La Segunda Guerra cambió el destino de todos los pueblos del mundo. Hergé, para las cuestiones que los cómics no son tenidos en cuenta, pero permiten concluir, optó por acercarse a los invasores. De hecho, algunas fotos del intrépido reportero presentan varias referencias sutiles a veces – a veces explícitas – que acaban por apoyar esta tesis. El autor sufrió la ira de los “ganadores”, ni Tintín se salvó, al no tener mejor suerte, al ser víctima de una feroz reprimenda de los que ahora dicen que “pertenece a todos”, y principalmente a ellos mismos.
Los casos de censura sufrida por las aventuras de Tintín son numerosos: la conversión de un enemigo negro, por arte de magia, en blanco (por tachar a Hergé de racista), suprimiendo las referencias al terrorismo judío en Palestina, los cambios de viñetas, frases y otros. ¡No es difícil, a la vista de otros casos de “perdedores” de la historia, imaginar los medios que han empleado los ganadores para inducir u obligar a Hergé, incluso a cambiar sus obras originales!
Por lo tanto, después de la derrota de Hitler, todos los que de alguna manera tenían afinidad con el nazi fascismo italiano, francés o belga, fueron procesados. Degrelle cuenta en Tintín Mon Copain que el 21 de mayo de 1940, hubo una orden de fusilamientos que participaron 21 personas, entre los cuales estaba, por eso fue considerado también exterminado. La noticia de su muerte se ha publicado en numerosos periódicos. Días más tarde, para el deleite de unos y disgusto de muchos, fue negado oficialmente. En cuanto a Hergé, este se liberta de la prisión en 1944 por un extraño capricho de un juez, quien le preguntó:
-¿Eres tú el autor de Tintín?
– Sí – respondió.
– ¿Durante la guerra hizo nada más que dibujos?
– Sí – respondió Hergé.
– ¡Entonces no voy a condenar a quien tanto divirtió a mis hijos!
Hergé, por lo tanto, fue indultado, probablemente no antes de haber pasado por un proceso de fuerte presión para aceptar las adaptaciones de sus aventuras, como ya se ha mencionado, y otros compromisos. Por otra parte, en realidad el “bondadoso juez ” también estaba en una situación delicada, ya que sería imposible a los represores lograr exterminar tanto al gran artista como su obra ya mundialmente consagrada. ¡Y, además, sabían perfectamente que el trabajo que se perseguía era altamente rentable!
Sin embargo, Hergé, vislumbrando el futuro y la prevención de sí mismos en contra de sus enemigos, tomó una sabia decisión: dejo registrada su voluntad de que no se crearan nuevas historias envolviendo a Tintín y sus personajes, y por respeto a eso ninguna nueva aventura de su “hijo “fue publicada después de su muerte en 1983, a pesar de varias recopilaciones de sus trabajos se han publicado desde entonces. Los niños de todo el mundo – y de todas las edades – agradecen ese gesto de humanidad del diseñador, ya que si no fuera por él, probablemente estaríamos sujetos a depararnos hoy con un Tintín opuesto al original, con desviaciones sexuales y de carácter, consumidor de porro, mentiroso, asesino, venal en la profesión, egoísta, egocéntrico y extravagante, todo, en fin, de forma similar a los “héroes” del sistema de medios de comunicación! En otras palabras, ellos han hecho lo que hicieron con Disney, que actualmente no tiene absolutamente nada que ver con la obra creada por Walt Disney (Ver Humanus IV, Walt Disney, un hombre traicionado, pag. 58). Y, afortunadamente, el mundo todavía puede disfrutar de su trabajo, el cual, a pesar de los cambios de menor importancia, sigue siendo puro e inmaculado.
El pensamiento político e ideológico de Hergé no era algo que él trató de ocultar, puesto que ya se había incluido en las aventuras de Tintín en 1929, esto es, trece años antes del comienzo de la Segunda Guerra Mundial. Y, en el transcurso de la misma, continúo imprimiendo en su trabajo su visión del mundo. Podemos observar, por ejemplo, su postura hostil hacia el comunismo y el liberalismo, que es ya bastante explícito en la primera de todas las sagas del buen reportero, Tintín en el país de los Soviets, en el que los enemigos de Tintín son empresarios liberales y tiranos marxistas. También son notables sus simpatías y afinidades con los medios de comunicación con los que colaboraba, como por ejemplo el Le Soir, un periódico dirigido por los nazis alemanes. Podemos ver claramente la forma de ver la vida atreves de los personajes que creó y el contexto de sus historias, e incluso en los amigos que cultivó como, por ejemplo, Léon Degrelle. Este, en los años 30 comenzó una prometedora carrera política, primero como periodista y luego como editor y finalmente como fundador del Movimiento Rexista belga en 1934. Y por la acción política de Degrelle, ¡esta amistad ha dado qué decir!
