A pesar de que el atentado en Colorado fue cometido por un terrorista islámico, los demócratas piden concienciar sobre el “supremacismo blanco”
El lunes por la tarde en la ciudad de Boulder, Estado de Colorado, un atacante de origen sirio y practicante musulmán entró a una tienda de comidas y abrió fuego contra todos los clientes que se encontraban en el local, ocasionando la cifra de 10 víctimas fatales.
Entre estas 10 personas asesinadas se encuentra el oficial de policía Eric Talley, de 51 años y padre de 7 hijos, quien fue el primer agente en llegar a la escena y realizó una labor heroica al intentar detener al tirador mientras los otros clientes escapaban de la tienda.
A laa pocas horas, el atacante fue identificado como Ahmad Al Aliwi Al-issa, un residente musulmán que vivía en una ciudad cercana a Boulder y había nacido en Siria en 1999.
Sospechoso de tener problemas mentales y de ser un fundamentalista islámico con conexiones con el grupo terrorista ISIS, Al-issa tenía un conflictivo historial de violencia con la Policía y con sus compañeros de secundaria.
Al ser detenido por la Policía, Al-issa fue herido en la pierna, por lo que se encuentra bajo custodia recuperándose en un hospital de la zona. Estaba armado con una pistola y un rifle semiautomático.
Los fiscales a cargo del caso ya lo acusaron de 10 cargos de asesinato en primer grado y es muy posible que pidan la pena de muerte por sus crímenes.
En las primeras horas luego de ocurrido el tiroteo, en las redes sociales se comenzó a difundir el rumor de que el atacante era un hombre blanco, con ideas supremacistas y seguidor del ex presidente Trump.
Esta información no era más que un rumor sin fundamentos divulgado por periodistas de medios anti-Trump, buscando imputarle al ex presidente todas las desgracias que ocurren en el país.
En esta falsa dicotomía cayeron periodistas de los grandes medios de comunicación, celebridades de Hollywood y hasta políticos demócratas de alto rango, todos alzando su voz para que el Congreso apruebe leyes que dificulten la compra de armas para los ciudadanos.
Esta falsa narrativa también fue usada por el mismo Joe Biden, quien brindó una conferencia de prensa el día después del tiroteo afirmando de que si bien no conocía todos los datos del caso, el Congreso debía actuar urgentemente para pasar leyes que prohíban la venta de “rifles de asalto”.
La afirmación de Biden fue absurda. Además de que no mencionó que el ataque había sido un nuevo atentado terrorista en Estados Unidos, el primero en casi 3 años, ignoró el hecho que Colorado es uno de los Estados donde es más difícil comprar un arma, y que la Legislatura local, controlada por demócratas hace varias décadas, ya tiene las leyes anti-armas que ahora pide a nivel nacional.
Ese mismo día, la Secretaria de Prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, afirmó de que si los congresistas republicanos se oponen a estas nuevas reformas, Biden tomará acciones por sí mismo y pasará estas reformas que atentan contra la Segunda Enmienda de la Constitución por decreto.
La información personal del tirador, dada a conocer por la Policía en una conferencia de prensa, demuestra que el hecho se trató de un atentado terrorista islámico y no uno de violencia doméstica producido por la cultura armamentística de los Estados Unidos.
Si bien el motivo exacto que llevó al tirador a cometer este atentado todavía está siendo investigado por las autoridades, las publicaciones en Facebook de Al-issa indicaban de que el terrorista estaba muy preocupado por la islamofobia en el país y que diariamente compartía contenido fundamentalista islámico y yihadista.
El terrorista también usaba sus redes sociales para criticar las políticas del ex presidente Trump y para insultar tanto a los creyentes de la fe judía como de la religión cristiana.
El periodista Jack Posobiec complementa con información de una agencia de seguridad, sobre que el yihadista tenía conexiones con el grupo terrorista ISIS y que habría viajado a Siria en el año 2019 para ser entrenado.
