Muere José Ángel de la Casa, la voz de la Selección Española
José Ángel de la Casa Tofiño (Los Cerralbos, Toledo, 1950) ha fallecido esta mañana en Madrid a la edad de 74 años después de haber ingresado anoche en el Hospital Puerta de Hierro.
El histórico periodista ha sido la voz del deporte español durante más de 30 años. Su inigualable estilo forma parte del recuerdo de generaciones que siguieron especialmente el fútbol y el atletismo con su aterciopelada voz que se fue apagando en los últimos años debido a la enfermedad del Parkinson.
De la Casa narró tres décadas del deporte español en TVE y nos contó el fútbol y el atletismo con su inigualable estilo, con su ‘gallo’ cantando el gol de Señor en el 12-1 a Malta como un sonido para el recuerdo.
Fueron más de 2.000 retransmisiones deportivas las de José Ángel de la Casa en los 30 años que dejó su sello en RTVE. Empezó en 1977 narrando los Campeonatos de España de atletismo en pista cubierta y acabó su carrera en TVE con un España-Islandia en 2007 antes de un ERE que le obligó a jubilarse por adelantado.
Seis Mundiales y seis Juegos Olímpicos, un sinfín de goles y de momentos únicos en la historia del deporte español como la medalla de oro de Fermín Cacho en Barcelona 92, el gol de la Séptima de Mijatovic, el de Koeman en la primera Copa de Europa del Barça, la noche mágica de Butragueño en Querétaro y por supuesto aquel inolvidable 12-1 a Malta junto a un buen puñado más de historias para el recuerdo.
José Ángel de la Casa eligió el micrófono antes que el fútbol. En 1974 era jugador del Talavera en Tercera división, pero una grave lesión de rodilla unido a su pasión por el periodismo le hicieron elegir entre fichar por el Rayo -que estaba en Segunda- o por RTVE y su apuesta le convirtió en una leyenda de nuestro periodismo.
Narrador sereno, director de Estudio Estadio, premio Ondas, reconoció en su última entrevista en MARCA en diciembre de 2023 que le faltaron dos sueños por cumplir: “Me hubiera gustado presentar un telediario y jugar al menos un minuto con la camiseta de la selección española”.
Una referencia en la profesión
Empezó solo en su camino como periodista gracias a su admirado Juan Antonio Fernández Abajo -“fue mi maestro, con él iba al fin del mundo”- y luego encontró a los reporteros a pie de campo como Paco Grande o Alfonso Azuara en el España-Malta y comentaristas como Di Stéfano, Míchel, Julio Salinas y Julen Guerrero, presente en su despedida en Palma de Mallorca allá por 2007 en un España-Islandia con gol de Iniesta. También apostó por Juan Carlos Rivero, que tomó su relevo como narrador de la selección.
De la Casa tuvo buen ojo con los fichajes: en el Mundial de Italia se llevó a Juanito y a Michael Robinson, que hizo pareja con Luis Fernández. Y Di Stéfano, tan peculiar como inigualable: “Era un personaje aparte, trataba con la gente que le gustaba y yo al principio me sentía extraño hasta que se acercó mucho a mí y todo cambió. Di Stéfano requería un tratamiento especial”. Una de las primeras tertulias televisivas, si no la primera, la creó José Ángel con Manolo Alcántara, Alfredo Di Stéfano y José Luis Garci en Estudio Estadio.
Míchel, el hoy entrenador del Al-Qadisiyah en la Liga saudí, fue uno de sus compañeros de micrófono durante una década y también dejó palabras para el recuerdo sobre José Ángel: “Fue como un entrenador para mí. Saber abstraerte, dar tu opinión, no criticar a nadie, ver el fútbol con pasión y sin colores. Eso lo aprendí de él, que era muy comedido. Me decía por ejemplo: habla lo que quieras pero las áreas son mías, donde está la emoción. Todo me sirvió para ser mejor comunicador y aprender como entrenador. Lo comedido e instructor en su narración no está valorado porque se aleja de ese comentarista gritón y de bufanda. Seguramente se le reconocerá cuando no esté”, dijo a MARCA hace un año.
Dos hijos periodistas
Sus dos hijos siguieron los pasos de José Ángel. El mayor, Juanma, es uno de los narradores de Movistar + y retransmite partidos tanto de Segunda como de fútbol internacional. El pequeño, Javi, que trabaja en el departamento de prensa del Real Madrid femenino, empezó su carrera como periodista en Radio Marca.
“Él conocía la enfermedad del Parkinson porque la había vivido en casa con mi abuelo. Para mí es un ejemplo de fortaleza. En el plano personal con el paso de los años me he dado cuenta de todo lo que su persona representa en el mundo del periodismo, cómo le aprecian sus compañeros y cómo los telespectadores le recuerdan con cariño. Desde pequeño he podido vivir muchas experiencias personales ligadas al mundo del deporte gracias a él”, nos contaba hace un año Javi.
“Es un ejemplo de valor, lucha y positividad ante las adversidades. Es ejemplar verle cómo, a pesar de lo jodida que es la enfermedad, jamás se queja y jamás pone mala cara. Siempre lucha”, contó a MARCA su hijo Juanma el día de la entrevista a su padre.
Más de veinte años luchando contra el Parkinson
Vivía entre su pueblo toledano de Los Cerralbos y la casa de sus hijos en Madrid regateando al Parkinson, la enfermedad que llegó a su vida allá por 2004 cuando un extraño temblor en la mano durante la Eurocopa de Portugal le trajo el recuerdo de lo que su padre pasó antes de morir.
Desde entonces, José Ángel sintió que era el momento de visibilizar la lucha contra una enfermedad a la que le ha puesto voz combatiéndola con deporte -el golf como terapia- y cantando Sabina, Los Secretos, Fito y Los Fitipaldis y Maná para no perder la capacidad en el habla con el paso de los años.
Más de veinte años después y con la compañía de 18 pastillas diarias, José Ángel de la Casa siguió dando voz a la lucha contra la segunda dolencia neurodegenerativa más frecuente después del alzhéimer y que en nuestro país la sufren unas 300.000 personas. Con un hilo de voz, pero con el convencimiento de que lo que contó en el documental ‘Un Señor de la Casa’ bajo la dirección de Ander Duque ayudó a mucha gente “a enfrentarse a la enfermedad”. La voz del deporte de toda una generación era la voz de los que luchaban contra el Parkinson y hoy se ha apagado. Descansa en paz, José Ángel.
Gran profesional. Recuerdo el partido en el Sánchez Pizjuán en Sevilla aquell diciembre de 1983 frente a Malta con el 12-1 y como a l gran José Ángel de la Casa se le rompía la voz con el gol de Señor. Que descanse en paz