Pep Guardiola, ¿un mercenario? No… lo siguiente
Por Oscar Rivas.- Guardiola no quiso faltar a la mascarada independentista que se marcaron los próceres catalanes en su Diada anual. Todos los que son, estaban allí. No me refiero, obviamente, a los catalanes de segunda; a aquellos que, nacidos –o no- en Cataluña siguen sosteniendo, en su delirio, un españolismo demodé; a aquellos que la jerga nacionalista denominaría charnegos mentales. Esos se quedaron donde debían, o sea, en casa. Me estoy refiriendo a los verdaderos catalanes; a los que se bañan con cava y, desde hace unos días, se secan con la estelada; a los que sienten que ha llegado la hora de desprenderse del corsé al que les somete, desde hace siglos, la España opresora que les priva de su identidad, y lo que es peor, saquea sus bolsillos; a aquellos que, en definitiva, han dicho ¡basta! a tamaña iniquidad Guardiola entre ellos.
Bien es cierto que Pep no acudió en cuerpo, pues se encuentra descansando en Nueva York. Lo importante es que la masa pudo verle y escucharle, a través de una gran pantalla habilitada para los efectos. Y el exfutbolista no se anduvo con chiquitas: “aquí tenéis un voto más para la independencia”, señaló, mientras levantaba la tarjeta verde con la que, en una puesta en escena tan hortera como esperpéntica, el independentismo sobrevenido pretendía simbolizar su adhesión a la nova terra lliure. Y es que en el selecto club de iniciados nacionalistas, pocos ignoran que Pep es un catalán de los buenos, de los verdaderos, de los de pura cepa cariñena. Tanto es así que el ex-entrenador del Barça afirma ahora que “uno no puede renegar de lo que siente, de lo que uno ama, y yo me siento ligado a Cataluña. Un país que desde hace 800 años tiene lengua propia y no siente a España como suya”. ¡Toma ya!
“Si tan sentido, tan profundo y tan arraigado es su sentimiento ¿por qué vistió durante años la camisola de la selección?”-se pregunta con atino su excompañero Alfonso Pérez-. ¿Por qué nunca se pronuncio a ese respecto? Asegura Pep que “eran las leyes las que me obligaban. Si un seleccionador me convocaba debía asistir”. ¡Pobre Pep! Cuánto debió sufrir en el pasado. Y cuán valiente ha sido al ocultar, en estoico silencio, su esclavitud moral. No quiero ni pensar la reacción de dos patriotas del calibre de Javier Clemente o Ángel María Villar, si Pep se hubiera proclamado en rebeldía. Basta con ver la reacción de Rajoy al frente del Estado para comprenderlo.
No dudo que Guardiola sea un buen entrenador, pero políticamente es difícil superar su grado de cinismo. ¿Qué sentido tiene que ayer se viera obligado a acatar la llamada de un entrenador y hoy no tenga inconveniente en desobedecer la esencia de la Constitución Española? No existe equiparación posible. Seamos francos ¿Por qué lo llama patriotismo cuando quiere decir dinero?
¿No será que la pela es la pela y que cuando hay euros de por medio –millones de euros- las ínfulas independentistas pueden esperar? ¿Por qué sino aceptar el dinero de una tiranía? ¿No equivale ello a someterse servilmente al yugo opresor? Y por cierto, ¿qué tiene que ver el sentir a Cataluña como propia, con el sentir a España como ajena? ¿Por qué la afirmación de la una ha de significar la negación de la otra? ¿Porque así lo decidieron, hace poco más de un siglo, unos cuantos personajillos, no tan iluminados, como impulsados por sus particulares intereses económicos?
Por otra parte, ¿desde cuándo la posesión de una lengua propia es suficiente para proclamar la existencia de una nación? ¿Solo por el hecho de que así lo requieran los intereses creados de una casta tan podrida y corrupta, como endogámica y analfabeta, que lleva décadas medrando a costa de un cuento que no se cree ni su propia propaganda; y que no podría ni sabría sobrevivir, más allá de la política, si no fuera por un sistema educativo, concebido, más que para enseñar, para inocular la mente de las jóvenes generaciones?
En cuanto al señor Guardiola, sus palabras unidas a sus actos lo definen. Quien cobra un estipendio por representar a una nación que no siente como suya, solo tiene un nombre: mercenario. Quien cobra un estipendio por representar a una nación que oprime su libertad, como parece deducirse de su discurso, no es un mercenario, es… lo siguiente.
No no es un mercenario su real nombre para llamarle es: Hijo de la gran puta catalan de mierda cabron.
Por eso nos sentimos “tan españoles” los catalanes… porque sólo nos quereis para pagar, somos unos hijos de puta catalanes de mierda, así que darnos la independencia cuanto antes, para qué queremos estar en una mierda de país que sólo nos quiere para pagar y nos insulta constantemente, meteros a vuestra españa rancia, casposa y caduca por donde os quepa ignorantes, no respetais ni a vuestra madre, malnacidos
Yo veo a Guardiola como un inculto y un pesetero, que solo sabe de fútbol, en lo otro es un mediocre más.
Cataluña “independent” es un cuento chino para imbéciles ideado por hijos de puta. Más claro imposible.
incultso e hijos de puta sois vosotros, fachas de mierda
queremos el abismo cuanto antes!
Pero no hay que engañarse, ya a mediados de los 90 cuando portaba la camiseta de España
decía en algunas entrevistas que Cataluña era una nación .
No entiendo ni papa de politíca, creo que se divide en dos partes, en los hijos de puta de los de derecha y en los hijos de putas de la izquierda. Lo que entiendo es que en los tiempos que vivimos, lo que menos nos favorece es una separación. Creo que lo que deberíamos hacer el pueblo es organizarnos, ya que ellos no tienen cojones de hacerlo, acabar con las autonimías formar un solo gobierno, con una sola administración y que toda esta casta politica se vaya a pastar fango. Hay demasiados politícos, todos quieren protagonismo y chupar del bote,… Leer más »
Ya dijo Oleguer Presas que no quería jugar con la selección y NUNCA se ha vuelto a hablar de él. Supongo que por eso. Porque no lo aceptáis.
Ése era un matao y un paquete. No lo aceptan por que ni se merece que se pierda un segundo con él, cacho de burro.