Según esta fuente, Al-issa tenía planeado atentar contra uno de los actos de campaña oficiales del entonces presidente Trump en marzo del año pasado como venganza por el asesinato del general iraní Qassem Soleimani, pero el evento fue cancelado por la llegada de la pandemia.
A su vez, el trágico ataque yihadista demuestra, una vez más, la ineptitud del FBI y las agencias de inteligencia estadounidenses para alertar y evitar sobre este tipo de ataques.
Gracias a decretos firmados por los ex presidentes Bush y Obama, estas organizaciones federales tienen un enorme poder de intervención en la vida privada de las personas con el único objetivo de evitar estos ataques, pero por negligencia o miedo a discirminar, fallan en su diagnóstico.
Posobiec cuenta de que Al-issa se encontraba en el radar del FBI hace meses, pero que sus intenciones y actividad en Internet no fueron investigadas lo suficiente debido a la baja cantidad de recursos que el actual Director del FBI, Christopher Wray, está destinando a este tipo de casos.
En lugar de hacer un rastreo exhaustivo sobre la actividad yihadista en redes, el FBI está destinando la mayor parte de su tiempo y de sus recursos a investigar a los militantes trumpistas por “ideologías extremistas”.
Luego de encarcelar a la gran mayoría de los que ingresaron al Capitolio el pasado 6 de enero en las protestas en defensa de la democracia, ahora la agencia federal está derrochando recursos investigando a las personas que no ingresaron al edificio ese día pero que en redes sociales apoyó la intervención.
En su momento, Wray habló de que el objetivo final de la agencia es presentar cargos de sedición contra estos militantes, pero hasta ahora ningún trumpista ha sido imputado en este tipo de delito.
Loa amos del mundo saben que somos unos ignorantes irreflexivos altamente manipulables. Se aprovechan para conseguir el efecto contrario al lógico y esperable. Seguramente estas jugadas son de laboratorio (teoría de los juegos).
SOMOS TONTOS por creer en el enemigo
Si la gente que de verdad pasa hambre asaltara y quemara sus casas, se les quitaba la tontería del progreta rico y burgués anglosajón falsos como demonios, pero claro todos ellos están protegidos por carísimos servicios de vigilancia privada, ex-militares entrenados o sicarios .:
Ese es el modo de actuar de los narigudos intocables.
Tirar la piedra y esconder la mano, crear un problema y dar la solución para enriquecerse, llamar la atención, inspirarse en palabras solidarias ( derechos humanos, democracia, feminismo, inmigracionismo, ONG,s …etc ) para dar pena y darles la vuelta para crear lo contrario, rasgarse las vestiduras y sacar beneficio y todo sin dar la cara, como siempre…. a ver si nos damos cuenta de quien maneja los hilos.
¿Pero qué tiene que ver el judaísmo con las acciones de este terrorista islámico matando a los “infieles” y actuando de acuerdo a lo que enseña el islam en su versión pura?.
La culpa la tiene quienes permitieron entrar a islamistas en Estados Unidos, Canada, Europa y todos los países no musulmanes.
Antisemita E ignorante. Di semejantes estupideces en Israel tu nariz tendrá una espontánea cirugía estética.
Pues si, al ver la foto del atacante, un monton de artistas y politicos, incluyendo la sobrina de Kamla Harris decian cosas as estilo de “los hombres blancos son la mayor amenaza para esa pais”. Cuando salio el nombre, cambiaron de discurso.
Seguro que usarán la matanza para poder desarmar al pueblo y así poder EXPLOTAR LO e empobrecer lo, con más facilidad. PU-TOS sociatas.
Eso pretenden los democRATS pero no lo vamos a permitir quienes defendemos la Constitución de nuestro país, su Segunda Enmienda y quienes lograremos cambiar el Congreso a tener mayoría republicana en noviembre de 2022. Sabemos que estos globalistas marxistas robaron nuestras elecciones. Trump volverá al poder y tiene gente a su alrededor preparada como Mike Pompeo, Ted Cruz y Richard Grennell.