NACE UN MODELO INSPIRADOR
En realidad, sólo basta tener un par de ojos para constatar la sorprendente similitud entre Tintín y Léon Degrelle. El personaje se parece a Degrelle en varios aspectos: en relación con la profesión, el mechón inconfundible, las botas usadas en su primer cuento y el uso de su estilo preferido de los pantalones: de golf. Y sus aventuras tendrían como tema viajes por el mundo con serios desafíos a vencer, como de hecho ocurrió con Degrelle.
Para disipar las dudas sobre la amistad entre el artista y el general, este relata en su polémico y prohibido libro algunos pasajes sobre esa relación que duró más de cincuenta años. Cuenta que él mismo vivía, luchaba y arriesgaba su piel para conquistar los corazones y las mentes de su pueblo para construir una comunidad paralela ordenada, para contribuir con la unión de Europa mediante la lucha contra el comunismo y la creación de un hombre nuevo, un mundo nuevo, en fin decía que ese era el objetivo, la meta de su vida. Y afirma que “había auxiliado a Hergé a hacer de Tintín un personaje que, con el tiempo, que llevaría a través del planeta los pantalones de golf tomados desde su vestuario y del mechón colorido de su caja craniana, lo que no sería sino un incidente maravilloso en su existencia, una flor cosechada en las pampas de una vida tumultuosa. ”
También nos cuenta que en 1931, Degrelle, publica un libro titulado Histoire de la Guerre Scolaire (Historia de la Escuela de Guerra), que fue ilustrado por Hergé. Este dibujo “con un arte tan puro como preciso” cinco imágenes que enriquecieron la descripción de los hechos por parte del autor del libro.
El 21 de junio de 1932, el tímido Hergé se casa a los 25 años, con una compañera de trabajo de ambos Kieckens Germaine, secretaria del abad Wallez con la que nunca tuvo hijos. La pareja, junto con Degrelle y otro empleado del periódico, el caricaturista Paul Jamin, formarían un equipo cohesionado en las ideas y las afinidades que duraría años. Por lo tanto, el valor de Degrelle en enfrentar situaciones difíciles en su vida ha sido siempre bien acompañado por el apoyo de los tres amigos y la expresión de su pensamiento en sus obras fue ilustrado por el trabajo del célebre diseñador.
Por estas y otras, no es para nosotros difícil imaginar que Hergé tuviera, de hecho se inspirado en su compañero de muchas aventuras para diseñar su famoso Tintín.
Se sabe que, como aquellos que lo conocieron afirman (y él llegó a decir en más de una ocasión), que sus personajes se inspiraron tanto en relación al carácter como en el aspecto físico, a figuras reales conocidos por el autor. Girasol se basa en su gran amigo y colaborador, Auguste Picard, y el capitán Haddock es también copia fiel de su colaborador Edgar Pierre Jacobs, por quien cultivaba una gran amistad. Incluso los personajes secundarios, de aparición ocasional en Las Aventuras de Tintín son retratos de personas existentes en la vida real: el joven chino Tchang es el diseñador, escultor y poeta Tchong Tchang-Jen, después de estudiar en Bélgica; y el pequeño Abdulah, es una réplica casi exacta de Faisal II de Irak …
¡Y nos preguntamos: ¿Por qué no hubiera Hergé se inspirado en algún amigo o conocido para crear Tintín? ¿Qué hay de malo en tomar por modelo alguien para crear el héroe valiente, cortés, bondadoso y resignado? ¿Por qué descartar esta hipótesis, incluso si los caracteres menos importantes fueron inspirados en personas reales? Sin embargo, los llamados Tintimónologos o Tintimaníacos, políticamente correctos, no quieren ni oír hablar de esa posibilidad, sobre todo porque su único demandante es Léon Degrelle!
Hay muchas “coincidencias” que indican que Degrelle es de hecho el modelo de Tintín. Todos sabemos que, como he dicho, que Tintín es un joven periodista belga, educado, audaz, colaborador de una publicación periódica, viajero incansable desde una edad temprana, corajudo, impetuoso, y dotado de un carácter caballeroso e impecable en el sentido de honra y dignidad. Su creador, tanto lo admira que lo eligió como su más querido “hijo”. Degrelle, al parecer, cumplía todos estos requisitos en la visión de Hergé. Se sabe que esta proximidad con los nazis a través de Degrelle, fue una de las razones que Hergé fue perseguido y censurado por los “defensores de la libertad y la democracia”. Pero todo esto puede ser el resultado de meras coincidencias…
La verdad es que Hergé ha vivido en la época del nacionalsocialismo en Alemania, se hizo amigo de Leon Degrelle y tal vez haberlo elegido como modelo de Tintín, el hecho no denigra absolutamente nada acerca de la importancia de la belleza y el valor artístico y cultural, como educativo de su obra. Y esta declaración de nuestra parte no implica ni partidismo ni afición de naturaleza política o ideológica. Detrás de las escenas de la vida de cualquier artista y su obra son los datos históricos que merecen ser revelado como realmente son. La Humanus, como sabemos, siempre trata de mostrar el origen desconocido de los hechos y las historias que no están en la historia “oficial”, que a propósito no son mencionados por la prensa del sistema. Este medio de comunicación tiene la autoridad para hacer eso justamente porque no tiene vínculos políticos o ideológicos, y por sobre todo por no tener prejuicios. Está escrito por librepensadores, en el sentido literal de la palabra, es decir, las personas libres en el pensamiento, pero no por eso piensan cualquier cosa. Se trata de una libertad consciente y coherente, comprometida con la dignidad y la verdad. La meta está siempre en busca de ampliar el horizonte de la reflexión del lector en lugar de inhibir al punto de no tocar ciertos temas. ¡No hay nada intocable a no ser Dios!
