El gran fracaso de España, que ya es un Estado semifallido
Francisco Rubiales.- Acabamos de celebrar el 45 aniversario de una Constitución fallida, que ha sido incapaz de asegurar en España la democracia, la Justicia y la concordia,
La estamos celebrando rodeados de dramas: desconfianza en el gobierno, inquietud ciudadana ante el futuro, fracaso de las grandes instituciones, pérdida de prestigio de la Monarquía, divorcio entre políticos y ciudadanos, desconfianza de los administrados en sus administradores y un largo etcétera de vergüenzas, frustraciones y retrocesos.
La Constitución que tenemos ha hecho posible que canallas y corruptos ocupen los altos cargos del Estado y que hoy se esté demoliendo la unidad, la igualdad y la decencia desde la misma presidencia del gobierno.
Esta constitución que tenemos ha permitido que la corrupción española sea de las más brutales del mundo y que miles de políticos se enriquezcan ilegalmente.
La Constitución ha sido redactada para otorgar todo el poder a los partidos y marginar al ciudadano, que no pinta nada en el sistema.
Su texto está lleno de ambigüedades y carece de claridad suficiente para que las reglas y normas queden claras y no sean interpretables desde la miseria y la bajeza, como está ocurriendo ahora con la amnistía.
Con esta Constitución vigente se han indultado a delincuentes, se ha roto la igualdad entre españoles, se reparten fondos clandestinos, se gobierna con opacidad, se gastan los fondos reservados como si fueran la Caja Secreta de Al Capone, se ha condenado a inocentes, se ha politizado el poder judicial y se ha permitido que el Congreso y el Senado, en lugar de ser templos de la palabra y del debate, sean corrales donde los privilegiados defienden a sus respectivos partidos, sin decoro, con chulería y sin verdad.
La Constitución que nos hemos dado hace posible que los poderes del Estado estén prostituidos y controlados por el poder Ejecutivo, que los españoles estemos enfrentados unos con otros y que el futuro sea amenazante.
Esa Constitución que preside nuestras vidas hace posible que la inseguridad y el miedo domine a los españoles, que el gobierno mienta con impunidad y que las fechorías de los poderosos siempre queden sin castigo.
Nuestra Constitución, en manos de miserables, se torna miserable y en lugar de defender al ciudadano lo aplasta y esclaviza.
La España de Sánchez, que es un empedernido violador de la Carta Magna, está llena de miedo y carece de confianza en el futuro y de lo que es decisivo en una nación: objetivos y metas comunes.
Una Constitución que después de 45 años de vigencia es capaz de sustentar una tiranía como la sanchista, sin que las instituciones defensivas hagan nada por librar al país del depredador, no es una Constitución válida.
Es un texto tan devaluado y prostituido, al que le han perdido el respeto los partidos políticos y las instituciones, ni siquiera puede salvarse con una operación a corazón abierto y lo que necesita es un buen entierro para dejar paso a una nueva Ley de Leyes que garantice todo aquello que España no tiene: libertad, democracia, justicia, unidad, decencia, valores, fortaleza, limpieza, verdad y pujanza.
España es ya un Estado fallido porque es incapaz de librarse de un gobernante desquiciado que la está conduciendo a la ruina y al fracaso.
Con una Constitución respetable, respetada y democrática, Sánchez estaría en la opacidad o en un psiquiátrico, en lugar de estar en la Moncloa, al frente de una gran nación. La locura de Sánchez es la locura de España, una nación que ha dejado de ser grande después de las fechorías recientes de u gobierno, el que está hoy negociando con delincuentes que odian a España, en el extranjero y con incomprensible impunidad, los destinos de nuestra patria.
Antes de escribir este artículo he hablado con algunos constitucionalistas y todos coinciden en su planteamiento, pero dos de ellos me han advertido que es mejor no tocar la Constitución actual porque tanto si es reformada como si es sustituida, sus redactores serán los mismos sinvergüenzas y corruptos, de derecha, izquierda o nacionalistas, que nos están llevando al desastre.
Hay que comenzar de nuevo, los partidos separatistas o regionales no tienen cabida en el Congreso Nacional, y la actual Constitución dice tantas tonterías que lo mejor es enterrarla y hacer una nueva con pocos artículos pero muy claritos y a partir de ahi construir la nueva España lejos de la OTAN y de la UE y sabiendo quienes son nuestros enemigos, comenzando por los traidores que hay tan abundantes.
Lo es desde hace tiempo, parece que nos enteramos ahora.
España no es un Estado fallido y Francisco Franco lo demostró durante 40 años. Lo realmente fallido son nuestros políticos constitucionalistas que sólo se representan a ellos mismos y viven para enriquecerse. Ya está demostrado que en España se ha vivido mejor con Francisco Franco 1939 – 1975 con la Autarquía que no dependíamos de ningún país extranjero y éramos autosuficientes.
Francisco hizo mucho mucho mucho daño al beneficiar de forma grosera a la región catalana fastidiando a otras, y trayendonos al borbon,
Partiendo de la realidad de aquella época, está claro que sólo cabía actuar desde lo que era posible, muy tasado por las circunstancias, , lo que no quita que el resultado a lo largo del tiempo no haya sido el deseado,.además de que para valorarlo justamente hay que tener en cuenta la calidad de los diversos actores implicados que han ido demostrando hasta dónde llega su deslealtad, su ordinario actuar, su
desagradecimiento.
¿ Acaso es criticable el que tiene los arrestos de hacer lo que puede en este mundo miserable del que no se puede esperar la menor consideración ?
Cuando estudié la carrera de Derecho en Barcelona me leí con detenimiento la Constitución del 78, era el año 1991:y llegué a la terrible conclusión que la infame del 78 era una auténtica bomba de relojería que explotaría en unos cuantos años en Vascongadas, sólo me equivoqué en el lugar geográfico y no me podía imaginar que comenzaría en mi tierra, Cataluña. Prácticamente todo el articulado, títulos y capítulos ( con la excepción del Título II Capitulo III – DE LOS PRINCIPIOS RECTORES DE LA POLÍTICA SOCIAL Y ECONÓMICA – que es muy aceptable pero es papel mojado) ,son un… Leer más »
Semifallido ???? solo ????
Que constitución ni que leches?. Aquí lo único que falla es el sistema electoral, que ninguno de los grandes partidos léase psoe o pp cuando han tenido la mayoría absoluta se han preocupado en cambiar, lo que demuestra que estos cerdos y todos los demás apestosos políticos de cualquier partido no laboran por España, sino por los repugnantes de la nariz larga, que están empeñados en meter sus enormes narices en este país para mayor gloria y destrucción de nuestro sagrado país. cuanto traidor repugnante vendido por el puto dinero!!, que asco!!, que repugnancia!!. España una e indivisible, que sepais… Leer más »
Y la alternativa que ofrece usted cuál es?