Francisco Álvarez-Cascos, en palabras de Mariano Rajoy, es ya «historia» del PP. El partido, sin embargo, continúa utilizando la figura de su ex secretario general como ejemplo de eficacia a la hora de gobernar. Álvarez-Cascos, salvo rectificación de última hora, aparecerá en uno de los videos que se proyectarán a partir de mañana en la Convención Nacional del PP, que se celebrará en Sevilla. Ana Mato, vicesecretaria general de Organización, ha presentado esta mañana las líneas generales de este cónclave y cuatro videos que se podrán ver en distintos momentos del encuentro, en uno de los cuales se observa a Cascos junto a José María Aznar y el resto de ministros y ministras de un gobierno que -según explica una voz en off- «garantizó el bienestar de los españoles».

No se trata de un desliz. Mato, a preguntas de este periódico, ha justificado la presencia de Álvarez-Cascos en este video corporativo porque «es una parte importante del partido y lo seguirá siendo». Instantes después ha apostillado que «lo seguiría siendo» si no se hubiera dado de baja en el partido.

Mato, sin embargo, se negó a valorar el nuevo escenario político en el Principado, tras la aparición del partido Foro Asturias, que podría tener a Álvarez-Cascos como cabeza de cartel. Es más, la número tres del PP aseguró que nadie de la dirección nacional hará comentarios al respecto. Ha incidido, no obstante, en que el objetivo de su partido sigue siendo ganar las elecciones en Asturias «porque tenemos el mejor programa posible».

En cuanto a los objetivos de la convención, a la que asistirán más de 3.000 personas, serán los de «despertar la ilusión» de los ciudadanos, para que «puedan volver a confiar» y que «sepan que hay un partido con alternativas» que es «capaz de sacar a España de la crisis». De hecho, en otro de los videos, se contempla a un Mariano Rajoy tiñendo de colores una gris realidad española a la que, con el cambio de gobierno, volverá el empleo. También aparece José Luis Rodríguez Zapatero en dos momentos concretos. Uno, en un mitin del PSOE en que bajo su mandato «no habrá ningún recorte social» y otro, durante la intervención en el Congreso el pasado mes de mayo en la que anunció la congelación de las pensiones y kla reducción del 5% del sueldo de los funcionarios.