El expresidente del Gobierno José María Aznar ha defendido la “intervención preventiva” que la comunidad internacional desarrolla en Libia para frenar los ataques contra la población, aunque ha reclamado que la “lucha por la libertad” se lleve a cabo “sin confusión” y que, por tanto, no se permita que perdure el régimen de Muamar el Gadafi.

“Es imposible defender a una parte de la población y al mismo tiempo no cambiar el régimen de Gadafi”, ha sostenido en una entrevista en Veo Televisión, al ser preguntado si defendía una invasión en Libia al igual que la acometida en Iraq para derrocar a Sadam Husseim.

Aznar ha comparado la situación de Libia con la de Iraq, admitiendo que “matar a más gente” de la que mató Sadam Husseim “es complicado”. “No creo que los iraquíes sean de peor condición que los libios”, ha añadido antes de recordar que la intervención militar española en Iraq se limitó a “operaciones humanitarias y de paz amparadas por Naciones Unidas”. Para ello, ha apuntado que esta segunda guerra del Golfo es citada actualmente por el Ministerio de Defensa como una intervención humanitaria.

Siguiendo con las comparaciones, el expresidente ha recordado que la coalición internacional en Iraq fue respaldada por más países que la compuesta para establecer una zona de exclusión aérea en Libia. También ha señalado la última resolución de Naciones Unidas, en 2002, instaba al régimen de Husseim a que respondiera a las peticiones de la comunidad internacional para evitar la invasión. “Aquella resolución fue votada por unanimidad, ésta no”, ha dicho en referencia a la autorización para intervenir en Libia.

“Todo justificado contra Bush”

“Yo pienso que todas las guerras son horribles, pero algunas inevitables para evitar un mal mayor”, ha continuado Aznar, quien ha apuntado que “probablemente contra Bush estaba todo justificado”. Según él, la doctrina defendida entonces por el expresidente de EEUU, participante junto a él y Tony Blair en la foto de las Azores, ha sido estos días seguida por el presidente Barack Obama.

El presidente de FAES ha resumido la última conferencia de Obama sobre la situación en Libia en la idea de que la intervención se justifica porque “evita que se cometa una masacre”. “Eso se llama intervención preventiva”, ha precisado. Aznar se ha mostrado defensor de los “vientos de libertad” en todas las partes del mundo, sin hacer distinciones. “Defendí y apoyo a los demócratas iraníes, sirios, libios, egipcios, cubanos o venezolanos”, ha enfatizado.

Debate sucesorio en el PSOE

Durante la entrevista, Aznar ha asegurado que tiene “poco crédito” que el jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, pueda anunciar ahora que no será de nuevo el candidato del PSOE a las próximas elecciones generales, ya que, según ha dicho, “esas cosas se anuncian antes”, no cuando se temen “perder las elecciones” o que le “echen” los suyos.

El expresidente ha señalado que hay “mucha gente” que habla de la sucesión en el PSOE pero ha recalcado que “el que tiene que hablar públicamente” sobre este tema, el propio Zapatero, “todavía no ha dicho nada”. “Acuérdese usted de aquello de las mil flores que brotan y todos lo que brotaron acabaron mal”, ha recordado el presidente de FAES a modo de ejemplo, para insistir después de nuevo en que, “de momento, quien tiene que decir públicamente algo no lo ha dicho”.

“Dije en 1995 que solo estaría 8 años”

Aznar ha subrayado que él dijo en 1995 que sólo estaría ocho años si los españoles le daban su confianza, una promesa que luego se limitó a “cumplir y respetar”, según ha añadido. Tras asegurar que “esas cosas se anuncian antes”, Aznar ha criticado que a estas alturas el presidente del Gobierno pueda anunciar que no opta a la reelección.

“Lo que no tiene validez es ‘voy a decir ahora que sólo voy a estar ocho años’, antes de que me echen los míos o antes de perder las elecciones. Eso tiene poco crédito”, ha señalado, para añadir que, a su juicio, son cosas con las que se puede “entretener al público” pero “tienen un margen de seriedad poco relevante para los efectos de los problemas del país”.

El ex presidente del Gobierno no ha querido pronunciarse acerca de los sondeos que sitúan al ministro Alfredo Pérez Rubalcaba como favorito en las encuestas para suceder a Zapatero, pero sí que ha cargado duramente contra la actuación del vicepresidente del Gobierno, quien ha dicho que está “especialmente entrenado” para hacer “algunas cosas” como “violar la jornada de reflexión previa a unas elecciones generales” o “defender notoriamente faltando a la verdad que es bueno negociar con terroristas”.