El PP de Barcelona quiere que en el espacio que hasta el domingo ocupaba la estatua franquista de la Victoria se instale un “monumento al Rey Juan Carlos I”. El presidente del grupo municipal, Alberto Fernández Díaz, considera que el lugar y el personaje “merecen un monumento a la altura de lo que significan” y por ello apuesta por dejar de lado debates “revisionistas” y optar “por el presente”. “Ni franquismo, ni república, ni memorias históricas, ni amnesias selectivas “, ha sentenciado. Así, el PP avanzó que pedirá formalmente el monumento a la comisión pertinente y pretende que los técnicos y los grupos formulan una propuesta consensuada que se podría acabar llevando a cabo “cuando se reforme el Paseo de Gracia”.

Fernández Díaz quiere que la plaza que lleva el nombre del monarca español tenga un monumento al propio Juan Carlos I. Aprovechando la retirada de la estatua franquista de la Victoria del pasado domingo, el popular ha querido reclamar que el cruce de Paseo de Gracia con la avenida Diagonal tenga “el reconocimiento del presente de la historia, no de la memoria histórica”. Y es por eso que pide para la plaza un monumento “digno para lo que representa el Rey como garante de los valores de democracia y convivencia y un monumento digno para un lugar singular de nuestra ciudad “.

Por todo ello, Fernández Díaz asegura que harán la petición formal a la comisión de monumentos del Ayuntamiento, y pretende que “los técnicos municipales y los grupos municipales hagan una propuesta’ conjunta y consensuada por este homenaje”, que debería “dar respuesta a esta doble singularidad del lugar”. “Ni franquismo, ni repúblicas, ni memorias históricas, ni amnesias selectivas, ni revisionismos del pasado”, ha pedido Fernández Díaz.

Y es que el líder municipal de los populares cree que el Ayuntamiento se ha de “centrarse en el presente y en el futuro, en los problemas de Barcelona, no en diseñar cortinas de humo como el monumento a los gays o ahora el del Paseo de gracia para ocultar la incompetencia del gobierno de Jordi Hereu”. Ligado con esta “maniobra de distracción” que atribuye al PP a una estrategia del alcalde, Fernández Díaz ha arremetido contra Hereu para estar más centrado en los problemas internos del PSC que en la gestión de la ciudad. “Las primarias socialistas han dejado Barcelona sin gobierno y un alcalde fuera de lugar en el peor momento de la crisis”, explicó. Y es que el PP cree que Hereu “tiene la especialidad de distraer al personal con propuestas ornamentales para no resolver los problemas de los ciudadanos, y que pretenden esconder el monumento a la incompetencia que es el alcalde”.