NACEN LOS ATAQUES
Hergé, a pesar de que él direcciono toda su obra hacia un ideal noble y beneficioso, y de haberse esforzado por asegurar a mantener indemne después de su muerte, vedando cualquier intento de falsificarlo, no pudo, sin embargo, durante su existencia, evitar los efectos de las influencias negativas provenientes de fuerzas opuestas que se dirigen a corromper todos los que contribuyen a sembrar las semillas del bien, fuerzas que incluso él luchó a través de su trabajo.
Por lo tanto, ya era de esperar que el autor de una obra infanto-juvenil tan diferente en valor socio-cultural en medio de un torrente de publicaciones perjudiciales sufriese algún tipo de acoso, para distraerlo y así desviarlo de sus metas. También no es de extrañar que su nombre y su obra hayan sido el blanco de ataques póstumo tratando de mancillar a ambos, venganza a su testamento de impedir cualquier intento de “continuación” de su obra. Uno de los problemas más graves que enfrentó, según su amigo Léon Degrelle, fue la crisis conyugal a los 53 años, cuando estaba en la cúspide de su carrera. Después de casi treinta años de matrimonio con Germaine Kieckens, él se enamoró de Fanny Vlamynck de veintisiete años más joven que él, y entró en una fase de conflicto y melancolía. Debatiéndose en tal dilema, acabo aceptando el consejo de algún “muy amigo” para consultar, en Zurick, un psiquiatra de la línea freudiana de nombre Ricklin. Éste, después de escucharlo con atención, habló sobre el tema (la historia de Hergé incluidas en su totalidad en el libro de Degrelle y se transcribe a continuación), al presentar su receta terapia, que es, por cierto, bastante ilustrativa en relación a este tipo de tratamiento: “Era en la época en que escribía Tintín en el Tíbet. Yo estaba pasando por una crisis moral grave. Le conté entonces a Ricklin que tenía unos sueños blancos, o sea, soñaba todo blanco, y alguna cosa al respecto es encuentra en Tintín en el Tíbet. Ricklin me dio una respuesta que me sorprendió. Él dijo: ” ¡Es necesario matar en ti al demonio de la pureza! ‘. Para mí fue un shock. ¡El demonio de la pureza! Era todo lo contrario de mi sistema de valores. “(P. 210)
Ahora, la pureza, la frescura de espíritu fue lo esencial en la vida de Hergé. Pero los blancos sueños, para el psiquiatra, se convirtieron en sueños de aniquilación. (En este punto no podemos dejar de compartir con el lector una pregunta: ¿Qué hubiera sido, después de todo, la receta del psicoanalista si Hergé hubiera tenido tenía sueños negros?) “Pobre Hergé”, dice Degrelle “, ¡justo él que siempre fue tan natural, para nada calculador, ni complejos, rozando la ingenuidad!”.
A partir de entonces, se ha producido un cambio sustancial en la vida del escritor de H, que comenzó con el proceso de divorcio con Germaine (en buenos términos, según él) cuatro años después de haber conocido a Fanny, con quien se casó y vivió durante dieciséis años. Y como la decisión del tribunal demoro sorprendentemente, más de una década, en el momento de su segundo matrimonio, era él un sexagenario, quien sufría de cáncer y que parecía tener ochenta años debido a la exagerada delgadez.
Germaine, según Ajame, autor de Hergé, era “la guardiana de algo sagrado.” El amor de ellos era tan encantador que las invitaciones que enviaban a la gente durante años, llevaba la firma de los dos Hergé-Hergée (en francés la e doble al final representa lo femenino), y para Degrelle fue en la época de Hergé-Hergée que las grandes obras maestras del autor fueran publicadas. En cuanto a Fanny, nos cuenta que a pesar de haber atendido bien a su marido, “no tuvo una buena influencia en su trabajo, una vez que se volvió sorprendentemente lento a partir de su unión con el famoso autor. Después de Tintín en el Tíbet, que él acostumbraba producir en promedio un libro al año, llevó tres a publicar el próxima, Las Joyas de Castafiori, y cinco años para lanzar Vuelo 714 para Sidney, y ocho para producir Tintín y los Pícaros. (…) Por otra parte, estos últimos álbumes publicados bajo el reinado de Fanny fueron inferiores comparados a los anteriores. A importancia de ella en relación a su creación fue nula. (…) ¡En resumen, la famosa crisis de pureza no había dado un gran resultado! ”
El ex general también transcribe en su libro una declaración de Hergé relatada por su biógrafa Numa Sadoul, sobre Germaine: “Ella, sin duda, tuvo un papel importante en mi trabajo, tanto por su auxilio en relación al trabajo propiamente dicho como por su justicia moral, por una especie de intransigencia. Ella reforzó mi lado perfeccionista, quiero decir, mi lado heroísta. Siento una gran admiración por ella”.
