Anglada, durante un mitin en Vilanova i la Geltrú. Al fondo, un cartel electoral con la imagen de Gerard Bellalta.

El empresario y presidente de Catalunya Desperta Ya!, Gerard Bellalta, se postuló en la tarde del miércoles para liderar a la Plataforma per Catalunya (PxC) con un objetivo claro y terminante: la lucha contra la inmigración y la defensa de la españolidad de Cataluña frente al “nacionalismo sedicioso y excluyente”.

Bellalta cree que el todavía líder de Plataforma, Josep Anglada, ha completado una etapa y debe dar paso a nuevos dirigentes y nuevas ideas. “Nunca criticaré a Josep Anglada ni revelaré nada de lo que sé. Trabajamos juntos en el proyecto de PxC durante meses. Pero todo tiene su final y Josep ya ha cumplido su etapa en Plataforma. Si de verdad defiende las ideas que dice defender, debe tener la generosidad y la grandeza moral de reconocer que su liderazgo ya está amortizado”.

Gerard Bellalta, que fue responsable de la oficina de comunicación de PxC y presidente de este partido en Vilanova i la Geltrú, dice coincidir con algunas análisis que se han hecho sobre los recientes comicios catalanes: “Se empezó a votar a Plataforma por Cataluña por Anglada. Ahora se vota a Plataforma por Cataluña a pesar de Anglada. Y se vota cada vez menos. El 2,71% de los votos en Vic. Menos de la mitad que en las anteriores elecciones autonómicas. La idea tiene validez pero su encarnación, no”.

Tras expresar su convencimiento de ser el líder que necesita el proyecto identitario en Cataluña, abogó por la salida del actual equipo dirigente. “Desde Ravello a Parada, todos ellos han cumplido un ciclo”. Bellalta, que se considera gestor antes que político, cree que PxC ha cortocircuitado las críticas internas, lo que a su juicio explica el porqué no ha existido pronunciamientos objetivos por parte de la militancia tras los malos resultados en las elecciones autonómicas. “Lo peor que le puede ocurrir a un partido es que, pese a los fracasos, caiga en la autocomplacencia. No ha existido una sola voz crítica sobre las causas de los malos resultados de PxC. Cada día, sin embargo, recibo llamadas de gente del partido. Me dicen que las cosas no pueden continuar como hasta ahora y que es imprescindible otro liderazgo. Si nos atenemos a un mal diagnóstico es imposible curar una enfermedad. Nadie ha dicho por ejemplo que PxC se ha convertido en un partido uniprovincial, ya que salvo en Barcelona, sus resultados en las otras tres provincias catalanas han sido absolutamente testimoniales”.

A su juicio, una de las causas de la pérdida de votos del partido ha sido el erratismo de los dirigentes plataformistas a la hora de afrontar el debate soberanista. “Plataforma se ha mantenido en la ambigüedad calculada y eso ha sido un suicidio político. No vale con decir que las elecciones catalanas han estado muy polarizadas en torno al debate independentista, porque entonces habría que preguntar por qué no se entró en ese debate con un mensaje rotundo, sin equidistancias ni vacilaciones”.

Al respecto cree necesario que PxC abandere a los sectores que dentro de la sociedad catalana defienden la españolidad de Cataluña. “Plataforma tiene que ser la punta de lanza del españolismo en Cataluña. El nacionalismo catalán y la inmigración son las dos caras de una misma moneda. El votante nacionalista no hace asco a la presencia en Cataluña de un veinte, un treinta y hasta un cincuenta por ciento de población extranjera. Por consiguiente, PxC se equivoca cuando lanza sus redes electorales en ese nicho de la población. Su mercado natural es el sector de la sociedad catalana que se siente profundamente español y que no vio motivos para votar a un partido que oculta la bandera española en todos sus mítines y actos públicos.

Como prueba del doble mensaje que PxC quiere trasladar a los catalanes, Bellalta reveló que, en un acto electoral del partido estuvo casi a punto de llegar a las manos con Anglada. “Aparecí con una bandera española y vino hacia mí para decirme muy alterado que me llevara ‘esa bandera’. Le dije que por esa bandera yo mataba. Ahí comenzó mi desfenestración politica”.

Por otra parte, Bellalta hace público su compromiso de sufragar los gastos del partido para que los representantes de PxC en los municipios catalanes “sean los mejores y no los que puedan pagar una franquicia a la dirección, que es como ha estado funcionando hasta ahora”.

El de Catalunya Desperta Ya! va más allá y se compromete, a cambio de que Anglada abandone la actividad política, a pagarle una mensualidad de 3000 euros de su propio bolsillo. “Sé que Josep tendría muy difícil su vuelta a la actividad laboral. Por eso estoy dispuesto a pagarle 3000 euros y a firmarlo ante notario, poniendo todos mis bienes como garantía si fuese necesario”.

Por último, Gerard Bellalta dice estar seguro de poder conseguir que PxC “triplique” en las elecciones locales de 2015 los resultados logrados en las de 2011. “La casta ya ha dejado de preocuparse de PxC porque sabe que este partido ya no inquieta a nadie, y a los islamistas mucho menos. Conmigo al frente, Plataforma sería la gran referencia para los catalanes que se oponen al nacionalismo y que sufren los problemas económicos y sociales derivados de la inmigración”. Y un último apunte a modo de corolario: “Yo he levantado de la nada cinco fábricas y puedo levantar también PxC con un equipo altamente cualificado de personas que trabajen por los intereses de los catalanes y no por los suyos propios”.