Un cerdo ecuatoriano viola a dos mujeres en Alicante y deja embarazada a una de ellas
Las dos mujeres, una de ellas embarazada, que fueron presuntamente violadas por un individuo en octubre de 2009 en una zona apartada del Monte Benacantil de Alicante, han identificado la ropa, el calzado y el acento del acusado, un hombre de nacionalidad ecuatoriana para el que el fiscal pide una pena de 33 años de prisión.
Durante la primera jornada del juicio celebrado este lunes en la sección tercera de la Audiencia Provincial de Alicante , en su testimonio las dos víctimas han confirmado que la ropa y calzado que portaba su agresor coinciden “al cien por cien” con la encontrada en el domicilio del detenido.
La primera de las agresiones se produjo al mediodía del 7 de octubre de 2009, cuando la primera víctima estaba realizando unas fotografías por la zona del Monte Benacantil y un individuo la abordó por la espalda, la inmovilizó por el cuello y le robó el teléfono móvil, la cámara de fotos y dinero.
A continuación, la obligó a caminar hacia un lugar más apartado, donde la golpeó y la forzó a mantener relaciones sexuales contra su voluntad, usando preservativo para ello, –según le dijo el propio agresor, con el fin de llevarse cualquier rastro biológico de lo ocurrido–, según ha relatado la propia víctima en una declaración grabada que ha sido reproducida durante la vista oral como prueba preconstituida.
La segunda agresión se produjo diez días después, sobre las 13.30 horas del 17 de octubre en la misma zona, cuando una joven, que en ese momento estaba embarazada de siete semanas, descansaba sobre una roca, y fue abordada igualmente por un individuo por la espalda.
Al igual que en el primer caso, el agresor la inmovilizó por el cuello, la obligó a caminar hacia una zona rocosa más apartada, donde la víctima le informó de que estaba embarazada, pese a la cual el individuo abusó de ella, lo que ha provocado a la víctima “numerosos problemas psicológicos”, según su propia declaración.
Los testimonios de las víctimas revelan que el agresor utilizó la misma forma de actuar en ambos casos, y han coincidido en que el individuo, al que no pudieron ver el rostro, tenía un acento ecuatoriano, la piel morena y el cuerpo depilado.
Teléfono y cámara
Por su parte, los agentes que llevaron a cabo la investigación policial, el arresto y el registro domiciliario de la vivienda del detenido han explicado que la información facilitada por la compañía telefónica permitió identificar rápidamente al detenido, quien utilizaba el teléfono móvil y tenía en su poder la cámara de fotos sustraídos a la primera víctima.
El detenido ha reconocido ante la sala que tenía en su poder el citado móvil, al que había añadido un politono y una bandera de su país, si bien ha explicado que la compró junto a la cámara de fotografía a un ciudadano paquistaní por un total de 22 euros.
El acusado se enfrenta a dos penas de 15 años de prisión por dos delitos de agresión sexual y a tres años más por robo con violencia a una de las víctimas, según la calificación provisional del fiscal, que también pide una indemnización de 30.000 euros para cada una de las mujeres.
Este martes, el tribunal procederá a tomar testimonio de los forenses que examinaron a las víctimas tras lo ocurrido, tras lo cual el caso quedará visto para sentencia.
Estamos de acuerdo en que el delito cometido es inperdonable, pero por otro lado incluir la expresión “cerdo” en el Titular me parece de poca monta y más bien una actitud de periodico sensacionalista.
Ese cerdo no vale más que para comida para peces.