La facilidad y comodidad que ofrece la telemedicina ha puesto esta modalidad en tendencia. La digitalización de los hospitales y clínicas está más activa que nunca: conoce por qué tantos centros médicos han decidido ofrecer servicios online y cuáles son las ventajas que tienen las consultas virtuales frente a las presenciales.

La tecnología también ha influenciado al mundo de la salud. La industria de clínicas y hospitales ya cuenta con variedad de servicios de telemedicina que digitalizan todo el proceso de inicio a fin, para que sea más cómodo y sencillo, tanto para los médicos como para los pacientes.

La telemedicina es un canal de comunicación interactivo en el que el paciente puede recibir un servicio en tiempo real por parte del profesional de salud, todo a distancia. Es decir, el médico puede realizar consultas y recetar medicamentos a un paciente de forma virtual, sin desplazamientos innecesarios, desde la comodidad de sus hogares u oficina.

Las soluciones digitales de este tipo tuvieron un aumento en su uso durante la cuarentena que inició en 2020 por la Covid-19, y hoy en día se siguen utilizando debido a la gran comodidad que suponen tanto a pacientes como a los profesionales de la salud. Es posible acceder a la telemedicina desde cualquier dispositivo con acceso a internet, permitiendo, incluso, que quienes no poseen ordenador puedan utilizar el servicio mediante su teléfono inteligente.

Un servicio especializado y profesional

El auge de la telemedicina en la industria de salud ha provocado la aparición de diferentes soluciones digitales orientadas a este ámbito. Hoy en día se cuenta con muy buenos software para la digitalización del servicio médico, cada uno con distintas prestaciones y funcionalidades. Es importante conocer la calidad del software antes de invertir en el proceso de digitalización.

Vale la pena considerar excelentes opciones como Docline, una plataforma de salud digital que ha demostrado su eficacia en la prestación de un óptimo servicio de salud.

Este servicio de telemedicina posee diversas herramientas orientadas a clínicas, centros hospitalarios, aseguradoras, y empresas en general, por ejemplo, videoconsultas, consultas personalizadas por chat o llamadas, prescripciones electrónicas (homologadas por el CGCOM), reserva de citas, entre muchas más funciones que permiten gestionar el trabajo de una forma más rápida y productiva.

Gracias a Docline es posible reducir las tareas administrativas y de organización, lo cual se traduce en un ahorro en costes. Al digitalizar las tareas laborales es posible reducir el tiempo que el profesional usa en las tareas administrativas y utilizarlo en lo que realmente importa, en la atención al paciente, y centralizar toda la información necesaria para tratar los casos.

La plataforma de Docline se integra fácilmente con terceros a través de APIs. Además, se ofrece en marca blanca, lo que hace que se puede modificar la interfaz para que muestre la identidad del hospital que se quiere digitalizar. Todo esto significa que esta solución es personalizable en una buena medida, siendo la opción ideal para integrar al hospital a lo virtual.

Características de la telemedicina

La telemedicina es una disciplina que ha llegado para quedarse. Ya se han desarrollado diversos usos para ella, y si se sigue progresando a este ritmo, es posible que en un mediano plazo surjan algunos hospitales y clínicas 100% digitales. Tan grande es la eficacia de estos sistemas electrónicos.

La actividad principal de la telemedicina es, por supuesto, las consultas online. Gracias a estos sistemas virtuales es posible recibir consultas a distancia, con el médico que se prefiera y desde la comodidad del hogar. Las plataformas permiten llevar el seguimiento del paciente desde la misma aplicación, monitorizando la actividad e, incluso, se tiene la posibilidad de realizar interconsultas con otros especialistas, en caso de ser necesario.

Otro beneficio bastante destacado es el de la receta electrónica. Ya basta de tener que escribir los medicamentos en un papel: gracias a este sistema se puede optimizar la interacción entre médico, paciente y farmacia, permitiendo que todo se realice de una forma digital.

El médico solo debe seleccionar el perfil del paciente y añadir los medicamentos, las dosis y alguna instrucción pertinente. La farmacia solo debe identificar al paciente y revisar la receta, para así administrarle la medicación de una forma rápida y sencilla. Todo esto permite evitar inconvenientes muy comunes con las recetas de papel, por ejemplo, los errores de interpretación o la presión que genera esto en los trabajadores del sistema sanitario.

Otro servicio que ofrecen los software de telemedicina para hospitales son los orientados a la gestión de los pacientes. Mediante las plataformas digitales se pueden agendar las citas, acceder al historial clínico de un paciente en particular y llevar cuenta de los pagos, todo desde una misma aplicación.

Beneficios de las consultas médicas online

Al utilizar un servicio a distancia se puede evitar el acudir a un centro médico, donde puede que haya personas con alguna clase de virus peligroso. Al realizar la consulta desde el propio hogar, tanto el paciente como el médico pueden protegerse de cualquier enfermedad que se encuentre libre en el hospital. Esto fue el principal beneficio durante la pandemia del Covid-19.

Es importante, también, destacar las ventajas que ofrece la telemedicina a aquellas personas con problemas de movilidad. Los pacientes que tengan dificultades para desplazarse, ya sea por problemas físicos o psicológicos, pueden recibir consulta y seguimiento clínico desde un lugar en el que se sientan cómodos, facilitando el tratamiento y ayudando a conseguir una mejoría más rápida en su estado de salud.

Una característica muy interesante de la telemedicina es la capacidad de recibir interconsultas en casos donde esta no resulta factible. Muchas veces los dos especialistas pueden estar viviendo en ciudades muy lejanas, dificultando la comunicación entre ambos, pero gracias a las videoconsultas es posible realizar una videollamada entre los dos profesionales con el paciente, evitando el traslado a lugares lejanos.

A pesar de que la telemedicina sea tan efectiva, ocasionalmente se necesitarán consultas presenciales para realizar revisiones físicas. Sin embargo, al adelantar una consulta de forma online se puede optimizar la visita presencial, de modo que solamente se realice el chequeo físico y se pueda acelerar la revisión, ahorrando tiempo tanto al médico como al paciente. El futuro va hacia una consulta híbrida.