Fanny Vlamynck, que había vivido muda e incluso indiferente en relación a la obra de su marido hasta la fecha de su muerte comenzó a demostrar, desde entonces, un gran interés comercial en su trabajo, reaccionando agresivamente a cualquier manifestación de enfoque que no rindiese frutos millonarios. Al mismo tiempo, e incluso rechazaba y hasta perseguía a todos que daban a entender que el autor de Tintín tendría alguna simpatía con el rexismo y la germanofilia.
Degrelle nos cuenta en su libro que la segunda esposa de Hergé no permitió, en 1991, la realización de una conferencia intitulada De Léon Degrelle a Tintín sin ni siquiera conocer el contenido, el cual fue elaborado por Olivier Mathieu, un joven escritor de renombre en la época. Mathieu, que había sido amigo personal de Hergé durante trece años y que era albo de admiración por parte de este, se caracterizaba por ser un adversario del sistema y, por eso mismo, compartía con el grupo de amigos del diseñador, grandes afinidades. Sin embargo, Fanny, en aquel momento dotada de gran fortuna, exigía una cantidad enorme por cada reproducción de las dedicatorias personales de Hergé al escritor. Y como este no tenía ni un decimo de recursos de lo que le era exigido, la realización de la conferencia fue inviable, generando indignación por parte de todos que anhelaban conocer más sobre el famoso productor de H. Muy probablemente fue por causa de esa negación que Degrelle busco, en el mismo año, un editor para publicar el material que venía juntando por años: los manuscritos y fotos referentes a su amistad con Hergé, conforme se puede leer, a continuación, en el artículo de Sarah Adamopoulos, una vez que el tema de la conferencia era el mismo que el de su libro. En síntesis, Fanny Vlamynck acabó convirtiendo el mundo de Hergé en un gran bazar donde se trafica de todo, hasta los derechos sobre los pequeños dibujos, aunque él los haya vendido a terceros hace medio siglo…
El sobrino de Hergé, que también se llama Georges Remi, sintió que debía expresar públicamente su indignación frente a las gestiones e indigestiones del patrimonio tintinesco: “la mediocridad con la que se gestiona el patrimonio hergeniano es desgarradora. No hubo, después del fallecimiento de mi tío, ninguna buena iniciativa, al contrario solo fiascos carísimos. Todo esto en medio de un gran conflicto en que competían el odio político y el mercantilismo!”.
Poco después de la muerte de Hergé, Fanny mandó a instalar sobre la tumba una placa enorme con una grabación:
Según Degrelle, este es un gesto muy romántico, capaz de derretir el corazón del poeta Alfred de Musset … Sin embargo, las expresiones de sentimientos no son tan firmes como lápidas, como la viuda en cuestión y su nuevo compañero de equipo, Nick Rodwell, un Judío Inglés con quien se casó unos años más tarde en secreto en Suiza, juntos un día fueron a posar, con aires penosos, frente de la inscripción grabada en el granito en el cementerio de Bruselas. Ella ya no era más la señora Remi, pero la Madam Nick Rodwell, y pasó, con el matrimonio, para las manos de la nueva pareja el poder de manipulación de la herencia enorme de Hergé.
Desde entonces, Germaine, que había sido tanto liquidada por el psiquiatra freudiano como por Fanny, continuaba siendo la única viuda del escritor, a pesar del registro del nombre de otra mujer en la tumba de su amado.
Para todos, Tintín, que ha completado 76 años, ha sido siempre una integridad impecable, intachable y tenía una moral que casi llegaba al puritanismo. Por lo tanto, los enemigos de Hergé compusieron historias con enredos pornográficos envolviendo sus personajes. El diario español El País pone a Hergé como zoófilo, con un título sensacionalista “Tintín, el sexo y los nazis” después de mostrar imágenes impactantes en todos los aspectos, especialmente en relación con mentira inventada, publican la declaración de un autor, un tal Bucquoy, carroñero y coprófago que dice ser un escritor de un libro nunca publicado llamado La vida sexual de Hergé, afirma: “El autor de Tintín era homosexual en la adolescencia” También el periódico belga reprocha al autor de la publicación de Tintín en su primera página, y en tres colores, el famoso personaje inocente y teniendo sexo con su perro!
