La Ertzaintza busca a los autores de una agresión sexual a una adolescente de 16 años registrada durante la pasada Semana Santa en Bilbao. Se trata de dos jóvenes de origen magrebí, según la descripción facilitada por la víctima. El suceso se produjo sobre las tres y veinte de la madrugada del pasado 31 de marzo en la calle Pontón, en las cercanías de Miraflores, según ha podido saber este periódico. Dos individuos abordaron a una chica amenazándola con una navaja. A continuación le rasgaron la camiseta con el filo del arma blanca y comenzaron a someterla a tocamientos en los pechos. Antes de escapar, los atacantes le robaron el teléfono móvil.

La muchacha tuvo que ser atendida en el hospital de Basurto. Sufría arañazos y contusiones por todo el cuerpo y un corte en la frente, según el parte médico. La víctima presentó una denuncia y la Ertzaintza inició una investigación al respecto, aunque los dos agresores no han sido todavía localizados.

No ha sido la única agresión sexual contra mujeres registrada en Semana Santa en la capital vizcaína. El día anterior, el 29 de marzo, también de madrugada, se produjo un ataque de naturaleza similar en el interior de un pub de la calle Lersundi de Bilbao. Una chica estuvo bailando con un individuo en el interior del establecimiento hasta que, alrededor de las cuatro de la mañana, el sujeto la empujó al interior de los lavabos e intentó desnudarla. Un testigo de la escena telefoneó al 112, lo que permitió que en esta ocasión una patrulla de la Ertzaintza detuviera al individuo.

Cinturón y reloj

Días después, el pasado 2 de abril, un nuevo caso se produjo en el barrio de Santutxu. Un vendedor de alfombras acorraló contra una pared y sometió a tocamientos a una chica de 24 años en plena vía pública, en las inmediaciones del colegio Berriotxoa. La joven logró zafarse del agresor. Después del ataque, el individuo dio a la víctima un cinturón y un reloj.

La muchacha avisó a la Ertzaintza de lo que le había ocurrido. Una patrulla salió en busca del sospechoso, fácilmente identificable porque había salido corriendo con unas alfombras encima. Al poco, los ertzainas le localizaron en el interior de un bar. Se trataba de un hombre de origen marroquí de 39 años. Tras ser puesto a disposición judicial, el detenido quedó en libertad provisional con cargos.