Agentes de la Policía Nacional de la Comisaría de Xirivella han detenido en Aldaia a un hombre de 28 años, de origen español, que presuntamente propinó un mordisco en un dedo a un hombre, que perdió una parte de él, tras una discusión que mantuvieron en un bar, según ha informado la Jefatura Superior de Policía en un comunicado.

La víctima, que tuvo que ser atendida en el Hospital General, es un hombre de 45 años de origen indio, cuñado del propietario del bar donde ocurrió la agresión, y en el que el presunto autor de los hechos se había tomado una cerveza que se negaba a abonar.

Los hechos ocurrieron cuando los agentes que realizaban labores de prevención, fueron comisionados por la Sala del 091 para que se dirigiesen a la calle Mayor de Aldaia, donde había un hombre ensangrentado en la calle. Una patrulla de la Policía Local que se encontraba con el herido fue la que alertó a los servicios sanitarios.

En el lugar, los policías observaron a un hombre con abundantes manchas de sangre y que se encontraba “muy agresivo”. Los policías averiguaron que, momentos antes, el hombre había mantenido una discusión con una persona que trabajaba en un bar, así como que había ingerido alcohol y pastillas para un tratamiento médico.

Según las averiguaciones de los agentes, el hombre había entrado en un bar próximo, donde había tomado una cerveza, había manifestado que no iba a abonar la consumición y se había dirigido a los aseos.

Al salir de allí, presuntamente había cogido un cuchillo de la barra y se había abalanzado sobre el encargado del bar. El cuñado del propietario, que trabajaba con él, salió en su defensa, momento en que el cliente le mordió en el dedo índice derecho.

El propietario y su cuñado huyeron del establecimiento y se refugiaron en un restaurante próximo, hasta el que fueron perseguidos por el cliente. No obstante, el dueño logró arrebatarle el cuchillo que posteriormente entregó a los agentes. Minutos más tarde cuando ambos hombres se dirigían a su establecimiento, observaron cómo el sospechoso le fracturaba el cristal de la puerta y huía, aunque fue interceptado momentos después por una patrulla policía. El detenido, con numerosos antecedentes policiales, pasó a disposición judicial.