Entonces, esta es, en síntesis, una muestra de la lucha que los sembradores del Bien tienen que enfrentar contra las fuerzas oscuras del mal, permanecer constantemente vigilante y resistente a las influencias nocivas, para conseguir a toda costa, ofrecer a los hombres obras dignas, verdaderas y admirables. Se trata de un drama vivido normalmente por los grandes benefactores de la humanidad. El breve relato sobre la vida de Hergé y su trabajo en estas páginas tiene como objetivo el de contribuir de alguna manera, para un aprendizaje de defensa de los humanus frente a los numerosos ataques y emboscadas que son colocadas en el camino de aquellos que luchan por revertir la situación socio-política y cultural de la humanidad, recontando la verdadera Historia y actuando como verdaderos humanus!
Leon Degrelle: un héroe de carne y hueso
León Joseph Marie Ignace Degrelle nació el 15 de junio de 1906, en Bouillon, Luxemburgo. Su familia era de origen católico y francés, y él heredó su devoción y fe católica que marcaran su camino a lo largo de su vida.
Sus primeros estudios fueron en el colegio Compañía de Jesús, acabándolos en la Universidad Católica de Louveine con un doctorado en derecho.
En la universidad, se convirtió en un ávido lector de Charles Maurras, un nacionalista francés que creía que la mejor manera para que un país avance fue en la encíclica papal “Quadraggis-mo Anno”. Esta encíclica no sólo influyó a Degrelle sino también a Maris-cal Petain, Salazar, Mussolini, Dollfuss, Pavelic, Tiso, José Antonio Primo de Rivera y Franco, entre otros.
Ferviente devoto de la Inmaculada Virgen María, se une a la Juventud de Acción Católica, y como corresponsal de noticias, viaja a México donde entra en contacto con los heroicos Combatientes Cristianos que luchan contra la criminal dictadura marxista-masónico de Plutarco Elías Calles, conocido como “el Nerón de América” por su feroz persecución a la Iglesia. Degrelle de inmediato asume el grito de batalla de los cristianos “¡Viva Cristo Rey!” E inspirado en él, en su regreso a Bélgica, fundó la Editorial Cristus Rex. Publica revistas semanales en francés, alemán y flamenco, que rápidamente se convierten en periódicos frente al gran éxito de los mismos.
El 29 de marzo de 1932, se casó con Marie-Paule Lemay con quien tuvo ocho hijos, siete mujeres y un hombre.
Patriota y estadista por excelencia, de forma rápida Degrelle se enfrenta a los corruptos partidos parlamentarios. Denuncia a los banqueros y la usura “Gran Banca Judía”, que ejerció una poderosa influencia en la economía belga. Todos se asombraban con su coraje, y fue esta reacción que le hizo decidir poner en marcha un movimiento que liberase a Bélgica de sus enemigos: fundó el Movimiento Rexista.
Su capacidad de liderazgo, la forma en que supo estimular el sentimiento nacional del pueblo belga, su poder magnético de oratoria con su palabra viva y ardiente, así como su espíritu le aseguran un éxito espectacular. En 1936 y con 29 años, es el líder político más joven de Europa y consiguió renacer el sentimiento nacionalista belga.
Decía Fervorosamente: “Nosotros somos los que no tienen nada que perder y mucho que ganar, hemos decidido sustituir el régimen liberal por uno nuevo y crear un mundo en que el hombre puede realmente vivir. Nuestro lema es barrer lo podrido. A pesar de que admiremos ciertas cosas que han hecho en Italia y Alemania, no tenemos la intención de imitar a nadie. Permaneceremos dentro de la tradición belga. Estamos en contra del gobierno “Todopoderoso”, por lo tanto, defenderemos al artesano, al pequeño comerciante, al agricultor, y la familia. Confiamos en la disciplina, en el orden e en la regeneración social sobre una base cristiana. Estamos en contra de la “autocracia” del dinero y el monopolio de la industria”.
Es innegable la sintonía del Movimiento Rexista con los movimientos nacionalistas de la nueva generación europea, y por lo tanto, él se siente atraído, especialmente, por la profunda espiritualidad inherente a estas manifestaciones. En consecuencia, se pone en contacto con otros nacionalistas europeos, como Cornelio Codreanu, líder de la Guardia de Hierro en Rumania, José Antonio Primo de Rivera, fundador de la Falange Española, Mussolini, creador del Partido Fascista Italiano, y Adolf Hitler, fundador del Partido Nacionalista de Alemania.
Viaja constantemente a América del Sur, EE.UU. y Canadá. Visita África, el Oriente Medio y los países europeos. Se convence de que Europa tiene un destino común, y por lo tanto, todos los países deben unirse por el bien de su patrimonio cultural.
