Ante las constantes amenazas, las autoridades penitenciarias trasladaron a Asia Bibi, la primera mujer cristiana condenada a muerte bajo la Ley de Blasfemia en Pakistán, a una celda de aislamiento. Según informa la agencia vaticana Fides, Asia Bibi está encarcelada desde hace un año y medio en la prisión de Sheikhpura, al noreste de la capital.

El esposo de Asia, Ashiq Masih, explicó a Fides que ante el peligro de que sea asesinada en cualquier momento, las autoridades penitenciarias y gubernamentales decidieron finalmente mejorar las medidas de seguridad para protegerla.

Ashiq informó que Asia está recluida en una celda personal, es vigilada por dos guardias y dos cámaras las 24 horas del día. Su alimentación pasa por rígidos controles y para evitar el riesgo de envenenamiento, le entregan los alimentos crudos y le permiten cocinarlos por su cuenta

Asia “sigue estando triste y preocupada por sus hijos. Le dije que debe confiar en Dios y que estamos haciendo todo lo posible para conseguir su liberación. También la he informado de que todos los cristianos y personas de buena voluntad en Pakistán rezarán por ella en la Jornada por la Paz el 30 de enero”, informó su esposo.

Según la Masihi Foundation, que se encarga de la asistencia a la familia de Asia, “la mujer ahora tiene más seguridad, pero estará completamente a salvo sólo cuando pueda salir del país”. Fides informó que la Fundación está negociando una visita de los hijos de Asia a la prisión.