La segunda guerra mundial estalla en 1939, y Degrelle hace todo lo posible para la neutralidad de su país, pero el Gobierno belga declara la guerra, y en 10 de mayo de 1940, el ejército alemán invadió Bélgica. El Movimiento Rexista, impulsado por el fervor patriótico, se incorpora a la Resistencia contra el invasor. Sin embargo, Degrelle es entregado por la policía democrática belga a los belicistas policía francesa bajo la falsa acusación de “espionaje”. Es brutalmente torturado y está a punto de ser fusilado. Gracias a un milagro, sobrevive a la masacre atroz de Abbeville, en Francia, en la que más de una veintena de detenidos belgas (incluyendo niños, mujeres y ancianos) son despiadadamente asesinados por los soldados de esa república dominada por la Internacional Socialista.tim 19.jpg (76.95 KB) Visualizado 38 vezes
El 28 de junio de 1940, Bélgica se rinde, y con la victoria alemana en el día 22 de julio Degrelle es liberado del campo de concentración de Vernet en Francia y regresa a Bélgica, comenzando de inmediato la reconstrucción del Movimiento Rexista. Un año después, Alemania invadió la Unión Soviética. En toda Europa se enciende la antorcha de la cruzada anti-bolchevique. Degrelle pide, en nombre de Bélgica, un cargo para el Movimiento Rexista en la lucha contra el enemigo común: el comunismo. Así nace la Legión Walloine. Degrelle ya era un líder popular y un caudillo, e incluso, se alistó sin galones, como un soldado raso para luchar en el frente del Este.
Vámonos – dijo Degrelle – para que nuestro país pueda manifestar una vez más su presencia en Europa, recordar a los que nos creen caídos en el suelo que las más altas virtudes animan siempre al Leo Belgicus de Carlomagno. ¡Ayer éramos vencidos, y ahora estamos aquí, unidos fraternalmente a los jóvenes del Gran Reich alemán! ¡En la gran epopeya que vive ahora en Europa, no estaremos al margen! ¡Nuestra patria no estará al margen! ”
En esta Titánica epopeya que, en nombre de la civilización cristiana, marchan Voluntarios de toda Europa en las heladas, inhóspitas y lejanas estepas rusas, la Legión Walloine, destacándose por su heroísmo, con Degrelle ya como Comandante en Jefe, se convierte en la 28ª División de las Waffen SS. Y así, las acciones militares de ese valiente combatiente del Frente del este contra Rusia comunista, llamados por los Nacionalistas de “bestia roja” se vuelve casi legendaria. Enfrenta setenta y cinco combates cuerpo a cuerpo con el enemigo, es herido siete veces, recibe la Medalla de Oro por sus lesiones, y asciende, de simple soldado, a General del Ejército de Liberación Europeo, haciendo justicia, por lo que recibió los más altos honores concedidos en guerra. El 23 de febrero 1944 es condecorado con dos Cruces de Hierro, la segunda en el Grado de Caballero de la Cruz de Hierro con Hojas de Roble, convirtiéndose en el único extranjero para recibir tal valiosa Decoración Militar. El Führer en persona le hizo la entrega de esta alta distinción cuando le dijo entonces: “. ¡Si yo tuviera un hijo, me gustaría que fuera como tú!”
Sobre la poderosa Frente del Este desborda Degrelle en su largo exilio: “¿Qué saben los que nos insultan sobre el gran intento de crear una Europa carnal, en el Frente del Este desde 1941 hasta 1945 y representada por 600.000 voluntarios no alemanes? En el frente del Este, estamos unidos, belgas, franceses, holandeses, noruegos, bálticos, eslavos, húngaros, italianos, croatas, rumanos, etc. En cuatro años de lucha tremenda, participamos de los mismos sufrimientos, unimos nuestra sangre en el furor de las batallas, llevamos fraternalmente, todos juntos, el mismo ideal. La historia nunca había conocido una epopeya común de semejante tamaño: cientos de miles de voluntarios de veintiocho países diferentes. La “Grande Armée” de Napoleón tenía doscientos mil soldados no franceses, y sumando aún los no voluntarios, y no sobrevivió más de cinco meses. Nosotros, los voluntarios desde el primero hasta el último, formamos durante cuatro años un ejército europeo tres veces más grande que el de Napoleón. Fenómeno extraordinario que tiene que llamar la atención de todos y cualquier historiador y de todos los que buscan una explicación de la realidad política, social y militar de Europa que marcaron el siglo XX. Sólo el fanatismo puede explicar la ira con la que muchos se niegan a estudiar estos hechos históricos. Solo son capases de replicarnos: “¿Y los Judíos?” Los judíos, desde 1933, estaban en guerra abierta contra la Alemania de Hitler. El pueblo israelí – inocente como siempre – tuvo que soportar las consecuencias de una contienda, que ellos mismos habían causado en gran medida.
Cualquier persona razonable tiene que decirse: “. Si no hay más argumentos que los insultos, es evidente que no pueden más”
El 5 de mayo de 1945, los ejércitos británico y estadounidense se dedicaban a bombardear en ataques terroristas a indefensas poblaciones civiles alemanas. Dos días después, las tropas alemanas capitulan en Noruega. Todo está perdido. Es la victoria sangrienta del monstruo marxista en Europa. La mitad de ella es entregue a la tiranía genocida de la hoz y el martillo.
Degrelle, uno de los últimos en abandonar el Frente, luego se embarca en un vuelo por los cielos europeos hasta que la última gota de combustible hace caer el avión en la bahía de San Sebastián, en el norte de la Península Ibérica. Gravemente herido pasa un año en el hospital, ¡Sobrevive! Y tan pronto como él puede mover su brazo comienza a escribir su libro La Campaña de Rusia, que se publicó en Francia en dos ediciones.
El 29 de diciembre, le retiran la nacionalidad y es condenado a muerte en su patria por imposición de los vencedores de las Fuerzas Aliadas, las mismas Fuerzas que en nombre de “la diosa democracia” entregaran 700 millones de europeos al sacrificio ya la esclavitud del Gulag (campos de concentración soviéticos). El nuevo gobierno promulgó una ley llamada Lex Degrellana que declaraba ilegal poseer, transferir o recibir cualquier libro de Degrelle o que a hablase de él. Sus padres, con 79 años, murieran de hambre y pobreza en un cruel encarcelamiento por el “crimen terrible” de haberle dado la vida. Sus familiares y amigos fueron perseguidos y torturados. Sus hijos fueron internados en centros de detención en varios países europeos con sus nombres cambiados para impedir que la familia pudiera reunirse de nuevo. ¡Todo esto en nombre de la democracia y los derechos humanos! Es de pasmar…
Desde entonces, Degrelle vivió refugiado en España, en tierras andaluzas, con el apoyo de su amigo, el General Franco. Solo hizo el Camino de Santiago y se dedicó a escribir varios otros libros, entre ellos: Almas Ardiendo, Memorias de un Fascista, Carta al Papa, Mi Camino de Santiago, Mi Aventura en México. Trabajó como obrero de la construcción y, al igual que un soldado llegó a General, de obrero llegó a fundar su propia empresa de construcción. Tuvo tanto éxito en su empresa que el gobierno de los EE.UU., le encargo la construcción de campos aéreos en España. En cuanto a los hijos, Degrelle acabo reencontrándolos, siendo que algunos amigos leales a él y a su causa intentaron reunirlos y devolverlos a su padre.
Durante cuarenta años, él sólo pidió una cosa: ser juzgados públicamente y directamente por el pueblo belga. Pero nunca le dieron ese derecho. Nunca se hizo justicia. En su lugar, fue perseguido durante toda su vida y en varias ocasiones atentaron contra su vida. Y esto ocurrió principalmente por los judíos, que pensaban que Degrelle fue un terrible antisemita. A lo que él respondió: “Lo más interesante es que no toque ni un cabello de un judío en toda mi vida”. Ellos siempre buscan el sensacionalismo. Durante miles de años, cualquiera que sea el país, sea Grecia, Egipto, Roma, España, Inglaterra, o la Francia del Rey St. Louis, las personas nunca pidieron aguantar a ese pueblo. Como dijo un escritor judío, Bernard Lazare, en su libro Historia del antisemitismo, si esta repulsión se encuentra tan generalizada en todos los países y en todos los tiempos, es señal de que hay razones que la causan. El antisemitismo no es una invención de Hitler: es una historia milenaria constante. Los judíos mismos incansablemente reactivan esta antipatía, como si no tuvieran nada más que hacer que multiplicar sus oponentes. Yo personalmente no odio a los judíos, porque nunca odié a nadie.
Lo único que le pido a los Judíos es que se comporten como personas normales, sin tratar de imponer a todos los pueblos su instinto dominante, al igual que su versión, muy especial, la ‘historia oficial’ “.
Degrelle, a pesar de todos los ataques sufridos, hizo su travesía aquí en la Tierra con un humor peculiar. Este héroe, cuya vida es una verdadera leyenda, en la que se podría escribir diez libros y hacer muchas películas de súper acción, este hombre enérgico, atleta, alpinista, escritor, soldado, de sonriso franco y cordial, falleció en el exilio español, rodeado amigos y camaradas en el Viernes santo, 31 de marzo 1994, en una clínica de Málaga, cuando, a las 23:30, su noble corazón dejó de latir. Quiso el destino que, en el mismo día que se recuerda la expiación de Jesucristo, fallece quien de su vida hiciera un permanente acto de heroísmo y de confianza en Dios.
Paladino de la libertad en Europa, desde los veinte años ya luchaba por su país y sus ideales, pertenece, sin duda, más allá de las contingencias, a la inmortal Patria de los héroes. Él continuó luchando hasta el final de sus días, desenmascarando con su lapicera vibrante las mentiras históricas con las que se trata de ensuciar el cerebro humano y confundir a la gente, ocultando y distorsionando los hechos. Hizo de su vida un ideal, y del ideal, honor. Se sostuvo como una roca. Fijó su mirada al sol y nunca parpadeó. Desdeñaba lo fácil, amaba la virtud y la fuerza de voluntad.
Resistió de pecho erguido contra el viento desfavorable de la historia, sin rendirse ni ceder supo vencer a la adversidad. Nunca fue derrotado debido a que “la propia desgracia nos trae la alergia dolorosa del alma que se entrega sangrando, que pesa su sacrificio, disecciona y analiza su amargura. ¡Alegría cruel, pero sublime alegría de la jerarquía, a cual solo es capaz el hombre que, con el corazón roto, entiende todo! “Su vida y su ideal sirven de ejemplo a todos los Nacionalistas y buenas personas.
¡Vivir es mucho más que comer, que bailar, mirar tiendas, viajar! Vivir de verdad es sacrificar la vida por un gran ideal, amar fraternamente a sus semejantes, los hombres, convertir la banalidad de su existencia en una gran fuente de luz, de belleza y elevación. Reconozco que este concepto no está de moda, lo sé, pero tal vez este concepto no está tan muerto como pretenden los materialistas.
No estamos en este mundo para comer a la misma hora, para dormir con regularidad, para vivir cien años o más. Todo esto es vano y necio. Sólo una cosa cuenta: tener una vida útil, perfilar el espíritu, estar ligado a él , momento a momento, vigilar sus debilidades y exaltar sus impulsos; servir a los demás, derramando alrededor de nosotros la felicidad y la ternura; ofrecer el brazo al siguiente, para todos elevarnos, auxiliándonos unos a los otros.
Un espíritu es un jardín inviolable. Es necesario abordarlo con ternura. Si se abren sus secretos ocultos, se debe avanzar suavemente, de puntillas, y saber que a su frente se encuentre, quizás una conciencia mucho más elevada que la propia. ¡Qué alegría, sin embargo, poder transmitir tal riqueza a los corazones de los demás!
La inmolación de los jóvenes caídos para crear una Europa de carne y hueso, con sus virtudes y lecciones proféticas, algún día, estoy seguro, traerá nuevamente la vida. Tal vez sobre nuestras tumbas. Nosotros, los precursores, no conoceremos, sin duda, la tierra prometida, pero otros la alcanzarán.
Lo cierto es que mañana no va a ser como ayer. La historia no se repite, pero sirve de base. Vendrá otro mundo, liquidando a los falsos profetas de 1945. Son los jóvenes que ganarán.
Palabras de Léon Degrelle
(Bouillon 15/6/1906 – Málaga 31/3/1994)
YO SS TINTÍN
Con Hergé muerto y Tintín inmortal, he que el antiguo general de la SS, Léon Degrelle, tiene la osadía de escribir: “Tintín soy yo!”
Y así, el último oficial nazi que asume no solo su uniforme pero también su admiración por Hitler, deja en situación comprometedora a su eterno amigo Hergé. Y, además en situación más delicada, el héroe de H más leído del mundo. La Asociación de los Amigos de Tintín, representando a los miles de asociados distribuidos por el mundo, protesta contra la osadía de Léon de Degrelle. La verdad es que, fisionómicamente, la semejanza tiene cabida y va mas allá del detalle de los pantalones de golf que Degrelle reclama como suyos. Si Tintín envejeciese, podría muy bien ser así. He la historia de una saga que empieza y termina con el siglo y la de dos hombres unidos por el único rival que De Gaulle encontró a su altura: Tintín.
buen dibujo TIntin no como los de ahora versión japonesa. ¿alguien sabe por qué no me sale el vídeo de fraudes de la historia sobre la llegada a la luna?
http://WWW.EUA.MENTIRA.COM
http://samamultimidia.com.br/artigo-detalhes.aspx?id=1468
gracias honorio
Definitivamente, Tintin no es racista Tintin en el Congo podrá seguir vendiéndose en Bélgica, la patria de su creador, Hergé, porque no es una publicación racista. Así lo ha estimado el tribunal belga que ha rechazado la petición de un activista congolés para que se prohibiera su comercialización. En su fallo, los jueces no aprecian ninguna intención discriminatoria. Visto con los ojos del siglo XXI, Tintin en el Congo está lejos de ser políticamente correcto, pero la historieta se publicó por primera vez, en fascículos en 1930 y fue reditado en 1946, cuando, como reconoció después el propio Hergé, prevalecían… Leer más »
Un libro que todo hombre tiene que leer algún día: “Almas ardiendo” de Léon Degrelle. Traducido y prologado por Gregorio Marañón. Se lo puede encontrar fácilmente en Internet. Prólogo de Gregorio Marañon ¿Prólogo? No. Sólo unas líneas para decir a los hombres de mi lengua que pasan y que me quieran escuchar, que lean las páginas, breves y anhelantes como latidos, del libro en cuya portada las estoy escribiendo. Yo no admito, no he admitido, ni admitiré jamás, que los hombres podamos alejarnos los unos de los otros más que por motivos profundos y permanentes. Y aún esa profundidad y… Leer más »
Foto de Leon Degrelle con 22 años. Es Tintin.
http://img199.imageshack.us/img199/3877/degrelle4.jpg